Nueva vida, Nuevo mundo?

CAPITULO V

Al parecer Laura había ido con su onceavo tío, para intentar buscar un medicamento para su enfermedad, pero según el tío fueron dormidos, en el coche, por un humano, cuando el despertó estaba atado y Laura estaba esclavizada, lo hicieron ver como la violaban frente a sus ojos.

Pero después el tío presento síntomas de la misma enfermedad de Laura y todos se preguntaban cómo, hasta que el día en que se murió, por dicha enfermedad, encontraron una carta en sus manos, al leerla querían que estuviera vivo y torturarlo, en la carta decía que él había vendido a Laura a los humanos y que fue también el quien violo a Laura, también decía que estaba seguro que estaba embarazada de él, así que aun que muriera dejaba atrás decendencia, quien sabe.

Eduardo: Con todo respeto, pero que retorcida mente tenía.

Scarlett: Si, pero desde ese día buscamos a Laura hasta que localizamos que el amo actual de ella venia para acá, entonces lo seguimos en secreto, solo dijimos que hoy por la venta de las carretas veníamos a ver si vendrían buenos clientes.

Eduardo: Bueno, aunque sé que no puedo, hacer nada para cambiar el pasado de Laura, puedo intentar cambiar su futuro, y le prometo que no dejare que ella muera mientras desee vivir y que tampoco la dejare morir aun que lo desee, are que viva una vida de la cual no tenga que arrepentirse por no haberla vivido como más quería.

Scarlett Solo sonrió y me abrazo.

Scarlett: gracias, Eduardo, por favor cuídala mucho por nosotros, antes que nada, me dejarías verla una última vez.

Yo saqué el cristal de Laura, lo quebré y puse los fragmentos en un sofá, al momento apareció de la bruma Laura, la cual estaba dormida, parecía muy tranquila. Scarlett acaricio su cabello y le puso un collar era al parecer un jade, unido a un cadena. La beso en la frente y solo volvió la mirada hacia mí.

Scarlett: Cuídala.

Eduardo: Lo are.

Deje a Laura en la habitación y les dije que iría con Luke a buscar una tienda, a la que me dirigía antes de encontrarme con Laura, Sali y me dirigí a una tienda no muy lejos del lugar.

Entre a la tienda, en ella había todo tipo de seres pequeños, algunos, eran hadas de diferentes colores, otras eran iguales pero sus alas cambiaban.

Dentro había una mujer de cabello castaño, liso con un vestido de color azul, tenía gafas y sus ojos eran negros, al verme.

Mujer: Hola bienvenido a tienda fantasía, cliente, mi nombre es Elena, en que puedo ayudarlos.

Eduardo: hola, mi nombre es Eduardo deseo comprar todas las hada que tenga, además si tiene u catalogo que venda también lo comprare, ¿qué otros seres poseen además de las hadas?

Elena: ¿Quiere también las de bodega?

Eduardo: Si.

Elena: Entonces serian 1 moneda de oro negro.

En el momento en que iba a sacar la moneda, llego un achica de cabello café, ojos café, piel trigueña, vestía un vestido como de seda color morado, llevaba una chaqueta de color blanco, un cinturón bajo su busto con una decoración de una mariposa enserió ese cinturón asentaba más su pecho haciéndolo ver grande, no ni se en realidad cuán grande es.

Chica: Lamento la molestia querido cliente, por favor sígame, por cierto, mi nombre es Sandra.

Seguí a la chica y vi que la Elena solo reía en silencio, me llevaron a otra habitación, junto con Luke entre a ella, la chica se quedó fuera de la habitación, al entrar había un hombre, no un elfo oscuro su piel bronceada, tenía cicatrices en los brazos, tenía una oreja cortada de la punta, sus ojos eran plateados, al igual que su cabello, vestía una túnica roja la cual tenía la capucha caída.

Elfo: Hola, chico, veo que quieres comprar una gran cantidad de producto de mi tienda, ¿Estoy en lo cierto?

Eduardo: Hola, señor elfo, no joven elfo, soy Eduardo, si quiero comprar todas las hadas que tenga, ¿será acaso que no puedo?

Elfo: Jeje, sabes chico tengo la habilidad estimación…. Pero es diferente a las demás ya que estima la forma de ser de las personas y puedo saber muy rápido que si tengo una persona perversa o una de buen corazón.

Eduardo: ¿Entonces soy una persona perversa?

Elfo: No, no veo que tengas malas intenciones para los seres que quieres comprar, por cierto, mi nombre es Plata.

Eduardo: Claro que no tengo intenciones perversas para las hadas.

Plata: ¿Entonces por qué dijiste que las querías para experimentar?

Eduardo: Bueno esos mercaderes querían una respuesta y yo les di una, ya que podían matar las hadas plantas que tenían, y habría sido un error muy grande.

Plata: *risa* Bueno veo que respetas mucho a las hadas, aunque creo que no sabes todos los tipos que existen ¿verdad?

Eduardo: Cierto.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.