Mía no había visto, a la chica que la había salvado, después del funeral de Erik, a pesar de haber cerrado el asunto, aun a veces se pregunta, que hubiese pasado si Tenisse no hubiese evitado que se autocorrompiera.
En fin, ahora lo importante para Mía era cuidar a su hermano, pasar sus clases, y saber quién es Moonlight. Ya que la amaba con el alma y le dolía el hecho de que estuviese con otra persona, pero la respetaba dándole su espacio.
También estaba Teresa, que a pesar de que era amigas, y que ella solo confía superficialmente en Mía, pero tenía la posible sospecha de que esta fuese Moonlight.
No podría confirmarlo, pero tampoco negarlo, además de que tiene actitudes muy parecidas a su amada, pero a Teresa no la ha visto con ningún novio o novia cerca, solo la rutina de siempre; ir a la escuela y regresar a la casa de Tomás, lugar en la que menciono que se quedaría el resto del año.
A pesar de existir demasiadas coincidencias, Mía no tenía manera de atar cabos y decir que Tomás y Teresa fuesen la misma persona, ya que biológicamente era imposible. Solo podría tener sospechas de que Teresa pudiese ser Moonligh, pero la pregunta era, si fuese así, Teresa no podría vivir en los Estados Unidos, así que solo podría ser una terrible coincidencia del destino, o que Teresa estuviese mintiendo a todo el mundo, pero Mía descartó lo segundo ya que era muy improbable.
Llamó a Amy y a Teresa para hacer una pijamada en su casa, ya que quería afianzar lazos con ambas por lo que organizó todo, para que saliera perfectamente bien.
Ambas aceptaron y llegaron después de almuerzo el día sábado, después de acordaba la pijamada, Amy llegó primero con un muy buen ánimo, pero en cambio, Teresa llegó con un ánimo un poco bajo, ya que al parecer estaba enferma, pero nunca cancelo ya que tenía ganas de asistir.
Mía había arreglado toda la casa, comprado los comestibles, cojines adicionales, y además de sobornar a su hermano para que no interviniera en la noche de chicas, así que le hizo un intercambio de habitaciones, ya que Mía tiene un computador nuevo y Luis quería jugar en el y así tener la experiencia de estar por primera vez frente a un computador.
Así que Mía logro a tiempo tener todo listo cuando llegó Amy y ella lo primero que hizo fue lanzarse a los cojines que estaban en el suelo del living, por lo que Mía se rió a carcajadas por la acción infantil de Amy, pero luego se puso seria ya que recordó que ella era bastante infantil, y se sonrojó levemente.
Cuando llegó Teresa, lo primero que hizo fue preguntar por el baño y casi empujando a Mía, fue casi corriendo, lo que provoco un desconcierto en las dos chicas que estaban presente.
Al salir, dijo que estaba con el estómago al revés y que había estado así todo el día, pero las dos sospechaban que podría no ser eso lo que le sucedía, ya que eran mujeres y era raro que de un día para otro estuviera con nauseas.
Teresa no quería discutir con nadie, así que solo se dejó caer a los cojines para descansar, ya que, aunque no lo mencionó, pero era tercera vez que vomitaba en el día por las náuseas normales del embarazo, pero en cierto modo estaba preocupada, ya que no había comido mucho, así que después de descansar, decidió ir a la farmacia, pero a pesar que tanto Amy como Mía quisieron acompañarla, Teresa se negó, debido a que podrían enterarse de su embarazo.
Salió en dirección a la farmacia, a paso lento, afortunadamente la farmacia se encontraba a 5 cuadras de la casa de Mía, por lo que no tardaría tanto en su travesía, aunque no podía negar que tenía miedo.
Cuando estaba a punto de llegar a la farmacia, sintió que la estaban siguiendo pero antes de que pudiese voltear para ver si efectivamente la estaba siguiendo, le taparon los ojos y boca.
Sintió posteriormente que la tomaban estilo princesa, y que la llevaban a alguna parte totalmente desconocida, por un corto tiempo ya que cuando se dio cuenta, la depositaron en el suelo, pero sin posibilidad de destaparse los ojos, aunque en si la boca le fue destapada para que no se ahogara.
-Tal vez te preguntaras quien soy y eso te lo responderé luego, ahora necesito que estés tranquila - dijo la persona desconocida, mientras se sentaba en el piso.
-Me encuentro tranquila, ya que tengo la sensación de que eres alguien que, tal vez conozca - mientras se apoyaba en una muralla que encontró, sin quitarse la venda de sus ojos.
-¿Pero estás bien?... ibas hacia la farmacia.
-Solo iba a comprar algo para el estómago, pero nada de preocuparse, gracias - mientras se dejaba caer suavemente al suelo, para ponerse mas cómoda.
-Si quieres puedes quitarte la venda... además cualquier mujer embarazada sabe que no puede tomar medicamentos sin recomendación de un médico.
-Pero... ¿cómo has sabido que estoy embarazada? -preguntó Teresa mientras se quitaba la venda y veía a la misma chica que vio hace un par de meses atrás.
-Moonlight... soy portadora de un liry bastante particular y puedo ver el tiempo de vida de una persona, y en tu caso puedo ver dos líneas de tiempo, eso quiere decir que estas esperando un hijo... además sé que me viste cuando ayude a Su... perdón a la muchacha que estaba a punto de corromperse.