𝑈𝑛 𝐷𝑖𝑎 𝐷𝑒 𝐶𝑜𝑟𝑎𝑧𝑜𝑛𝑒𝑠(2/2)
Ya después que termino las primeras clases salgo del salón con la mirada en el piso, las parejas pasan por mi lado abrazados o dándose un beso.
San Valentín siempre ha parecido una de las fechas más hipócritas del mundo donde los hombres tienden a prometerte el cielo y las estrellas, te empiezan a decir lo mucho te aman o quieren. Te suben en un pedestal te dicen que sin ti no pueden vivir o que donde habías estado toda su vida.
Para que al final terminen o te pongan los cuernos y mi favorita que solo te lo hayan dicho para ilusionarte y ver hasta donde podían llegar.
O simplemente hacen el feo, haciéndote creer que, si no recibes nada hoy, no eres nadie y nadie te quiere ni te valora.
Es ridículo. Sigo sumida en mis pensamientos cuando un brazo me rodea por encima de lo hombros.
Cuando veo de quien se trata miro para todos lados y hago la sonrisa más forzada pero disimulada del mundo.
-Cariño- Me devuelve la misma sonrisa y veo que no viene solo.
- ¿Cómo estás? - Pregunto para aligerar un poco la tensión.
-Lo mismo de siempre-Me da un beso en la mejilla. Me la va a pagar más tarde-No he tenido oportunidad de presentarte los chicos así que ellos son Nate, Bruno y Adrián.
-Yo soy Bruno-Habla un chico alto moreno.
-Yo Adrián.
-Creo que no hace falta decir quién soy yo-Me gusta este chico, es decir me gusta su actitud no él. No hace falta explicarlo.
-Es un gusto conocerlos- Les digo y sonrió.
-Pero que bella sonrisa- Alaga Bruno tomando para depositar un beso en el dorso, cosa que me hace sonrojar de inmediato.
-Yo de ti suelto esa mano si no quiero resultar con un ojo morado- Espeta Nate haciendo un movimiento para que miremos la cara de asesino serial de Max.
Pero que demo....
La suelta de golpe y hace el que está mirando a otra dirección.
-Bueno eso fue raro...Chicos no sé ustedes, pero yo tengo una conversación pendiente con mi novio-Tan solo mencionar la palabra novio hace que se me revuelva el estómago. Hago una cara picara para darles ideas equivocadas, así hacer que se vayan más rápido.
- ¿Qué tan pendiente? -Pregunta su amigo Adrián algo curioso.
- ¡Ou! Demasiado pendiente-Lo miro mientras me acerco mis manos al pecho de Max, dejando que este me abrace por la cintura- Sé que va a sonar algo brusco, pero se pueden ir, se lo entregare más tarde.
-Claro no hay problema señores vuelta y a la cafetería, no hay nada que ver aquí-Les dice Nate tomándolos a ambos de sus camisas. Y realmente lo agradezco.
Al ver que estamos completamente solos, que no hay nadie en el pasillo me alejo. No sin antes darle un golpe en el estómago.
-Donde vuelvas a besarme de verdad que el próximo será más abajo-Lo encaro.
-Ya tranquila solo fue un pequeño en insignificante beso en la mejilla, no hagas drama.
- ¿Drama? Nada de besos ¿Recuerdas? -Me cruzo de brazos.
-Sí, lo recuerdo. Ya no importa-Contesta tajante
- ¿Que necesitas?
-Esta tarde.
- ¿Que con esta tarde?
- ¿Papi, dio permiso?
-No seas idiota, y no papi no dio permiso porque no le dije. Tengo que regresar a las ocho
-Que lastima que tengas que mentirle a papi-Volteo los ojos y eso solo hace que su sonrisa se ensanche más-A las ocho estarás en tu casa entonces, paso a las seis.
-Me parece bien ¿Algo más?
-No, por el momento. ¿Por parte suya?
-Si, en realidad pensándolo bien. ¿Celoso?
- ¿Que dices?
-Sí, es mucha tragedia un beso en la mano-Hago énfasis en la palabra tragedia-No le querías dejar el ojo morado parecía que lo querías romper entero.
-Así como tú haces drama por un beso en la mejilla- Sin darse cuenta de sus palabras me ha dado la razón.
-Entonces si estas celoso.
-No son celos Beehler, solo sé quién es mi amigo.
- ¿Que tiene que ver que sepas como es tu amigo?
-Que se cómo se comporta y porque se comporta de esa manera. Lo hace para fastidiarme y para ver si eres una posible próxima víctima.
- ¿Victima? ¿Es que acaso es un acosador sexual o un asesino? -Enarco una ceja.
-Próximo polvo entonces, está mirando si eres una fácil-Me quedo callada ante la expresión ¿Polvo? ¿Me va a vender cocaína o algo así?
- ¿Vende drogas en la escuela? -Pregunto incrédula, como puede ser amigo de alguien que vende droga ¿Sera que el también vende? ¿Ya la probo?
Pero todos esos pensamientos se van cuando empieza a reír.
- ¿Dije algo que causara risa? No recuerdo haber dicho algún chiste, esto es enserio.
- ¿De verdad? Me lo estás diciendo de verdad o es un chiste-Ante mi cara seria vuelve a soltar otra carcajada- ¡Ay! Si lo dices de verdad.
- ¡Ya deja de reír! - Al ver que no para, me harto doy media vuelta para irme y dejarlo ahí pero antes de seguir mi camino me detiene.
-Se me olvida que vienes de estudiar en casa, si que te falta aprender mucho. Un polvo es cuando solo quiere tener sexo contigo y desecharte- Bajo la cabeza por la vergüenza.
Que estúpida, claro un polvo ya lo había escuchado esa expresión antes. Alex ya me lo había explicado en una de nuestras tantas conversaciones triviales.
-Ya tranquila-Me toma de la barbilla para levantarme la cara y mirar eso ojos azules.
Ojos que parecen el mismo cielo. Sacudo la cabeza por el pensamiento me pongo más roja y para evitar seguirle sosteniendo la mirada me tapo la cara.
-Nos podemos ir ya- Susurro y siento como toma mi mano. No lo quito pues sé que es porque no dirigimos a la cafetería. Pero antes vamos a mi casillero y guardo mis cosas.
Al cruzar la puerta veo como me lleva a la mesa donde están sus amigos.
-Espera, no me voy a sentar allá tu hermana y Mads me están esperando.
- ¿Mads? Espera ¿Madison Jefferson, la porrista? -Se detiene y empieza a buscar la mesa, creo.
Editado: 15.09.2021