Oriol, Lyra, Calony y Cammy van a registrarse a la fraternidad de Axel. Caminando fuera de la Fraternidad tienen un altercado con la fraternidad de alienígenas acuáticos. El grupo da una paliza a los acuáticos, por lo que pasan a ser perseguidos por la seguridad estudiantil.
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Después de una noche de celebración conjunta, llegó el momento de elegir la fraternidad para unirse. Axel y sus amigos decidieron unirse a la Fraternidad de Investigación Humana, dedicada a recolectar y analizar todos los datos y casos relacionados con la universidad. Una vez recolectados, estos se remitían al periódico estudiantil para que los periodistas verificaran la información y la publicaran.
—Oriol, ¿por qué escoges nuestra fraternidad? Preguntó Axel como esperando que Oriol se retractara de su decisión.
—En nuestro caso somos buenos investigadores y más con todo lo que hemos vivido aquí, creo que podemos investigar y descubrir secretos para que podamos hacer de esta universidad un lugar mejor. Insistió Oriol.
—La fraternidad no solo se dedica a investigar, sino que también participamos en diferentes torneos deportivos, de ciencias, entre otras actividades, con las que al final del año reconocen la más sobresaliente. El año pasado nos fue muy mal en todas las competencias, por lo que quiero agradecerte por traer a tus femeninas para que nos ayuden.
—¿Mis mujeres? Se le llenó la cara de colores a Oriol, ya que ninguna quería separarse de él. Estaban Lyra, Susan, Cammy y en última instancia llegó Calony.
—Calony no dices que estabas avanzada, ¿qué haces aquí? Preguntó Lyra con una cara de enojo.
—Cada año, si un estudiante lo prefiere, puede cambiar de fraternidad, así que estoy en mi derecho. Llegó Calony con el documento de su inscripción después de que todos estaban saliendo.
Cada Fraternidad tenía su propia instalación, edificios y hasta dormitorios. Tenían comedores, baños e incluso un ajustador ambiental que emulaba el ambiente perfecto. Oriol no evitó maravillarse al ver todas las comodidades de las que disfrutaban en esta universidad.
—Ni en sueños creí poder venir a una universidad con tantas comodidades como esta. Dijo Oriol mirando los grandes espacios de los edificios.
—Quizás tú eres una forma de experimento que la dirección de la universidad hizo en secreto para ver si pudieran regresar los humanos hasta aquí en un futuro. Dijo Axel al ver a Oriol tan animado.
—Si eso es posible, pero porque me trajeron a mí solo.
—Quién sabe, esta universidad es muy grande. Es por eso que más adelante investigaremos si no existen más humanos aquí, no para delatarlos, sino para saber quiénes son y protegerlos. Agrego Axel.
Con gran entusiasmo, el Presidente de la Fraternidad de Investigación Humana, Gregor Brown, llegó para saludar y dar la bienvenida personalmente a los integrantes. Sin embargo, resultaba evidente que esta fraternidad no era una de las más populares, ya que muchos estudiantes se dirigían a la Fraternidad de Seguridad Galáctica (SGI), La Fraternidad de Alienígenas Acuáticos (AA) y la fraternidad Federación Out Planetaria.
En ese día era común presenciar diferentes festivales, pero el más impresionante era el Festival de la Fraternidad del Agua. Estos espectáculos eran realmente espléndidos, logrando formar figuras con el agua, lanzando potentes chorros al aire y sorprendiendo con las destrezas de sus monstruos marinos.
Las móreas del agua se parecían a los animales mitológicos que se llamaban sirenas, pero cuando Oriol miró más de cerca eran igual o más hermosas que las que estaban en la tierra.
—Oriol no las mires, ellas pueden hipnotizarte con la mirada. Estas son Móreas del planeta Mortel son alienígenas superiores en versatilidad a las leyendas que se cuentan en la tierra. Sus escamas son tan duras que pueden resistir hasta los rayos más mortales. Ellas son capaces también de adaptarse al terreno donde se encuentren.
—¿Cómo sabes tanto de ellas?, Susan.
—Ellas aparecieron en mi planeta hace mucho tiempo y aunque aquí son de agua, también pueden adaptarse a terrenos áridos.
La fraternidad de seguridad realizaba marchas mostrando el orgullo y la disciplina de sus miembros, pues iban marchando al ritmo de música militar y al frente iba su líder saludando a todos los presentes.
Cuando el desfile de la SGI pasó al lado de nuestros héroes. Su líder, Drukslu Glasgow, hacía una mirada despreciable y dura, movía las manos con fuerza y todos los que se encontraban a su alrededor le temían. Este se preguntaba porque había personas en la fraternidad de Investigación, porque esta debería de ser la fraternidad más miserable de todas con más de 5 años sin tener nuevos miembros, siendo el último en unirse a ellos Axel. Para los líderes era muy importante tener la mayor cantidad de miembros posibles porque en función de estos es que se asigna el presupuesto que la universidad destina para estos fines. Esta razón es la que empuja a las fraternidades a realizar propagandas llamativas o shows para lograr nuevos adeptos.
Cuando el grupo salía hacia afuera, Oriol no pudo evitar asombrarse al ver el complejo de piscinas que tenían las móreas, pues tenían en el centro una que parecía un caracol giratorio que conectaba con otras áreas dónde había agua cayendo en forma de un aspersor gigante. A Lyra también le encantó ver tanta agua, lo mismo pensaba Calony. Ellas reaccionaron así debido a que son alienígenas muy dependientes del líquido.
—Lyra, Calony no tienen que sacrificarse por mí, si quieren pueden unirse a los alienígenas acuáticos sin problemas, yo estaré bien. Les explicó Oriol.
—No te preocupes Oriol, siempre estaremos a tu lado. No necesitamos tanta agua. Contestaron casi al mismo tiempo, aunque las dos siempre tenían en las manos botellas con el preciado líquido.
Mientras pasaban cerca de una de las piscinas, la niña salpicó a Oriol con agua. Parecía querer transmitirle algo, pero luego se fue rápidamente. Después, la volvieron a ver, pero de inmediato desapareció. Axel había vuelto con ellos, y Cammy también estaba ahí, pero ni Lyra ni Calony le prestaron mucha atención, como siempre, porque no hablaba mucho y no se dirigía a Oriol. Estaban listos para abordar la nave.