Espero, espero,tanto que me estoy cansando de hacerlo,es muy extraño cansarse cuando estás sentada, si sentada ya que cuando salí a los minutos iba pasando el director así que me a enviado a su oficina el no a venido ya que tiene una reunión. Miro la hora de nuevo en el reloj de la pared marcan las 9:30,lo que significa que ya terminó la clase de el señor Barruzco. Así que como ya terminó puedo regresar. Agarro mi mochila para ponerla en mi hombro,camino hasta llegar a el aula de matemáticas,si matemáticas mi clase favorita, tan solo recordarlo hace que Sonría.
– ¿Feliz por su mal comportamiento señorita Smith? – escucho una vos grave rápidamente hace que se me pongan los pelos de punta. Me volteo para verlo, se le ve muy serio. Entre más se acerca a mi más chiquita me siento. Cuando ya está al frente de mi ni levantando la cabeza le alcanzó a mirarlo a los ojos estoy más que segura que ni aún que me ponga de puntillas podría hacerlo.
–alison ¿Que haces afuera? entra ya–escucho mi maestro de matemáticas. Me volteo para verlo.
–si ya voy.–entro a la clase, me siento adelante. Los minutos pasan y el maestro de matemáticas no entra. Cuando escucho pasos pienso que es el maestro de matemáticas pero no en vez de el es MR.Barruzco.
– buenos días,se que esperan a su maestro de matemáticas pero seré yo quien les de la clase,no por que lo valla a sustituir o por qué este enfermo si no por que quiero conocerlos a todos. Me pueden decir Mr.Barruzco, doy clases en esta institución, en la clase de literatura– me voltea a ver,luego a los demas– les pasaré una página para que escriban su nombre – le da la página a un compañero,cuando mi compañero apunta su nombre pasa la página, así sucesivamente hasta que llegó a mi, yo solo la pasé ya que el maestro ya sabía mi nombre, así que no era necesario escribirlo– señorita debe escribir su nombre.– lo volteó a ver, miro como cuando una compañera termina de escribir su nombre le quita la página para venir hasta mi asiento para ponerla en la mesita de el asiento dónde estoy sentada. –escriba su nombre señorita.– dice enojado. Todos mis compañeros de clase de matemáticas me miran,al sentirme acorralada y no tener otro remedio escribo mi nombre por segunda vez en el día. – ya ve nada le costaba escribir su nombre–susurra tan bajito que a duras penas lo e escuchado. Lleva la página a dónde se había quedado la última vez. – abran la página en dónde se habían quedado, por lo que me dijo su maestro ya les había explicado el tema así que solo faltaba que hicieran los ejercicios,también me dijo que con el solo hacen la mitad de los ejercicios en cada tema, pero yo quiero que hagan todos los ejercicios– escucho algunas quejas de parte de mis compañeros.– dejen de quejarse o veremos también el tema siguiente y harán también sus ejercicios– inmediatamente mis compañeros se callan.
Cuando ya terminó todos mis ejercicios,miro el reloj 20 minutos desde que comencé, e hecho un buen trabajo. Me levanto,agarro mi cuaderno para llevarlo donde Mr. Barruzco. El voltea a verme luego a mi cuaderno,lo pongo en el escritorio para que lo vea mejor.
– puede irse a sentar yo revisaré si están buenos o no.
–claro que están buenos.– digo muy segura y claro que lo estoy.
–¿esta segura señorita Smith?– La seguridad se me va. Le quiero contestar que si pero hasta yo estoy dudando de mi, tampoco mi voz sale– si está tan segura no le molestará escribir en la pizarra el primer ejercicio.– señala dónde están los marcadores para pizarra. Agarro uno, el color azul. Voy a la pizarra y apunto el ejercicio después de apuntarlo lo soluciono. Tapo el marcador,lo pongo dónde estaba.– bien hecho–dice neutral– a excepción de su caligrafía claro– esto lo dice en un susurro a modo que solo yo escuché.
–¿Que tiene de malo mi caligrafía?– los maestros siempre me han felicitado por mi caligrafía,dicen que es muy hermosa.
–todo– susurra.– haré el próximo ejercicio yo– se levanta, yo me voy a sentar. Agarra el marcador negro, escribe el ejercicio y lo soluciona. Ahora entiendo por qué no le gusto mi caligrafía,es por qué la suya es más que perfecta,más que perfecta se queda corto con lo buena que es. –¿Tienen las mismas respuestas jóvenes?
–si– dicen a la vez mis compañeros.– señorita venga por su cuaderno– me levanto,agarro el cuaderno– todos están buenos.
–se lo dije.
– me gustaría que así como es de buena en la clase de matemáticas así sea de buena en la mía– eso va a estar difícil. No digo nada solo camino hasta donde está mi silla. Escucho como suena la campana para salir a recreo. Me levanto guardo todo en mi mochila para salir de allí. – para los que no terminaron queda de tarea.– pongo en mi hombro mi mochila, salgo de allí lo más rápido que me permiten mis piernas.
Cuando ya estoy fuera escucho como mis compañeros de matemáticas le dicen adiós al maestro,estaba tan apurada por salir de allí que ni siquiera me e despedido, es la primera vez que no lo hago,bueno con un maestro, pero lo hecho hecho está así que me dirijo a la cafetería me compro una ensalada con un jugo de naranja,voy a la última mesa para comer. No como con nadie, antes lo hacía pero como todos tenían pareja ni siquiera notaban mi presencia no solo eso si no que querían pasar tiempo con su pareja así que me aleje,tampoco me buscaron.
Cuando ya toca la campana me dirijo hacia la clase que me toca,es geografía no es mi favorita pero no me va mal. Cuando entro me llevo la sorpresa de que está mi maestro de geografía,creía que también en esta estaría MR.Barruzco, que gran alivio.
La clase paso normal,apuntamos cosas, participamos,nada fuera de lo normal solo cuando estoy en la clase de MR. Barruzco es que todo no es normal. Después de esa clase llegó,estudios sociales la cual tambien fue normal. Después de esas dos clases estamos en el recreo de el cual no me dió mucha hambre pero igual pedí una limonada. Las clases pasaron rápidas como siempre. Ahora me encuentro esperando a papá en la salida de la escuela.Cuando llega me subo al auto.