Este viaje comienza con mi novio Fran que quería tener una vida conmigo al haberme quedado embarazada, pero por mi inmadurez decidí no casarme. Era joven, tenía solo 22 años y crei que no estaba lista para ese tipo de compromiso, tampoco para tener un bebé pero me arriesgaría a ello (a tener al bebé).
Después de mi negativa Fran dijo que me apoyaría y me cuidaría porque el hijo era de ambos, pero sin ninguna atadura entre los dos. Yo no tenía a donde ir y accedí, con el tiempo me daría cuenta que era un error y que Fran seguiría su vida aún viviendo conmigo.
Fran quería ser Músico y cada vez se distanciaba más de mi, se iba con sus amigos, armaban fiestas de improviso para darse a conocer, ese ambiente estaba lleno de drogas, mujeres de moral distraída y alcohol, hasta amanecer. Solo Fran y sus amigos sabían lo que sucedía en esos encuentros. Mientras yo lloraba y me preocupaba porque el se encontrará bien, había días que solo llegaba a bañarse y se iba a seguir la fiesta, me descuidaba, no parecía estar interesado en mi embarazo, pero, yo le juré a mi bebé que lo cuidaría y estaríamos juntos siempre.