15

Capítulo 15

"Si te digo que tocar tu mano
A veces llega a confundirme
Que la idea de cruzar el límite, es irresistible"

Sebastián

A veces divago en mis pensamientos y me pregunto ¿qué pasa conmigo?  Tengo a mi familia a mi lado, a mis casi diecisiete años tengo una cuenta bancaria con más dinero que el promedio a mi edad, tengo trabajo, una novia bonita e inteligente, estoy por ser seleccionado para jugar fútbol profecionalmemte y amigos increíbles como Biga, Ricardo y Alex, debería de estar feliz en lugar de estar preguntándome tonterías. Es solo que a veces me siento incompleto y extraño.

Hoy era un día de esos, pensaba salir con Hanna a dar la vuelta, después de una semana de no vernos, ya que ambos estábamos ocupados, ella en examenes y yo iniciando las grabaciones, pero al parecer, mi cuerpo no tenía muchas ganas de salir con  mi novia. Alguien más estaría emocionado por encontrarse con la persona que se supone debería estar en tu mente todo el día, pero yo, me sentía tan estresado, no sabía con exactitud lo que me pasaba, solo se que lo único que quería era salir a patear algún balón con Alex, últimamente me paso la mayoría del tiempo con él , me divierto mucho cuando vamos al parque, a su casa o a la mía a "practicar" después de grabaciones. Dice que si entrenó más me servirá para mejorar mi condición. Es entretenido. Pero a la vez es... ¿Cómo decirlo? Raro, es como una sensación en el estómago de hormigueo, parezco estar nervioso todo el tiempo, incluso a veces me estremezco, como si miles de corrientes eléctricas atravesarán mi piel, no lo se solo debo admitir que me inquieta. No me gustan estas sensaciones

—Sebastián. Es tu turno de grabar— mis pensamientos fueron interrumpidos por la chica de staf, hoy grabariamos en una escuela que se encuentra a pocos metros de la televisora—Sebastián, date prisa—

—Ya voy Gema— salí de mi camerino y a lo lejos pude ver a Alexander platicando con Bárbara, no pude apartar mis ojos de ellos. Di un fuerte aplauso para llamar su atención y cuando lo logre, por alguna extraña razón fingi que no los había visto—

—Oní, ¿ya vas a grabar? —Alexander me había comenzado a decir Oní desde que le conte que cuando era un niño como de 5 años, no sabía pronunciar mi apellido, y decía Oní, en vez de decir Orconí, dice el que debi verme muy tierno así que ahora el me llama asi

A pesar de haber oído lo que me dijo Alexander, me hice el desentendido, mi comportamiento era extraño, me sentía más bipolar y dramático que antes—Te estoy hablando Sebas—

Senti el toque sutil de la mano de Alex sobre mi hombro

—Ah... Alexander, no te había visto. ¿Necesitas algo? Estoy apurado— me miro extraño y negó con la cabeza. Después sonrio

—¡Oh! No... —se quedó callado unos segundos—nada solo, volveré con Barbi— rodé los ojos y seguí mi camino. ¡Que manera de quitar el tiempo!
 

******
 

Las grabaciones iban muy bien, tan bien que decidieron adelantarme una escena más, donde me tocaba grabar una discusión con Alexander y Ángel, quien interpretaba a un maestro de ambos

Estaba esperando a que terminará esta escena, para seguir con la de nosotros, lo miraba sonreír, hacer gestos, era buenísimo en esto, parecía una persona diferente cada que la palabra acción era dirigida a él, pero a la vez, la esencia de Alex nunca desaparecía

Sentí como vibraba mi celular, lo tomé para ver que sucedía y vi que era un mensaje de  Hannie, "Hola Seb, espero estés teniendo un buen día. Solo te hablaba  para decirte que mañana no tengo examen, si quieres podemos salir o ¿podría acompañarte a tu práctica?, me muero por verte en acción" pude leer. La verdad es que saliendo de aquí tendría que irme directo al entrenó, ya que el tiempo no me daba para nada más que salir y llegar al club, no podría pasar por Hanna. "Ten buen día también bonita, ¿Te parece si lo dejamos para otro día? Adelantaron algunas grabaciones y no podré recogerte, te llamo en la noche"
 

—Sebas, ya es hora. ¿Listo para la acción? —sonreí al ver la forma en que movía sus cejas. Tiene un pequeño tic, cuando está emocionado suele subir y bajar ambas cejas, aunque el movimiento es más notorio en la izquierda—recuerda que debes odiarme—

—Te ves raro haciendo eso— dije mientras llevaba mi mano a su ceja y se la tocaba, mientras sonreía de manera boba — siempre te odio, no será difícil actuarlo—me burle

Alexander sonrió y se fue directo a su camerino a cambiarse de ropa
 

*******

Definitivamente me estaba volviendo bipolar, en las últimas semanas me encuentro triste, nostálgico, deprimido y a la vez me siento feliz, emocionado. Mi estómago siente un vacío, que en ocaciones puedo descifrar como placentero ¡no quiero sentirme así!

Ahora realmente me sentía frustrado. Volví a invitar a Alexander a la práctica y todo iba muy bien, grabamos la escena, que fue perfecta, pero, salimos de la televisora y afuera lo esperaba un chico alto, delgado pero marcado, su cabello era lasio de un negro intenso, ojos color gris.

Se saludaron muy efusivos, se abrazaron, pude escuchar que su nombre era James y a mi compañero se le ocurrió que sería buena idea llevarlo con nosotros y lo invitó a mi práctica sin preguntarme, obviamente me moleste, pues ni siquiera me pregunto pero no quise ser grosero y no dije nada. No conforme con eso, ellos ni prestaron atención al entrenamiento, se la pasaron hablando todo el tiempo y se reían y no nos tomaban en cuenta.