15. El diario de Owen Smith: “los usurpadores de cuerpo”.  

Evgeiny continúa leyendo el diario de Owen Smith. Esta vez Owen cuenta la invasión de los usurpadores de cuerpo que ocurrió 5 años después. Evgenia observa el verdadero cuerpo de Lois y se asusta terriblemente. Lois tiene que perseguir a la niña asustada por el campo. Entre ella y Eaves logran convencer a la niña que no se lo contase a su madre. 

Ignorando la advertencia de que no debía continuar leyendo el diario, Evgeiny estaba decidida a terminarlo y compartir su contenido en la red. Ella también proyectaba crear blogs, fotos y videos que validaran el relato de la invasión alienígena a Strawberry. Sin embargo, el conocimiento de la presencia extraterrestre era difícil de creer, debido a la cantidad de películas de ciencia ficción que circulan en los medios, haciendo que las autoridades no tomaran en serio la historia de la invasión.

En lo siguiente siguió leyendo donde se le relató lo que veremos a continuación:

Agosto 27, 1980— Strawberry. 

Después de la devastadora invasión, me dediqué a buscar cuáles de mis amigos habían sobrevivido. Para mi alivio, encontré a mis compañeros Dan, Johann y Cloe, aunque ellos no recordaban nada de lo sucedido, pues el parásito alienígena que controlaba sus cerebros se había llevado todos sus recuerdos. Solo mi amigo Zack y yo conocíamos la verdad, sin embargo, la pérdida de Katherine lo había sumido en un profundo estado de amargura. 

Zack pasaba la mayor parte de su tiempo encerrado, lo cual hacía que se sintiera desesperado y solitario. Por ello, intentaba buscar ayuda, aunque trataba de evitarme la mayor parte del tiempo. Un día, sin embargo, lo encontré saliendo de la escuela y, con un tono de voz apagado, me dijo:

—Debimos de habernos rendido Owen, yo la extraño mucho. Te juro que ella no tenía malas intenciones en querer conquistar el mundo. Sin embargo, la responsabilidad de lo sucedido la llevamos nosotros mismos, causamos la contaminación y la destrucción que llevó a la invasión alienígena. A pesar de todo, pudimos sentir la paz que reinaba en la escuela durante la dominación extraterrestre, demostrando que los seres de otra galaxia también pueden traer una sensación de calma a la humanidad. 

Después de oír su comentario, yo le contesté: “No podíamos permitirnos el lujo de garantizar que íbamos a ser mejores con ellos dentro de nuestros cuerpos. Si no recuerdas el tipo de bestia en la que se convirtió el profesor al que milagrosamente derrotamos, te refrescaré la memoria. Yo mismo me sentí tentado de rendirme, pero al ver a esa bestia entrando por la boca de nuestro amigo Ben y tomando control de él, supe que si era necesario dar mi vida para detenerlos, lo haría sin vacilar. Y así fue como logramos vencerla.

Mis palabras provocaron una reacción desproporcionada en Zack, que desde ese momento no lo volví a ver más por mucho tiempo. Su comportamiento se fue volviendo cada vez más errático y sus padres se vieron forzados a ingresarlo en un sanatorio para personas con problemas mentales; una triste consecuencia de aquel incidente.

Las autoridades federales enviaron inicialmente al agente especial Robert Rogers a investigar el misterioso fenómeno que ocurrió en Strawberry, debido a la gran cantidad de desaparecidos que no podían ocultar. El agente me interrogó y yo, con la esperanza de que me creería, le conté toda la historia en dos entrevistas. Sin embargo, al final este me menospreció y como informe final de lo que había ocurrido, este informó que fue una gran tormenta la que mató a todas esas personas. Esto me decepcionó aún más, pero yo sabía que debía ser perseverante y no dejarme desanimar por el resultado inicial.

Agosto 28, 1980— Strawberry. 

Otro día había pasado sin ninguna novedad, pero yo seguía aguardando el regreso de los alienígenas otra vez, fue por esta razón que consideré formar un club de defensa terrestre o un grupo de amigos a los cuales le compartía mis relatos y cuantos se unían pasaban a formar parte del club. El club iba bien, pero la contaminación causada por el comienzo de la explotación de una mina de carbón causó que cientos de personas comenzaran a abandonar el pueblo. Asimismo, mis amigos se fueron. 

En ese ambiente de contaminación y emigración de las personas me vino a visitar la madre de Zack, entregándome su diario con el afán de eternizar su memoria. Yo revisé su diario y encontré que él tenía una historia mucho más profunda que la que yo había escrito, ya que además de contar acerca de sus sueños con Katerine después de que la derrotamos, también revelaba el nombre exacto de los alienígenas que nos atacaron, los “Bluesome Kalmarn”. Esto me dejó sin palabras, por el hecho de que según las historias de Zack era posible que Katerine siguiera con vida y que ella no era la forma de vida alienígena que se encontraba en la Tierra. 

Las historias de Zack me preocuparon mucho, haciendo que aumentara mi determinación por compartir nuestras historias con el mayor número de personas posible. Por ello, decidí unirme a Cloé, el maestro Dan y mi amada Johann para visitar otras comunidades vecinas. Aunque nuestra misión no fue completamente exitosa, nos conformamos con alertarles sobre la existencia de los alienígenas, advirtiéndoles que podrían ser víctimas de invasiones futuras.

No pude profundizar en el diario de Zack, por lo que lo he dejado aquí para que cada uno pueda leerlo y conocer en profundidad sus pensamientos y vivencias. Es una forma de estar cerca de él, pues está lleno de detalles y experiencias que lo definen.

Agosto 29, 1980— Strawberry. 

Ya no doy ciencia cierta de lo que pueda escribir en este diario porque según lo que parece nuestro verdadero enemigo no eran los aliens sino el dueño de la planta química que les paga a los federales corruptos para que no intervengan en Strawberry.