La refrescante brisa del invierno azota con fuerza mi cara.
Me encuentro sentada en un banco mientras veo como copos de nieve caen.
Giro hacia mi lado derecho de la banca y me encuentro con Max sentado.
-hola-habla viendo fijamente el suelo.
-hola-respondo con una sonrisa.
-¿te puedo preguntar algo?-digo viéndolo fijamente.
-claro-dice con su cálida sonrisa.
-¿de dónde son los otros chicos? o ¿cómo los conocen?-pregunto con mis cejas fruncidas
-son socios de Taylor, como tu bien sabes Taylor es un hombre muy poderoso pero de igual forma a él le conviene tener alianzas-dice para luego sonreírme.
-pero...no confíes en ellos--dice para luego levantarse e irse dentro de la casa.
Minutos después imito su acción y camino dentro de la casa y una vez que estoy dentro el delicioso calor me alivia.
Camino al despacho de Taylor y cuando estoy frente la puerta doy unos toques con mis nudillos para segundos después escuchar un "pase"
-hola-digo mientras muerdo mi labio intentándolo.
-hola -respondió el tomándome de la cintura y pegandome con fuerza a su pecho.
Sin pensarlo dos veces me abalanzo sobre él y lo beso con pasión nuestras lenguas hacen un copas inseparable, quito su camisa para luego el seguir y quitarme mi camisa y pantalón quedando en ropa interior.
Quito su pantalón y luego su Bóxer para que su gran amiguito salga a la vista.
Quito con rapidez y mucha lujuria mi ropa interior, Taylor tira todos los papeles que se encuentran sobre su escritorio para luego tomarme de la cintura y montarme encima de él. Abre con delicadeza mis piernas y de un solo golpe adentra su miembro dentro de mí.
Me toma de la cintura y cada envestía es más fuerte haciendo que gemidos salgan de mi boca.
-Eres he...erm...osa-trata de decir Taylor pero entre tanto placer llegamos al punto perfecto.
...
Después de ese momento encantador con Taylor lo deje solo para que el siguiera con su trabajo.
Bajo las escaleras con una sonrisa enorme y sin prestar cuidado a mi alrededor.
-¿veo que estas muy feliz?-una voz en los sillones hace que me sobresalte.
Camino a los sillones y me encuentro con Jacod con un cigarro en su mano derecha mientras que con la otra sostiene una copa de vino.
-me asustaste-digo mientras coloco mi mano en mi pecho.
Este suelta una risa para luego tomar un trago de su vino.
-siéntate-dice señalando un sillón enfrente suyo.
Lo pienso unos segundos, pero como soy bien ESTÚPIDA decido sentarme.
-Eres muy guapa-dice mientras mira su cigarro.
-gracias-digo mientras frunzo mi cejas.
-pero eres muy estúpida-dice viéndome fijamente.
-¿perdón?-digo con una ceja alzada.
-a estas etapas de la vida deberías empezar a mover tus fichas de ajedrez-dice para luego tirar la colilla de su cigarrillo al piso y pisarlo con su zapato.
-Raven en este mundo debes estar un paso más adelante del enemigo-dice para tomar de un trago de lo que queda de su copa de vino.
Se levanta de su lugar me mira fijamente.
-¿qué quieres decir?-preguntó con mi ceño fruncido.
-oh luchas o mueres-termina para luego dar la vuelta y justo cuando va a dar un paso un sonido hace que giremos la cabeza.
Me encuentro con Max que acaba de tirar un jarrón, pero por su expresión noto que tiró el jarrón a propósito.
Estás condenada a la desgracias.