Iniciando una nueva etapa

Darío, el padre de Aymee, por recomendación de sus amistades, decidió matricular a Aymee a la Cepre Unac para que pueda estar más preparada. A ella no le gustó la idea porque ya había hecho amistades en la academia en la que se encontraba, pero no le quedó de otra y tuvo que iniciar denuevo.

En su primer día de clases estaba muy nerviosa. Detestaba ser la nueva en toda clase de aspecto y no le gustaba empezar denuevo, pero tuvo que darse ánimos para dejar la mala vibra de lado. 

Al llegar a clases, llegó temprano, él estaba ahí, Percy ya había llegado a clases. Ella lo vio sorprendida porque había esperado ser la única en el aula para así no sentirse nerviosa al sentir la mirada del resto cuando llegase tarde, por ello se alistó para ser la primera en el aula. Percy, la miró fijamente, penetrante, casi con una seriedad que asustaba. Lo primero que pensó Aymee sobre el era que parecía muy solitario y distante de las personas. Le hubiera gustado hablarle para tener con quien hablar y salvaguardar sus nervios, que la estaban angustiando, pero prefirió solo cambiar de dirección y esperar en su sitio. El estaba al medio de la clase, en el lado izquierdo y ella al lado derecho en la primera fila, dispuesta a atender todo lo que se explicase.

Los siguientes días fueron iguales. Ella llegaba temprano, el también, pero cada uno por su lado. Siguió igual las  dos semanas siguientes. Sofía era su compañera en la clase, se sentaba a su lado, ambas repasaban matemáticas juntas. Sofía sabía mucho y le era de mucha ayuda en los ejercicios.

Mientras se adecuaba a la Cepre Unac, sus amigas vivíamos otra realidad. No estaban preparándose aún, se estaban dando vacaciones para descansar de los años de escuela en la secundaria, eso era lo que solían decirle a Aymee😂. Lujos que algunos pueden darse, son cositas🙃. Aymee, no podía darse el lujo de descansar porque para ella el tiempo era oro y para su familia debía de correr contra el tiempo para conseguir su título lo más pronto posible!.

Aymee siguió sentándose siempre al lado de Sofía, no le contaba de su vida, jamás hablaron de aquello, eran más amigas de silencio, de competencia y aprendizaje, más no de diversión o en una forma de hacer vida social. Sin embargo, era más que suficiente para Aymee. Todo siguió igual hasta que un día Aymee llegó tarde y ya no consiguió lugar en la primera fila, como tenía de costumbre.

Ella vió a Percy y como todos los demás del aula le parecían lejanos, quiso sentarse a su costado. Pero, mientras ella se dirigía defrente y más que decidida a sentarse a su costado, él la miró fijamente, penetrante, con una mirada tan seria que hizo que se estremeciera.

Aymee, sintió tan profunda, triste y despectiva la mirada de Percy que cambió de rumbo y se sentó al lado opuesto. Al día siguiente ella llegó un poco más tarde, ya no era primera en el aula, y aunque había sitio donde siempre se sentaba, notó que Sofía se había hecho un nuevo amigo. Ella le reservaba sitio a Leonel, un chico inteligente y con quien repasaba también. Así que, Aymee, se sentó en otro sitio. En los siguientes días trato de sentarse nuevamente con Sofía, pero incluso cuando buscaba hablarle ella era distante, cortante y parecía lejana. Había hecho un nuevo grupo de amigos y no le parecia agradable ser amiga de Aymee, cuando podía tener más amistades y ser mucho más popular, ante un grupo de personas inteligentes y empeñosas. 

Aymee, no podía juzgarla, después de todo lo que para ella era Sofía, una buena compañera para repasar y aprender más, eran esos chicos para ella. Así que, entendió y dejó de tratar de acercarse. Y, un día se armó de valor y apesar de que Percy parecía muy oscuro y profundo se sentó a su lado.

Ellos no hablaron los primeros días, hasta que el le dirigió la palabra para consultarle por la tarea de Biologia, ella le respondió y resolvieron las preguntas juntos.

Lo que llamó la curiosidad de Aymee, es la pregunta que el le hizo, antes de finalizar ese mismo día en que le dirigió la palabra: ¿tu porque estás aquí? Fue lo que el me preguntó. 

Ella mencionó:

-  Estoy aquí porque postulare a la universidad y necesito prepararme. ¿Tu no estás aquí por el mismo motivo?

• No, mis padres me obligaron a venir aqui. No les gusta la meta que tengo, me gusta cantar. No quiero ser presumido pero no lo hago nada mal. Ellos dicen que no tendré futuro como cantante y que no podré sobrevivir de aquello, por eso estoy aquí. No veo nada interesante de la universidad en realidad.

Aymee, se sintió confundida y sorprendida a la vez. Todas las amistades que tenía,  apuntaban a sueños diferentes pero todos pasaban por la universidad, nunca había conocido a alguien con una meta diferente.

Hablaron un poco de todo. El le contó sobre su familia, sus aspiraciones, lo que pensaba del profesor y de sus compañeros. Y, Aymee, supo que había tenido razón con el desde el principio, era solitario y distante. Para Percy, el mundo tenía una realidad diferente, quizás desde que su padre abandonó a su madre y tuvo un medio hermano y una nueva familia que no pidió, o cuando su primera enamorada le fue infiel, o cuando su madre autorizó y lo obligó a irse a vivir con su padre, apesar de la enemistad que tenía con el, fue que perdió la fe en este mundo. Era sombrío por distintas acciones de su pasado, como su presente. Su vida era totalmente lo opuesto a todo lo que había conocido y vivido hasta ahora Aymee.

Ese día el la acompañó a tomar su carro, porque el también esperaba el bus de regreso a casa a la vuelta del paradero donde siempre esperaba Aymee.

Era extraño para Aymee, porque no había sido tan cercana a sus amigas, apenas eran las personas con las que contaba y conocer a alguien más y que parecía diferente a ella, la ilusiono mucho. Ese día no pudo evitar estar simplemente muy feliz :")