No te dejaré ir

Capítulo 10

Tres días después

Christopher y Mónica tenían tres días sin hablarse, después de lo que había ocurrido en  café New Old, no habían podido. Dormían en habitaciones separadas, y por más que la madre de Mónica les preguntara a ambos por su notable distanciamiento, no hablaban, simplemente se quedaban callados o hablaban de otra cosa; Mónica estaba abriendo la puerta de su casa y antes de que saliera, escuchó unos pasos.

—Mónica. —La llamó Christopher acercándose. — ¿A dónde irás?

—Saldré a caminar, volveré dentro de unas horas. —Le dijo cerrando la puerta sin darle tiempo a responderle, Christopher suspiró luego de mirar la puerta y cuando se volteó, vio a la madre de Mónica.

— ¿Ahora si me contarán lo que les pasa? —Le preguntó manteniendo los brazos cruzados.

—Es…complicado. —Dijo Christopher comenzando a caminar, la madre de Mónica lo siguió y Christopher se detuvo frente a la habitación de Mónica. —Mónica y yo hemos tenido problemas desde que murió Fiorella, no ha sido ella misma, he tratado de acercarme, pero no me deja, hace tres días, estuvimos en el café New old, traté de hablar con ella pero estuvo a la defensiva, no sé qué más hacer. —Le dijo comenzando a ver al suelo apoyándose a la pared.

La madre de Mónica se quedó callada unos segundos y luego colocó una mano sobre el hombro de Christopher provocando que él levantara la mirada.

—Chris, dale tiempo, no ha sido nada fácil para ella, acuérdate que todos cambian al vivir un evento traumático, hasta tú has cambiado, aunque no te hayas dado cuenta.

Christopher no respondió y la madre de Mónica abrió la puerta del cuarto de su hija, entró y se sentó en la cama, Christopher entró con ella y se sentó en una silla mirándola.

—Lo sé pero, ella no es como todos, ella es diferente.

— ¿Lo dices porque sea un fantasma? —Le preguntó la madre de Mónica entrelazando sus piernas.

—Yo…no lo sé, no tuve la oportunidad de conocerla antes del accidente, ¿cómo era?

La madre de Mónica se levantó y comenzó a caminar, se acercó al armario y comenzó a buscar, unos segundos después, sacó un pequeño álbum de fotos y se acercó a Christopher.

—Ella siempre ha guardado este álbum aquí, son las fotos que se tomó con sus amigos y hermanas 1 año antes del accidente.

Christopher lo agarró y comenzó a verlo. En una foto, aparecía Mónica acostada en el pasto abrazada a sus hermanas, en otra, aparecía con un grupo de amigos.

—Parece la Mónica alegre que recuerdo. —Le dijo viendo la última foto donde aparecía Mónica sonriendo.

—Ella siempre ha sido como la conociste, creí que cambiaría al ser un fantasma, pero no, sigue siendo la misma chica, por eso te digo, debes esperar, darle su espacio, en algún momento, ella se acercará a ti.

Christopher asintió y luego sonrío mirando a la madre de Mónica. — Gracias, eso haré, voy a seguir viendo las fotos, me gusta como se ve.

La madre de Mónica sonrió y salió de la habitación dejando a Christopher solo.


—…

—…

—…


Natalia se encontraba en el parque de Venosa, no usaba su dije, por lo que las personas no la veían, ella comenzó a sentir un dolor de cabeza, sabía lo que eso significaba, se fue a un callejón y esperó que la voz hablara.

Ya es el momento.

— ¿Qué debo hacer? —Le preguntó cruzando sus brazos.

Debes encontrarte con Mónica al atardecer a las afueras de Venosa, después yo haré el resto.

— ¿Nada más quieres que me encuentre con ella? ¿Ese es tu maravilloso plan? ¿Que mi mejor amiga me dé un tonto sermón por haber asesinado a su hermana?

Ya te dije, yo haré el resto. —Y luego, la voz se calló, Natalia frunció el ceño, ya faltaban unas pocas horas para ver a su vieja amiga.


—…

—…

—…


Mónica se puso a caminar por las calles de Venosa, vio que comenzaba a atardecer, ya estaba caminando hacia su casa, tenía varias horas fuera y no había podido conseguir a Natalia.

—Mónica. —Escuchó que la llamó Natalia por detrás, se volteó y la vio, cargaba su dije puesto.

—Eres tú. —Le dijo sintiendo ira, en su mente pasaba el recuerdo de cuando Natalia había asesinado a Fiorella.

—Sé que tenemos cosas que hablar, pero lo haremos a las afueras de Venosa, donde nadie podrá vernos o escucharnos, te veré allí en 5 minutos. —Le dijo para luego quitarse el dije y desaparecer.

Mónica hizo lo que le dijo Natalia y voló hacia las afueras de Venosa, en menos de 5 minutos estaba allí, bajó lentamente y se volvió a colocar el dije, Natalia se encontraba esperándola.

—Llegaste rápido. —Le dijo sonriendo.

—Natalia…—Susurró su nombre.

—Debes odiarme mucho en estos momentos, por haber asesinado a Fiorella y no sabes lo mucho que me duele haberlo hecho, pero no tenía opción.



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En el texto hay: fantasia, romance, drama

Editado: 09.06.2023

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