02 - La duda de Naruto.

Tokyo - Japón. 

12:30 de la tarde. 

Pocos minutos habían transcurrido de una forma tensa desde que el joven de ojos azules se negó a la propuesta otorgada por parte del hombre llamado Ichigo, tratándose de un hecho que al parecer no hizo más que molestar de una manera notoria al mánager de cabello gris y actual dueño de la empresa Konoha Productions, individuo de vestimenta elegante que a su vez seguía degustando aquél cigarrillo mientras enfocaba sus orbes sobre el cantante juvenil más famoso del país. 

Chico de curiosas marcas en las mejillas que simplemente se podía visualizar observando con demasiado desinterés al hombre de cabello rubio y lentes negros, el cuál continuaba en un total estado de shock a causa de la respuesta qué había recibido tan solo momentos atrás de parte del gran cantante de música Rock, popular Rockstar que sólamente se dedicó a lanzar un pequeño suspiro a causa del tremendo aburrimiento que se apreciaba padeciendo en ese preciso momento. 

Esto al mismo tiempo que la fémina de bellísimos ojos morados contemplaba la escena sumergida en un absoluto silencio, hermosa Idol que al parecer se notaba sumamente pensativa debido a la gran negación del joven más famoso de Japón, aunque a su vez entendía ligeramente que una super estrella de la música no quisiera colaborar aún con un talento en ascenso. 

Ya que eso significaría tener que rebajarse a unos niveles más bajos para no tratar de opacar con su popularidad a un talento que todavía no tenia la fama asegurada. 

Kakashi: ¿Me podrías decir las razones por la cuál te estás negando a la colaboración?. 

Preguntó con una notable molestia antes de decidir apagar totalmente su cigarrillo y proceder a depositarlo de una forma lenta sobre un cenicero de color plateado, mismo hombre de perfil elegante que a su vez seguía con su intimidante expresión absolutamente enfocada en dirección al famoso joven de alborotado cabello rubio. 

Chico de vestimenta casual que únicamente se encontraba portando en ese preciso momento un semblante sumamente despreocupado en su mirada. 

Naruto: Simple, si ella fuera lo suficientemente buena, no necesitaría de una colaboración para lograr sobresalir. 

Respondió con un tono neutro al dirigir sus orbes azules hacia la flamante y bellísima Idol de largo cabello morado, misma fémina que a su vez no pudo evitar que una inmensa molestia se reflejará en su mirada debido a aquél comentario, tratándose de una clara expresión que además fue notada con mucha notoriedad por los dos representantes presentes. 

Ai: En verdad es eso...o es que acaso crees que no soy lo verdaderamente buena para colaborar contigo?. 

Dijo con molestia reflejada en sus palabras al proceder a colocar sus dos manos a los costados de su esbelta cintura mientras apreciaba fijamente al joven Rockstar, individuo de alborotado cabello rubio e inigualables ojos azules que a continuación únicamente decidió dedicarle una ligera sonrisa a la ojimorada. 

Naruto: Para nada, sinceramente para mi cuentas con demasiado talento, eres una Idol verdaderamente impresionante. 

Habló con una notable tranquilidad al continuar regalándole aquélla pequeña sonrisa a la joven de increíbles ojos de color morado con forma de estrellas, misma fémina que no podía evitar sentirse sumamente molesta debido al hecho de pensar que aquél pelirubio se encontraba posiblemente burlándose de ella. 

Ichigo: Entonces...porque te niegas niño?. 

Decía con una tremenda duda al momento de seguir ubicado de pié justo a un costado de su cliente llamada Ai Hoshino, joven mujer de dieciséis años de edad que todavía se podía apreciar sumamente molesta con el chico más popular del país, el cuál simplemente había decidido caminar hasta lograr sentarse en uno de los tantos bordes del mediano escritorio. 

Siendo una acción por parte del joven ojiazul que al parecer le disgustó demasiado al mánager de cabello gris, hombre llamado Kakashi Hatake que sólamente no soportaba ver que su cliente se comportará de una forma inapropiada, ya que ese tipo de comportamiento a su criterio le otorgaba muy mala imagen a su importante e impresionante empresa. 

Naruto: Porque de nada servirá que yo colaboré con ella para ayudarla, si Ai no es capaz de conectar completamente con su público, esto sería un trabajo en vano. 

Comentó con un tono tranquilo en su voz antes de proceder a sacar su celular inteligente de uno de sus bolsillos y dedicarse a observar sus redes sociales, de esta manera el joven de ojos azules logrando apreciar como sus publicaciones mantenían millones de reacciones gracias al inmenso apoyo por parte de sus fans. 

Ai: De que estas hablando, claro que conectó totalmente con mi seguidores, si no fuera así, en estos momentos no sería una de las Idols más populares de Japón. 

