Capítulo 1

Actualmente

Ivette

A pasado mucho tiempo desde que me marche a estudiar al extranjero...

- ¡Hija!- grita una mujer alta con prendas preciosas, alzando sus brazos, llamando la atención de todas las personas

- ¡Mamá!- corro hacia ella recibiendo un abrazo cálido

- ¡Me alegra que estés de vuelta!- susurra con lágrimas en los ojos- Haz crecido mi princesita- se aleja para apreciarme mejor- Estas convertida en toda una mujercita- sonríe orgullosa

- ¡Oh madre! No sabes cuanta falta me hicistes- confieso sujetando sus manos

- Querida tenemos que ponernos al día- sonríe guiándome a su auto

Mi madre " Suzanne Noguera" es reconocida en el mundo del modelaje como "la mujer más preciosa y angelical", a decir verdad tiene una gran carrera, además de ser una gran chef.

Al llegar a casa me reciben mis hermanos y mi padre 

- Por fin regresas, pequeña- me abraza Tomás (hermano mayor)

- ¡Hey! Ni que hubiesén pasado siglos- sonrió bromeando

- ¡CINCO AÑOS TE PARECE POCO! - grita con exaperación Arturo (hermano del medio)

- No exageres- comienzo a reír "cuanto los extrañe"

- ¡Dejen a su hermana!-dice papá aguantando la risa, aunque la comisura de sus labios lo delataba

- ¡Oh! Papá- corro hacia él, me eleva un poco, dándome vueltas en el aire, para luego bajarme

- Mi esmeralda-susurra él acariciando mi mejilla derecha con cariño- vamos a entrar-sugiere, yo paso junto con mis hermanos

 Luego de acomodar el equipaje les conte todo lo que había sucedido durante estos cinco años. Salimos para almorzar en el resraurante favorito de papá.

Papá es un gran atleta y empresario. Tomás es arquitecto y Arturo se encarga de ayudar a papá en la empresa.

Américo

Bajo del auto, camino hacia la mansión de mis padres, toco el timbre sin prestar la miníma atención a los alrededores,  aparece el mayordomo Frank.

- Que alegría volver a verlo señorito- comenta Frank con una sonrisa de bienvenida

- Lo mismo digo Frank- me acerco a darle un abrazo- eres lo único que vale la pena en está mansión- le comento en el oído

-No diga eso señorito- se apresura a decir 

- Haz sido como un padre para mi- le recuerdo quitándome los lentes de sol- me haz cuidado y aconcejado, tu eres mi única familia- sonrió y sus ojos se nublan por las lágrimas contenidas

-Señorito usted debe entender que sus padres quieren lo mejor para usted- comenta

- Entonces ¿Por qué ellos no están aquí recibiéndome?-interrogo y se queda callado- ¿Dónde están?-pregunto por cortesía luego de un corto tiempo de silencio soltando un suspiro

- Han salido temprano pero dejaron dicho que los espere- dice Frank- llegarán dentro de una hora- mira su reloj- Ya subiré sus maletas a su habitación ¿Quiere algo de beber?-comenta cambiando un poco el tema

-No, voy a dar un paseo- me pierdo en los pasillos hasta llegar a una habitación contigua

Tomo aire, abro la puerta y la cierro tras de mi. Todo sigue igual, visualizo un marco lleno de polvo, avanzo y lo limpio 

- Como te extraño Ivette-susurro observando sus ojos verdes- lamento lo que sucedió- acaricio la foto

CINCO AÑOS ATRÁS

-Te amo Ivette- le robo un beso

- Y yo a ti Américo- susurra ella mirándome con esos ojos verdes brillantes, nos sumergimos en un beso apasionado, la recoste sobre la arena acariciando su piel suave mientras ella sujetaba mi cabello, estabamos absortos del mundo en la playa, nos separamos por falta de aire

-Eres preciosa- le dije robandole un beso en la frente, tomandola por sorpresa, luego reacciona y se rié 

- Tengo miedo-confiesa sonrojándose y cayando su risa

-Tranquila cielo sino quieres podemos parar- me aparto de ella para darle su espacio

- No es eso es que...-me mira de reojo- tengo miedo de que juegues conmigo y es mi primera vez- dice caminando hacia el mar dejando perdida su mirada en el horizonte

- Nunca jugaría contigo- me acerco abrazándola por la espalda- Además no te obligaría hacer algo que no quieras-aseguro, pues ella inspira inocencia y pureza