Mis Dos Adorables Problemas/ Min Yoongi

Capítulo 27.-

 

Los "tres" tristes días de descanso de Yoongi llegaron a su fin con una noche de películas y dulces con Mariel y los pequeños, después de haber pasado más de dos horas viendo con Haneul como Sunhee, Jungkook y Mariel bailaban. Disfrutó bastante todo y en esa mañana en la que ya estaba bajando a desayunar para ir a trabajar, solo quería quedarse en casa para ver a Ari dar clases y después ver a su ahijada tomar sus clases de baile donde su carita se iluminaba cada que aprendía algo nuevo.

-Buenos días- saludó Yoongi sentándose a la mesa donde las niñas estaban casi cayendo de sueño, se habían desvelado un poquito los cinco juntos -Creo que aún deberían estar en la cama.

-Ellas quisieron bajar para desayunar contigo, pero parece que no van a aguantar -susurró Mariel, pero las niñas la escucharon perfecto.

-Si podemos- contestó Sunhee con el ceño fruncido sin alejar su vista de su plato de comida.

-Muy bien, gracias por querer estar conmigo- dijo Yoongi divertido, viendo como Haneul, quien es la más habladora, estaba en silencio, cabeceando por el sueño.

El desayuno pasó en un silencio que era pocas veces interrumpido por las risas de los adultos al ver cómo las niñas intentaban comer, pero ni siquiera podían llevar la cuchara a sus bocas. Yoongi se apresuró a desayunar para no mantener más a las niñas ahí, llevó sus platos a lavar y fue con las niñas, poniendo una mano en el cabello de ambas para dejar un besito en la frente de ambas.

-Vayan a dormir en cuanto terminen, ¿si?- las pequeñas asintieron vagamente, una de ellas soltando un descarado bostezo -Las amo mucho.

-Te amo mucho- respondió Haneul, Sunhee solo asintió a lo dicho por su hermana, haciendo reír a los adultos.

-Llevalas a dormir en cuanto me vaya- se acercó el mayor y hasta que sus rostros quedaron muy cerca, aprovechando para dejar un rápido beso en la comisura de los labios de Mariel -Ten un buen día, Aricita.

-Tu igual- murmuró un poco desconcertada. Aún así lo acompañó tímidamente hasta la puerta de entrada, lo despidió con la mano y regresó dentro con las gemelas, divirtiéndose un poco solo de cómo caían dormidas dentro de los platos de comida.

Yoongi estaba en su descanso junto a Hoseok, en la tienda de conveniencia que estaba frente al restaurante, se rehusaban a comer en el restaurante en que trabajaban por los malos comentarios que su superior soltaba siempre.

-Deberías tomarte más días libres, ¡te ves radiante!- chilló Hoseok tomando al pálido de las mejillas.

-Basta- retiró las manos de su amigo con delicadeza y una sonrisa tímida -No es por el descanso, es por Mariel-.

-Oh- se acomodó en su silla y miró a su mejor amigo con una sonrisa y mirada pícara -Cuentale todo al tío Hobito-

-Es perturbador que te llames así cuando no están las niñas- se burló, acomodándose también y dándole un sorbo a su jugo de naranja -Me dio permiso de volver a conquistarla, Hobi, no sabes lo feliz que me hicieron esas palabras-

-¡Pero eso es genial!- hizo un ruidito gustoso y alegre por su amigo, tomando la mano del contrario y apretandola -No lo vayas a desaprovechar, ustedes serían una pareja preciosa y estoy seguro que se harán muy felices.

-Me apenas- susurró el mayor tapando su sonrojado rostro con ambas manos.

Se estaban riendo, planeando y hablando como Yoongi debía conquistar a la menor, cuando llegó uno de los asistentes de cocina frente a ellos, saludó y se dirigió a Yoongi.

-Señor, una tal Jeon Mariel lo está llamando -avisó, señalando la puerta del restaurante de donde Yoongi no había sacado su celular.

-Que raro, nunca te llama cuando estás acá- dijo Hoseok, levantándose seguido del chef. -Debe ser importante.

-Si, entremos Hobi.

Regresaron juntos al restaurante y Yoongi fue directo al pequeño casillero que le pertenecía para sacar su celular que ya no estaba vibrando, Hoseok le dio una palmadita en apoyo y salió para darle privacidad al llamar al mayor.

-¿Yoon?- a los tres tonos, Mariel contestó, su voz se escuchaba apresurada -Creí que no contestarías, perdón por llamar así.

-No te preocupes, Ari, estaba en mi descanso ¿qué pasa?

-Estoy en una reunión con el director y productor, por las fechas, pero me acaban de llamar de la escuela porque Hannie no se siente bien- dijo, la pena inundaba su tono de voz.

-¿Le pasó algo? ¿Qué tiene?- su preocupación se volvía más grande con el silencio de la menor -Jeon, habla.

-La maestra dijo que le duele el estómago y Sunnie no se quiere separar de ella. Los chicos están en viaje escolar ¿puedes ir?- más voces haciéndose presentes para Yoongi del otro lado de la línea.

-Claro, yo voy, tú no te preocupes- sonrió al teléfono a pesar de que sabía que no la vería, pero él solo se alegraba de poder ayudarle.

-Lo siento, Yoonie, lo compensaré- susurró la menor, ya un poco apenada de la situación 

-No tienes porque disculparte, son mis niñas también- dijo, viendo a su superior llegando a esa habitación y él dándose cuenta que ya debía volver al trabajo -Vuelve a tu reunión, te aviso lo que pase con Haneul.



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En el texto hay: yoongi suga, minyoongi, yoongi bts

Editado: 17.11.2021

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