Resucitó....

Eran como las 9 de la mañana,  cuando sonó un celular, era el mío me estaba llamando mi hijo, aún estaba medio dormida, creo que había logrado dormir mínimo una hora.

-aló- contesté con mi voz gruesa de sueño.

-Buenos días mami, por fin mi adorada madre se digna contestarme-

-Hola hijo, disculpa no escuché las llamadas, pero que pasó?-

-Cómo así mami, no quedaste en ir con mi tía a la playa, para llevar a la abuela, o se te olvidó?-

-Anda, sí-  y di un sobresalto por la noticia, se me quitó el sueño. –Gracias hijo, ya voy por mamá y Patri, chao mi…..- Luis me interrumpió.

-Espera mami, también quiero que sepas, que voy a verme con Papá, él anoche insistió en hablar, igual contigo-

-Mira hijo, te conozco y sé que si aceptas hablar con tú papá es porque sabes que ya eres un hombre maduro y lo que hagas lo respeto, es más si llegas a sentir ganas de recriminar, olvídalo, mejor disfruta esa situación de que tú papá te quiere cerca, y con respecto a hablar conmigo, dile que yo me podré en contacto, que no se preocupe hablaremos-

-Listo mami, nos hablamos, muack-

-Ok hijo, disfruta-

Nosé porque pero me sentí liviana, tranquila y de pronto sentí unos hermosos brazos que me tomaron y me sentí plena, Gabriel me abrazaba y jalaba a su lado, yo con cuidado me recosté en él. Entre dormido me preguntó

-Quién te llamó?-

Nuevamente recordé que me tenía que levantar, y en un aspavientos le quite una sábana, me tapé y salí corriendo al baño desde allí empecé a gritarle lo que ocurría.

-Amor, por favor márcale a Patri, dile que ya me estoy alistando que vamos por ellas-

-Huy, a ¿dónde me vas a llevar?  no me digas, igual yo me dejo llevar.

-En serio amor, quiéres ir con tres mujeres a la playa, va a ir mi mami y mi hermana-

-espera llamo- y le contestó Patri, enterándose de que ya iba.-Amor, tú hermana dijo que no te preocuparas que tu mamá está atendiendo una visita que mejor te demores que ella te avisa para que vayas-

Me estaba sacando el jabón del cuerpo apurada, cuándo Gabriel, entró disque a terminar de enjuagarme, nunca me había enjabonado tanto en mi vida. Salimos del baño desnudos y mojando todo el piso y seguíamos besándonos, y cómo mi hermana no me llamaba, había que utilizar bien el tiempo y nuevamente me volvió a llenar de besos, besos que llegaron a rincones insospechados y plenos. Ya sedientos, pero de agua nos vestimos y bajamos,  Gabriel por su lado empezó a hacer llamadas y a pedirle a su escolta que lo vinieran a buscar. Tomamos Jugo de naranja que había en la nevera,  que no sé quién lo pondría ahí y me volvió a besar, yo sentía que me derretía toda, cada beso de Gabriel, me sabía no sé, como a Vainilla. Ya estaba empezando nuevamente a desabotonarme la camisa, cuándo sonó mi teléfono.

- Es Patricia mi amor. Aló, ajá nena ¿qué pasó?, ya puedo ir- y en la espera me abotonaba sin darme cuenta que lo hacía mal.

-Mira mija, aquí estaba el Nelson ese, disque esperándote que necesita hablar contigo quiere que lo escuches, pero manita te digo, ese man esta como loco, disque aún te sigue amando y que quiere salvar lo que él está seguro que queda-

Nuevamente recordé que me tenía que levantar, y en un aspavientos le quite una sábana, me tapé y salí corriendo al baño desde allí empecé a gritarle lo que ocurría.

-Amor, por favor márcale a Patri, dile que ya me estoy alistando que vamos por ellas-

-Huy, a ¿dónde me vas a llevar?  no me digas, igual yo me dejo llevar.

-En serio amor, quiéres ir con tres mujeres a la playa, va a ir mi mami y mi hermana-

-espera llamo- y le contestó Patri, enterándose de que ya iba.-Amor, tú hermana dijo que no te preocuparas que tu mamá está atendiendo una visita que mejor te demores que ella te avisa para que vayas-

Me estaba sacando el jabón del cuerpo apurada, cuándo Gabriel, entró disque a terminar de enjuagarme, nunca me había enjabonado tanto en mi vida. Salimos del baño desnudos y mojando todo el piso y seguíamos besándonos, y cómo mi hermana no me llamaba, había que utilizar bien el tiempo y nuevamente me volvió a llenar de besos, besos que llegaron a rincones insospechados y plenos. Ya sedientos, pero de agua nos vestimos y bajamos,  Gabriel por su lado empezó a hacer llamadas y a pedirle a su escolta que lo vinieran a buscar. Tomamos Jugo de naranja que había en la nevera,  que no sé quién lo pondría ahí y me volvió a besar, yo sentía que me derretía toda, cada beso de Gabriel, me sabía no sé, como a Vainilla. Ya estaba empezando nuevamente a desabotonarme la camisa, cuándo sonó mi teléfono.

- Es Patricia mi amor. Aló, ajá nena ¿qué pasó, ya puedo ir?- y en la espera me abotonaba sin darme cuenta que lo hacía mal.

-Mira mija, aquí estaba el Nelson ese, disque esperándote que necesita hablar contigo quiere que lo escuches, pero manita te digo, ese man esta como loco, disque aún te sigue amando y que quiere salvar lo que él está seguro que queda-

Solté una carcajada, que hasta el jugo de naranja que me estaba tomando se me salió por la nariz y me estaba ahogando, Gabriel me empezó a limpiar me colocó la llamada en alta voz y me hacía señas que pasaba.

-Ajá Nubia!!!! Te atoraste porque al ridículo de tu esposo, porque así dijo nojoda!!!! Que tú eres su esposa, el ridículo ése, cómo lo ves tú niña, qué tal éste disque que te ama-

Gabriel, me quedó mirando y cogió sus llaves y se fue. Me volví a atorar, no pude hablar, carraspeé mi garganta.

-Patri, ya voy por ustedes, qué chicharrón el que me salió, chao-

Cogí mi bolso que estaba en los muebles, mis llaves del carro y salí, Gabriel se había ido, quedé un tanto fría por esa reacción de él, es más me devolví a la cocina a tomarme un vaso de agua y una aspirinita. Me senté y pensé que no le iba a dar a ningún hombre la posibilidad de volverme a menospreciar y lo peor quedarme callada y tragarme mi dolor, así que le marqué directo al buzón de voz de Gabriel.