La entrevista había salido bien a nivel profesional, pero a nivel personal me había dejado más atormentada de lo que me hubiese gustado admitir.
La manera en la que había hablado Jack de lo nuestro y en especial de mí, me había tomado por sorpresa.El hecho de que haya reconocido abiertamente su error hablaba muy bien de él pero no podía caer solo por eso.
Comencé a juntar mis cosas para poder a largame a casa cuando Jade entro con un chocolate en su mano.
-Toma, pensé que lo necesitarías.
-Tan obvia soy?-forcé una sonrisa para que creyera que todo esto no era tan grave como parecía.
-Cuando te ví salir del estudio luego de que el señor artista se fuera , tuve el presentimiento de que tal vez era él a quien le cantabas esa canción aquella noche en el karaoke.
-Me temo que tus suposiciones son ciertas. No puedo disfrazar lo que siento, nunca he sido buena en ello-tomé un pedazo del chocolate y se lo di.
-No debería aceptarlo pero es mi debilidad.
-Todos tenemos una-dije-Y la mía además del chocolate , es Jack.
-Y no debes preocuparte por ello, como tu lo has dicho , todos tenemos alguien que hace que nos volvamos locos y que perdonemos casi todo.
-Tú lo dijiste-la apunté con la barra de chocolate-Casi todo.
-Dale una oportunidad.Quizás las cosas no son como tu te las imaginas y es solo un gran malentendido.
Asentí porque sabía que tenía razón.
Y si yo estaba exagerando? Qué pasaba si las cosas no eran tan terribles y lo que él contó era cierto?
-Debo irme-tomé mi bolso y me acerqué a la puerta-Nos vemos mañana?
-Claro y quiero que me lo cuentes todo por favor?
-Lo haré-dije antes de desaparecer por la puerta.
Me subí a mi auto para volver a casa. Encendí la radio e intenté enfocarme en la música para calmarme un poco. No quería llegar alterada y menos chocar en el camino.
Estacioné frente a casa y respiré varias veces antes de entrar. Debía estar preparada para lo que sea que me esperara allí dentro.
-Hola-saludó Jack cuando me vió llegar .
-Hola-sonreí al ver que había preparado mi comida favorita.
-Esta es tu manera de pedir disculpas?
-Una de muchas-se quitó el delantal-Espero que te guste.
-Seguro que sí-me senté a la mesa y llené las copas de vino.-Bien te escucho.
-Está bien. Primero que nada, discúlpame, no quiero seguir asi contigo , no sabes la tortura que es estar bajo el mismo techo contigo y no poder besarte, ni mirarte , ni tocarte. Me equivoqué, nunca debería haber hecho eso pero te juro que nunca pasó nada esa noche.Yo te amo a ti, y me entregaré por siempre en cuerpo y alma a ti y a nadie más.
-Está bien-tomé su mano-Te creo.
-Eso es todo?Porque tengo más aún.
-No es necesario. Ya escuché todo lo que necesitaba escuchar-lo miré seria- Una pregunta… donde se encuentra Milo?
-Afuera , durmiendo luego de haber jugado toda la tarde.
-Y tu ya terminaste de trabajar?
-Así es-me miró confundido.
-Entonces vamos a terminar de arreglar esto a la habitación, tengo el presentimiento de que tendremos tiempo de sobra para comer luego.
-Me gusta como piensas-me tomó en brazos y me beso-Vamos a arreglar las cosas en el lugar donde mejor nos entendemos.
-Quiero mi anillo de vuelta-dije mirando su mano-Lo digo en serio.
-Lo tendrás , pero primero tendrás que hacer méritos para ganártelo de vuelta-sonrió feliz mientras atravesábamos la casa hasta llegar al lugar donde las cosas mejor nos salían.