Asombrados con lo que veian, un lugar totalmente diferente del que ellos venían, árboles, montañas, un paisaje espectacular, pero al avanzar unos metros lo que era la parte de atrás de la cascada desaparece y en su lugar solo veian más de lo mismo, Évander asustado– que carajos paso con la salida–, casi que sin aliento mirando a su alrededor. Al resto no parecía importarles e incluso decidieron empezar a caminar para conocer más el lugar, maravillados con todo lo que podían ver – esto es increíble– dijo Cadél sin parar de mirar a todos lados.
La brisa de este lugar era satisfactoria, no hacía calor ni frío, el sol brillaba mucho más que de donde venían, ya recorriendo por un rato se sientan al pie de un árbol, cerca de una montaña la que a simple vista parecía tener cuevas por sus grandes rocas, Càthan mientras los demás conversaban decide ir a ver de cerca esos huecos que veía entre las piedras, cuando llega a la montaña se adentra en unas de las cuevas, al caminar unos metros a oscuras nota una luz brillante, intrigado con lo que era sigue caminando sin mirar atrás, al llegar a ese punto ve que ese brillo provenía de cristales incrustados en paredes y techo habiéndo de varios colores y tamaños, también se apreciaban dibujos tallados en las paredes de seres mitológicos que solo se escuchan de un cuento.
Cadél mientras estaban conversando se percata que Càthan se tardaba en regresar , se levanta mirando a sus amigos – estoy preocupado por Càthan , voy a buscarlo–, el resto se ponen de pie y dejando sus mochilas alado del árbol salen rumbo a la montaña, al estar llegando, su amigo venía saliendo con una sonrisa de oreja a oreja – amigos!,( Con voz exaltada) no sé imaginan lo que ví ahí dentro–,
Al comentarle sobre su hallazgo , ellos se adentran en la caverna. –espectacular! –( dice Róland con un grito exagerado), miren esos tallados increíbles, quiero conocer a quien los hizo para poner uno de estos en mi cuarto– , Évander aprovechando la situación le responde – jaja, no creo que aún exista, deberías de pedirle a tu amiga que con el cinto deja buenos tallados–, todos comenzaron a sonreír.
Cadél de la nada empieza a contar la historia sobre lo que ve tallado.
Existe una guerra entre clanes, que luchan por poseer todas las tierras, hay un lugar que hasta ahora no an podido llegar que es la ciudad Ziginchéng ( ciudad prohibida), que se sitúa al centro del mundo, consta con un zafiro el cual protege con un escudo todo el territorio de ese reino, está ciudad antiguamente pertenecía a todo ser mitológico, pero fue hasta que todos querían ser el líder, pero ninguno estaba de acuerdo con nadie, así que los más poderosos se dividieron y formaron sus propios clanes, ahora el objetivo era la ciudad y que clan quedaría en ella (ya que con su piedra preciosa es el reino más seguro).
De los 4 clanes el único que no deseaba el mal era Saivor ,( grifos y licántropos) . Mientras los licántropos distraían a los demás , los grifos tomaron el zafiro y se fueron de la ciudad.
Pasado ya un tiempo el resto de los seres al ver que no estaba su preciada piedra los clanes abandonan la ciudad para crear sus propios reinos. Al cabo de unos años Los grifos al notar la ausencia de enemigos vuelven a la ciudad con el zafiro dejándolo en dónde pertenecía y ellos reinando esa ciudad junto a sus aliados licántropos.
Ahora los demás clanes notaron la presencia del poder que manaba esa roca, esto los hizo que fuera su objetivo y los seres protectores deberían resistir lo más que puedan, sin importar que .
En lo que deja de hablar Cadél se escucha una voz – bienvenidos ser de otro mundo, los estábamos esperando– ellos miraban a todos lados pero no veian nada, ya comenzando a asustarse Róland responde – quien eres y dónde te escondes–. Al decir eso los cristales empiezan a brillar tan fuerte que los jóvenes cierran los ojos, intentan abrirlos pero no pueden , al cabo de unos segundos la luz desaparece y queda totalmente oscuro, Càthan noto la ausencia de luz, sin saber que hacer grita – quien eres! –, la voz responde – no se preocupen, no les pasará nada joven –, vuelve el brillo tenue y enfrente a ellos un ser con cabeza de águila, patas traseras y cola de león, Càthan horrorizado y temblando por lo que veía – tu... Eres un grifo!!, No nos hagas daño – el grifo se ríe – no joven no teman , estoy aquí para ayudarlos con lo que se aproxima – ellos escuchan atentamente lo que el tiene para decirles – joven en este mundo existen criaturas que en el mundo de ustedes son mitos–.