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Martijn's POV'S.





 

Me acomodo las gafas y entro en la Universidad, mientras paso desapercibido --como siempre-- voy hacía mi casillero y saco mis libros, mientras pongo ahí unos cuadernos que tocarán luego, no quiero llevar mucho peso en la mochila. 





 

Cierro el casillero y camino hacia el Salón, pero mi mirada choca con una de las populares,  frunzo los labios y miro hacía otro lado, mientras sigo mi camino. Pero algo me jala de la mochila, generando que mis libros caigan y que yo quede a centímetros del suelo. 





 

--Miren,  a quien tenemos aquí-- dice Alan a mis espaldas y yo ruedo los ojos, este maldito siempre a abusado de las demás personas y eso me incluye. 





 

--Sueltame-- murmuro molesto y el con sus amigos ríen. Idiotas. 





 

--Tu lo pediste-- dice Alan y me suelta, mientras yo caigo de trasero al suelo. Todos se retiran riendo y yo tomó mi mochila, para hechas todos los libros y Cuadernos ahí. 





 

Hasta que una mano roza la mía, Frunzo el ceño y miro a la causante de ello, hago caso omiso y sigo con lo mío. 





 

--Toma-- dice ella y me da un libro, lo tomó y me levanto, para ir hacía el Salón, pues el timbre acaba de sonar. 






 

--Hey, ¿cómo te llamas? -- pregunta y yo casi carro, hacía mi clase de Biología. Mientras miles de pensamientos en mi cabeza dicen que me aleja de ella. No es buena. 





 

--Mierda-- mascullo entre dientes, cuando mis lentes se caen y no veo nada, me agachó a buscarlos, pero ella los pone en mis manos, me los pongo rápido y me levanto de ahí--Gracias-- digo y la chica abre la boca para hablar, pero yo salgo corriendo de ahí, no es como si me causara tanta confianza, además que tengo que mantener distancia con los populares. 





 

Corro por los pasillos, mientras el corazón me quiere salir del pecho,  no tengo una buena condición física y ahora esto. Joder si que el destino me odia. 





 

Me tranquilizó cuando en mi visión aparece una puerta, con el nombre de el área "Biología" En grande, voto todo el aire y me acomodo, mientras toco la puerta. 





 

--Buenos Dias-- lo saludo al profesor y este me mira con mala cara, mientras abre más la puerta para que pueda pasar. 





 

--Pase Joven Garritsen y por favor que no se vuelva a repetir, odio que me interrumpan-- buscó mi asiento con la mirada y voy hacía el con paso apresurado, pues los demás alumnos me miran con desprecio. 






 

Saco el libro correspondiente y el cuaderno, pero alguien a mi costado me interrumpe. 





 

--Hola-- me habla un chico y yo frunzo el ceño-- soy Zayn, Zayn Malik-- sonríe y me da la mano, dejando al descubierto sus tatuajes. 





 

Sonrió y lo saludo-- Martijn, Martijn Garritsen-- me presentó y ambos empezamos a conversar, pues me a contado que es de Boston pero que a llegado a Ámsterdam, porque a su papá,  lo mandaron acá por trabajo. Este chico me da buena espina. 





 

Toca la campana que indica el cambio de hora y me despido de Zayn, con un choque de manos. Salgo del Salón y voy rápido hacía el casillero, para poder sacar mi cuaderno de Matemáticas, pero en el camino me encuentro con la chica que me ayudó hace un rato. La hermana de Tyler. 





 

Ella de acerca sonriendo y yo solo hago una línea fina con mis labios. Recuerda Martijn,  no hables con ella, es popular y te hará daño. Abro la puerta de mi casillero y saco lo necesario, pero la chica se pide a mi costado y yo ruedo los ojos. 





 

--Hey, hola-- me saluda y yo hago un intento de sonrisa--Soy Dua -- sonríe y yo lo ignoro para después cerrar el casillero y caminar hacia la siguiente clase, pues la mayoría de alumnos se está disipando y quedan pocos en los pasillos. 





 

Hasta que Renzo y Brayan se acercan hacía mi. Me Alejo de ellos retrocediendo, pero La chica llamada «Dua» se pone delante de mi y habla algo con los chicos, mientras me hace señas con sus manos para que me vaya. Asiento como si me estuviera mirando y a paso lento pero firme --tratando de pasar desapercibido-- me voy de ahí. Voy hacía el aula y ya la mayoría se encuentra ahí pues la profesora Patricia es una de la más y estrictas. Agradezco internamente cuando me doy cuenta que aún no a llegado y me siento en una de las bancas del último.