Jacob
Ya han pasado 5 semanas desde que enterramos al papá de Sheri, todavía me duele porque me hubiera gustado conocerlo, pasar tiempo con él y haber creado buenos momentos, incluso hubiera sido lindo llamarlo suegro en su momento. En las últimas semanas hablamos con su mamá en la oficina de papá junto con mi mamá, ya le dimos tiempo suficiente a Sheri para que asimile todo.
— ¿Estás lista para oír lo que tu mamá te tiene que decir? – Le pregunto.
— No, pero nunca lo estaré hasta que la escuche ¿No crees? – Responde ella.
Tengo el impulso de abrazarla, es muy valiente de su parte enfrentar esto.
La admiro.
Caminamos a la oficina de mi papá donde se encuentra mi mamá y la mamá de mi chica, tomamos asiento en el mismo lugar. Siento sus nervios, sus dudas, yo estaría igual si mi mamá me ocultara quien soy exactamente.
— Sheri, cariño... Debo contarte algo importante. – Dice su mamá.
— Dime, mamá. – Dice mi chica inclinándose para ver mejor a su progenitora.
La señora Wilson toma aire antes de decir una sola palabra.
— El colgante que te di, este oculta el olor de tu esencia. Eres licántropo y médium. – Suelta su madre.
Mi chica se hace para atrás como si hubiera recibido un golpe en la cara mientras hace un apretón en el agarre con mi mano.
Ahora todo tiene sentido, lo sencillo que fue poder leer sus pensamientos, pero fue difícil reconocerla por el colgante que su mamá le dio. Suena egoísta en cierto punto.
— Eso no me ayuda. – Dice su voz en mi cabeza.
— Lo siento bonita.
Su mamá por otra parte decide contarle desde principio su historia con su papá.
— A tu papá lo conocí una noche que fui de fiesta con unas personas que llame amigas, me deje llevar por el momento y calentura cuando vi a tu papá bailando en aquel club. Después de esa noche nos seguimos viendo seguido, una de esas tantas salidas llegaste tú. Tu papá es licántropo, pero no se sentía orgulloso de serlo, acudió a una druida que manejaba la magia blanca y logro eliminar la maldición del licántropo en tu papá. – Dice la señora.
— Pero... ¿Por qué? – Pregunto.
— Porque los druidas, licántropos, vampiros y brujos tienen oscuridad. No importa si manejas bien tus habilidades no deja de ser una maldición, que va a perseguirte hasta que mueras. – Responde su mamá la pregunta.
Supe de estos actos, pero no pensé que fueran efectivos, al parecer si lo son.
— Entonces ¿Papá termino siendo humano hasta ese día? – Cuestiona Sheri.
— Si, más de una vez le advertí a tu papá de la casa, pero... No quiso hacer caso. – Responde su mamá en un tono muy triste.
— Por eso eran las discusiones por llamada que tenía... - Susurra Sheri por lo bajo.
— Vine aquí para ayudarte, cariño. Yo te ensañare lo que debes saber para enfrentar a ese ser. – Dice su mamá acercándose a ella.
— ¿Qué hizo papá cuando supo que estabas embarazada? – Pregunta
— Decidió hacerse cargo de sus acciones, él estuvo para ti en todo momento a pesar de todo. – Responde la pregunta su mamá.
Aclaro mi garganta porque siento que Sheri le dará algo, si esto sigue.
— Señora Wilson...
— Llámame Meredith o suegra, Jacob. – Dice la señora en un tono dulce.
— Meredith ¿Usted era la compañera del oficial Donovan? – Le pregunto.
En su mirada se le nota tristeza por lo que niega lentamente.
— No, no lo era lastimosamente.
Me duele por ella, de seguro era feliz pero cuando no eres la compañera de esa persona es complicado mantener una relación.
— ¿Papá estuvo solo todo este tiempo? – Pregunta Sheri con más seguridad.
— No, tuvo su familia, aunque él siempre la alejo solo por ser licántropos. Tu papá era el alfa de una manada, pero al quitar la maldición dejo de serlo por lo que quedo el deber a su hermano. – Responde su mamá la pregunta.
— ¿Estás diciendo que Sheri es alfa de esa manada? – Le pregunto.
— Si, lo es. – Responde la mujer.
— Yo... Necesito espacio para asimilar esto. – Tartamudea Sheri.
— Lo entiendo, si tienes dudas no te las guardes cariño. Aquí estoy, lamento ocultarte esto... pensé que hacia lo correcto. – Dice su mamá.
Después nos levantamos de los sofás para ir a la sala de estar donde se encontraba mi hermano con su chica.
— Necesito ir a la casa a recoger más cosas. – Me dice Sheri.
— No quiero que vayas sola...
— No ira sola, iremos con ella ¿o no, cariño? – Dice mi hermano detrás de mío.
— Claro, no hay problema. – Dice la castaña son una sonrisa.
— No estaré sola, querido. Nos veremos pronto. – Dice mi chica para luego darme un beso e irse con mi hermano a la casa.
Cuando salen de la casa puedo oír a mi papá llamarme por lo que voy a donde se encuentra para tocar su puerta.
— Aquí estoy. – Le digo a mi papá.
— Tenemos que hablar, hijo. Ven. – Dice él para hacerme campo en la cama.
Tomo asiento a su lado mientras observo todos los papeles que están a su alrededor.
— ¿Qué es esto, papá? – Le pregunto.
— Algunos son datos de la casa de Sheri, los sucesos, casos que no están cerrados y los datos familiares del oficial Donovan. – Responde mientras observa las hojas.
Agarro una de las hojas lo que parece ser los datos del papá de Sheri, los leo con cuidado y con mucha atención.
Nombre Robert Donovan, su edad es cuarenta seis años pensé que tenía treinta, solo tuvo una hija que es Sheri y nunca se casó.
— Esto es interesante... - Comento.
— Lo es, lo complicado es dar con la familia de él. No hay registro de ello. – Dice papá.
— ¿Qué tienes en mente, papá? – Le pregunto dejando la hoja en la cama.
— Estamos en octubre Jacob, tengo hasta noviembre para dar con la familia. – Responde él mi pregunta.
— Al parecer Sheri es licántropo por su papá. – Le digo.