Capítulo 1: Gajes del oficio

Centré mi vista en la taza de café, y me puse a pensar en las ganas que tengo de irme a mi casa, para poder dormir algo.
Hace treinta y seis horas que estoy de guardia, y sólo pude cerrar mis ojos quince minutos, hasta que apareció la doctora Adams gritando a los cuatro vientos.

-Tiene cinco meses de gestación - dijo Patty sentándose conmigo, mientras coloca su bandeja sobre la mesa de la cafetería - hace un rato estuve con la ginecóloga, es aburrida esa especialidad ¿no crees?

Me encogí de hombros y sonreí de costado - aún no la he probado - cerré mis ojos fuertemente - hace unos minutos vengo de radiología, temía que con la contusión que tuvo en la cabeza, tenga hemorragias internas - sobé mi nariz cansado - y adivina lo que descubrí.

Patty hizo una mueca - hemorragia en el lóbulo temporal - sonó más una afirmación que pregunta, sin embargo tiene razón.

Asentí lentamente y alcé mis cejas - al parecer ésta tarde me encargaré de ella en neurología, con el doctor Stone, lo más probable es que tengamos que ir a cirugía - le sonreí emocionado - al fin algo bueno.

Patty bufó por lo bajo mientras come un poco de su sándwich - no es justo, a ti siempre te tocan las cirugías, por ahora lo único que hago yo - alzó sus cejas y negó lentamente - fue ser la ayudante en ginecología.

Reí por lo bajo - tranquila, es nuestro primer año de residencia - alcé una ceja - y por lo visto dicen que la doctora Adams es una de las más exigentes, en algún momento te dejará hacer cirugías - bebí un poco de café - ¿sabes algo de Matthew? Cuando la doctora Adams vea que no estuvo con nosotros en la sala de Emergencias, se pondrá muy molesta.

Patty rió - ya lo creo, no entiendo como esa mujer puede gritar tanto, y nunca se queda sin voz - hizo un leve silencio - en ese aspecto se parece a mi mamá.

Largué una leve carcajada y sacudí mi cabeza al ver que por detrás viene Adams a paso rápido - ahí viene - le susurré a Patty mientas nos ponemos de pie.

-Akers, Holloway - hizo una mueca y alzó sus cejas - tienen trabajo que hacer - dijo mientras nos entrega una planillas - por cierto, ¿donde está el doctor Jones?

Con Patty intercambiamos miradas y nos encogimos de hombros - quizás esté en las habitaciones de descanso - alcé una ceja - hace rato.

Adams nos fulminó con la mirada - cuando lo vean, díganle que me busque. Ya de por sí, es estresante de que los mellizos Thomson estén ausentes hoy, como para que Jones desaparezca. ¿Por qué de todos los practicantes me tocaron ustedes cinco? - rodó sus ojos mientras se iba negando lentamente.

-Creo que nos odia - Patty se cruzó de brazos.

-¿Creo? Yo diría que es más una afirmación - suspiré profundo y vi de reojo la planilla - ¿por qué crees que a los mellizos le dieron el día libre?

Patty alzó sus hombros - no lo sé, Loren no me quiso decir nada y Tristan me ignora todo el tiempo - arrugó su frente - no sé que le pasa.

Asentí lentamente - iré a ver si encuentro a Matthew, espero no encontrar algo que me genere un trauma - reí por lo bajo al ver la cara de asco de Patty.

Sonreí de costado mientras iba hacia la sala de descanso. En el camino varias personas me detuvieron, para preguntar acerca de como estaban sus parientes, y yo no sabía que decirles, ya que no estoy en todos los casos.
Pero bueno, ya estoy acostumbrado a recibir malas miradas, malos comentaros y también abrazos, alagos. Lo entiendo, debe ser preocupante estar horas esperando una respuesta...aunque también tienen que entender a los médicos, tenemos cientos de pacientes al día y hacemos lo posible (por lo menos yo) en poder ayudar a todos los que pueda.

-Matthew - susurré mientras abro la puerta lentamente - ¿estás... - sentí unos ronquidos - dormido.

Suspiré profundo, y me acerco al lado suyo. Incliné mi cabeza y con un pie pateé su pierna.
Éste se sobresaltó, y pegó su cabeza con la cama de arriba.

-¡Vincent! - cerró sus ojos - ¿¡quieres matarme de un susto?!

Alcé una ceja - Adams te busca, y yo que tu me preparo para escuchar sus gritos - le tiré una planilla en su pecho - al menos pudiste dormir algo.

-¿Quien dice que dormí todo éste tiempo? - dijo abriendo la plantilla.

Alcé mi mano - okey, no quiero detalles. Me iré - abrí la puerta rápidamente, y fui directo a la habitación 142, para ver a la paciente sin memoria.

Acomodé mi bata, luego mi estetoscopio, soné mi cuello y suspiré profundamente. Tengo que dar un buen diagnóstico con ella, si luego quiero que el doctor Stone me elija para la cirugía.
Tú puedes Vincent, tú puedes.

-¿Hola? - dijo con sus ojos vidriosos, lo cual fue lo primero que vi cuando ingresé a la habitación - no sé como me llamo, no se como se llamará mi bebé, no sé si tengo familia, no sé quien soy - tomó su cabeza desesperada y noté que su ritmo cardíaco comenzó a aumentar.

-Para eso estoy aquí - alcé mis manos y fui hacia ella - para ayudarte, a ti y a tu bebé. Pero para eso necesito que te tranquilices, ya que te podrías hacer daño - dije viendo los monitores, para verificar que todo esté bajo control.