Capítulo I

Alaska Morie.

— Muy mal mi querido Ralph — y lo agarro del cabello mientras lo golpeó contra el suelo de su propia casa — No debiste robar ese dinero, sabías que tarde o temprano él se daría cuenta...

— P-por favor no me m-mates — Rogó mientras lágrimas caían de sus ojos y yo solo me reí en su cara.

— Fuiste una mala persona y la ambición te hizo tomar lo que no te pertenece, se te dió la oportunidad de devolverlo y preferiste desaparecer, estas cariño, son las consecuencias — dije y le dispare en la cabeza — Imbécil — doy vuelta sobre mis talones y me dirijo a la entrada de la residencia, salgo por ella como si no hubiera asesinado a nadie y me subo a mi coche camino a la agencia. Suena mi móvil y lo pongo en manos libres en el coche.

— Tengo una misión de suma importancia, ven a la agencia ya — dijo y corto. Odio que me dejen con la palabra en la boca.

Desde que tengo memoria trabajo para Russian Force Agency o por sus siglas RFA. Y cualquiera puede pensar que se trata de una agencia de bien pero es todo lo contrario, yo la definiría más como una mafia, trabajamos para todo aquel que de buen dinero sin importar el tipo de trabajo que sea, por lo general los que nos solicitan son personas del bajo mundo, crueles en su naturaleza para hacer su trabajo sucio, ya que siempre cumplimos con la misión asignada. Yo era la mejor en la agencia y no era de menos, cuando toda tu vida pasaste entrenando más de 10 horas diarias no solo con ejercicio físico también tenía un IQ superior al de la mayoría de personas.

Cuando menos me doy cuenta estoy ingresando al edificio de RFA que utilizaba una fachada de empresa publicitaria para ocultar los negocios sucios y aunque está agencia era Rusa tenía varias sedes en varios puntos de la tierra, yo me encontraba en Estados Unidos -en Washington DC para ser específicos- con Rick alias "el Diablo" hace más de 5 años, desde aquí el diablo controlaba las demás agencias. Me estacionó en mi lugar de siempre y me dirigí al ascensor pulsando el último piso, las puertas se abren y frente a mi aparece una de las secretarias y cuando me ve asiente en mi dirección y yo continúo hasta la oficina del jefe o como le llamo yo "Diablo" es a la persona que más detesto en mis cortos 17 años.

— Alaska — me dice con una gran sonrisa y yo frunzo el ceño.

— Solo dime cuál es el trabajo y cierra la boca — dije con la mandíbula apretada, este hombre me pone de mal humor.

— Esa boca — me advierte — Necesito que robes unos documentos importantes de la CIA, tengo los planes de una de sus sedes en la cual se encuentra la información que quiero.

— Está es la tercera vez que tomó algo de ellos ¿Quién está detrás de todo esto? ¿Por qué rayos están pidiendo tanto de la CIA? — Pregunto.

— Eso no te incumbe solo has el maldito trabajo Alaska, afuera está esperándote un equipo que te explicará el plan a seguir, no me decepciones — dijo en tono frío y me lanzo una mirada de advertencia, le di la espalda y salí de ahí.

La primera vez que robe algo de la CIA fue hace 6 meses, eran unos informes de la ubicación secreta de muchos de los mafiosos más peligrosos que fueron atrapados y encarcelados sin dejar rastro alguno; el segundo robo que ejecute fue información acerca de la ubicación secreta de algunas sedes de Estados Unidos y parte de Europa y este último que no tenía idea de que sería hasta no verlo, sin duda algo grande viene contra la CIA para querer tanta información de ahí... ¿Cómo logré robar todo eso sin ser detectada? Fácil, soy la mejor en lo que hago, soy cuidadosa con mis movimientos y aunque hablemos de la CIA sin duda una de las agencias con mayor poder, he podido pasar desapercibida, saben que les han robado pero no tienen idea de quién.

Fuera de la oficina de Diablo se encontraban 3 hombres, me vieron de arriba hacia abajo sin expresión alguna, todas las personas que trabajaban para Diablo manteníamos miradas frías, de hecho lo éramos, no teníamos sentimientos o por lo menos yo no los tenía. Nos dirigimos a una de las salas de reuniones para que explicarán el plan que debía seguir.

— ¿Tu eres la encargada para la misión? — pregunto uno de ellos de manera despectiva.

— ¿Ves a alguien más viniendo aquí? — le digo de manera sarcástica.

— Aquí tenemos los planos de la agencia — dijo el segundo cortando la respuesta del primero, no les iba a preguntar sus nombres no me interesan en lo más mínimo. Saco un mapa de las instalaciones del lugar, era grande — la información que necesitamos esta justo aquí, en el Ala Oeste, entraras por uno de los muros, cada 3 hora hay relevos de seguridad en ese muro perimetral de aquí — dijo señalando un muro cerca del Ala oeste.

— Desactivaremos el tiempo suficiente la alarma de ese perímetro como para que pases el muro sin ser vista y que será justo en el tiempo en el que los guardias hagan el relevo — dijo el tercer hombre — Tendrás que ingresar por los conductos de ventilación de esa zona y de ahí todo depende de tu buen desempeño, no podemos ayudarte estando ya adentro, aquí está un pequeño bosquejo del camino que debes seguir en los conductos — dijo entregándole un pequeño pedazo de papel.