Capitulo 4.

Y aquí estoy, en el centro comercial mas gran de nuestra ciudad, llena de sobrenaturales a mi alrededor y una Sarah alterada al ver como cada ser vivo se gira para mirarla, ser un Súcubo en multitudes tiene que ser una Jodida patada en el culo, «Esto de ir soltando feromonas y que se enamoren hasta los perros es bueno hasta cierto punto» me soltó después de que comiéramos algo en una cafetería y el camarero no hiciera mas que sonreirle a mi amiga, siento pena por ella pero tampoco me sorprende, a pesar de las feromonas es una chica guapa podría tener a cualquiera a pesar de su don.

-Bien, necesitamos ir a Rockstar vi un corpiño increíble en internet y lo necesito en mi armario.

-¿No vamos a comprar lo de la fiesta ? Si tenemos poco tiempo para llegar y decidir un vestido no me quiero imaginar cuando lleguemos a RS. -Dije haciéndonos reír a las dos.

-Vale, vale, mi sentido de decisión no es muy bueno, anda, vayamos a esa tienda nueva de allí, parece que solo hay vestidos.

Nos acercamos a una tienda con un nombre en la entrada que ponía «Fallen Angel» Dentro todo era sombrío y oscuro, siempre me ha gustado este estilo punk y gótico pero nunca he sido capaz de llevarlo en mis carnes, quedaría horrible, Sarah la perdí en el segundo 1 en el que entramos así que me puse a ver vestidos, había escotados y con mini falda «Demasiado para mi» pensé, necesito algo mas ... Como decirlo ¿Inocente? Aunque me costaría encontrar algo así aquí.

Seguí mirando por toda la tienda sin elegir ninguno, a pesar de que Sarah ya había salido miles de vez de los probadores con miles de vestidos, no sabia como podía ser tan indecisa, si todo le queda bien. Miraba y miraba y no encontraba nada de mi estilo, hasta que encontré por milagro la única prenda blanca de la tienda, un vestido blanco al parecer apretado y sujeto al cuello, atrás tenia la espalda libre si no fuera por las tiras de tela que se unen formando un pentágono, caray, es perfecto, no es muy macabro pero es del estilo que me gusta, cojo uno y enseguida me fui a los probadores a lo que salia una Sara derrotada.

-No encuentro nada apropiado, por que me tiene que pasar esto a mi ... -Suspira fuertemente cuando me mira que solo llevo un vestido -¿Ese va a ser el elegido?

-Creo que si, me ha llamado muchísimo la atención .

-Te envidio, yo tengo que seguir mirando ...

Siguió hacia las perchas de nuevo dejándome sola en los probadores, entre en uno y me puse aquel vestido, al mirarme al espejo me sorprendí, era apretado todo el cuerpo y realzaba esta cadera que me dio el mundo, a pesar de eso me gustaba y la espalda era para enamorarse. Ha sido fácil y rápido, me lo llevo.

Salgo de los probadores y me pongo a buscar unos zapatos para aquel vestido, encuentro unas botas blancas preciosas llamándome desde una de las estanterías y no dudo en elegirlos y dirijisme a la caja, mientras pago oigo un gritito de emoción que proviene de los probadores «Pero sera loca» mi amiga sale corriendo y coje unos tacones que al parecer ya tenia elegidos pagando a toda prisa para no hacerme esperar.

-¡AL FIIIIIIIN! -No pude contener la risa.

-Te propongo algo, va a ser sorpresa como iremos a la fiesta.

-Wow, Arwen proponiendo un plan que me gusta ¿Estas enferma? Quieres ir a la fiesta, sorpresa de vestidos ... Hmm

-Anda, dejate de tonterías que ya vamos tarde para arreglarnos

Y cuando dijimos eso nos diríamos a su coche y me dejo en los cuartos de magos sana y salva, que no lo dudaba pero con ella nunca se sabe.

-Te quiero a las 11 y media como mucho en la fiesta -Me dijo despidiéndose de mi

-Si, mi señora

-Estúpida ... -Y se marcho a su lote de habitaciones.

En cuento llegue a mi pequeño cuarto lleno de póster de bandas de heavy metal y muchos Djs saque mis cosas de la bolsa y me vestí, no estaría mal un poco de maquillaje, mas del normal me refiero, mis ojos parecían mucho mas grandes y le he dado un poco de color a mi tez blanca y muerta, cardé un poco mi pelo para darle mas volumen y aspecto salvaje.

Todavía me quedaba una hora, no debería haberme anticipado tanto, de repente llamaron a mi puerta, allí se encontraba Zero con un gran paquete de repartos en la mano.

-¡GUAU!

-No me ladres, lobito. -Dije con una risita

-No te ladro, boba, tan solo estoy sorprendido, ¿Asi vas a ir a la fiesta?

-Pues si, que pasa ¿No te gusta?

-Voy a tener que ponerme celoso al parecer -Carcajeó y entro en mi cuarto -Toma, me lo ha dado el repartidor cuando me ha visto entrando.

-¿Que podrá ser...? -Se lo arrebato de las manos y quito en envoltorio, ahí se encuentra un gran libro con una tapa metálica ¿Plata? Y con unas hojas desgastadas y viejas, ¡El grimorio familiar! Era muy extenso al parecer y al abrirlo me sorprendió la letra de cada hechizo, escrito en una antigua lengua que no conozco para nada.

-Vaya, al parecer este grimorio es anti-Hombres lobo

-Anda, ya tengo un arma que usar contra ti

-Que graciosa -Me miro con cara amenazante y con una sonrisa tonta en la cara -¿Por que esa cara de indignación?

-El grimorio no esta traducido o esta escrito a una lengua que no me suena de nada, tendré que investigar sobre esto.