Sin más, me dirigí ansioso a la ventana, tuve vista hasta el patio trasero donde un gran árbol creció de manera que una de las ramas quedara a la altura en el segundo nivel de la casa, la rama era de un buen tamaño y parecía muy resistente —Cuando llegaron... ¿Ustedes abrieron la ventana?
—Claramente no.
Con esta información, sumando mi descubrimiento y adicional a eso, sé con toda certeza que ayer fue una noche calurosa, caminé con paso veloz con la intención de averiguar algo en el patio trasero —¿Por qué no encendió el aire acondicionado? Solo abrió la ventana — Abajo los 4 agentes estaban dispersos esperando ordenes en posición de desnaso, al llegar a la cocina donde estaba la única salida que da al patio trasero me percaté de que la cerradura era una tradicional, nada de registro por pin o huella dactilar.
Salí eufórico dirigiendo al árbol; imponente, fuerte y macizo, el pasto verde de un color muy vivo que se extendía hasta donde la cerca de madera se lo permitía para evitar que invadieran más allá de su propiedad.
Estoy seguro de que esa rama es lo suficientemente resistente como para soportar un humano adulto en ella. Me sigue en la cabeza esa idea y no voy a esperar más, revisé el compresor, que evidentemente y como yo pensaba había sido manipulado para inutilizarlo, además de un descubrimiento extra; encontré una colilla de cigarro y rastros de ceniza entre el pasto —Con esto ya tengo una idea de lo que pasó.