Exclamó con un ligero enojo al momento de iniciar a movilizarse lentamente hasta lograr ubicarse justo enfrente de aquél famoso chico llamado Naruto Uzumaki, mismo individuo de vestimenta ligera y de lentes negros que aún continuaba sentado sobre uno de los bordes del mediano escritorio perteneciente a su mánager. 

Naruto: Eres una de las Idols más populares del país...pero no la número uno y sabes porque?...porque normalmente sueles ser demasiado falsa con tus fans. 

Reveló al dejar de lado su celular y decidir enfocar totalmente su mirada hacía la hermosa mujer que en ese momento se podía apreciar observándolo fijamente, fémina que a su vez no pudo evitar quedar sumergida en un absoluto silencio a causa de las palabras recibidas por parte del chico de curiosas marcas en las mejillas, siendo de esta simple manera como el joven pelirubio logró reafirmar que al parecer tenía completamente la razón sobre la gran falsedad de aquélla chica. 

Tratándose de un hecho que a su vez dejó sumamente pensativo al mánager pelirubio y lentes negros llamado Ichigo, el cuál conocía a la perfección la enorme carencia de la idol de cabello morado para lograr mostrar sus verdaderas emociones. 

Naruto: Cómo te dije con anterioridad, e visto tus vídeos musicales, mismos vídeos en los cuáles pude darme cuenta de ese detalle, finges mucho tus emociones, y eso es algo que tus fans logran ver, esa es la razón por la cuál no despegas del todo. 

Mencionó al seguir observando de una manera sumamente profunda a la joven de increíbles ojos con forma de estrellas, linda mujer que a los pocos segundos había decidido bajar su mirada en dirección al suelo de la gran habitación, misma escena qué a su vez se encontraba siendo observada con demasiada atención por parte del mánager nombrado Kakashi. 

Naruto: Pero...porque habría de sorprenderme, después de todo, ustedes las Idols son unas perfectas mentirosas, aunque al parecer no siempre funciona. 

Pronunció antes de decidir dejar de sentarse sobre uno de los bordes de aquél mediano escritorio construido de madera, para después simplemente comenzar a caminar de una forma sumamente tranquila hacia la entrada de la oficina, de esta forma dejando poco a poco detrás a la linda Idol de dieciséis años de edad que en ese instante seguía con su mirada baja. 

Fémina de largo cabello morado que únicamente continuaba pensando en todas las palabras dichas segundos atrás por el cantante más popular de Japón, mismo joven de intenso cabello rubio como el sol que solo seguía dirigiéndose en dirección a la puerta de la gran oficina perteneciente a Konoha Productions. 

Naruto: Si ya no hay nada más de que hablar, me marcho, ya que tengo muchas cosas que hacer, así que...hasta luego. 

Sentenció al lograr ubicarse justo enfrente de la puerta de la habitación y proceder a enfocar su expresión en dirección a su actual mánager de intenso cabello gris, para después sólamente decidir abrir de una forma sumamente tranquila aquélla misma puerta ante las expresiones por parte de ambos flamantes representantes, los cuáles simplemente se encontraban en un total silencio al momento de observar como aquél chico de ojos azules salía de la oficina sin decir ni una sola palabra más. 

Por su parte, la fémina llamada Ai Hoshino había decidido apretar sus puños con mucha fuerza mientras continuaba con su mirada hacía el suelo de la gran oficina, ya que al parecer aquél popular Rockstar de alborotada cabellera rubia le había dado un golpe verdaderamente duro al decirle uno de sus más lamentables defectos, siendo ese defecto el no poder demostrar una emoción o sentimiento verdadero hacia las miles de personas que pagaban un boleto para poder ver sus conciertos. 

Terrible carencia emocional que a su vez la maravillosa mujer de largo cabello morado había tratado completamente de ocultar con diversas sonrisas y facciones falsas, mismas sonrisas que lamentablemente no funcionaron en lo más mínimo con aquél popular chico de curiosas marcas en las mejillas de flamante apellido Uzumaki. 

Tratándose de un hecho que a su vez sorprendió a más no poder al elegante hombre de lentes negros y de corta cabellera dorada llamado Ichigo Saitou, ya que en todo el tiempo que llevaba conociendo a la Idol de ojos con forma de estrellas, jamás una persona había logrado descubrir totalmente sus sonrisas falsas. 

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Tokyo - Japón. 

12:50 de la tarde. 

Una tremenda decepción emocional se había apoderado sumamente de las respectivas mentes de los dos hombres llamados Ichigo Saitou y Kakashi Hatake, misma decepción que al parecer se debía más que nada a la rotunda negación que recibieron de parte del joven más popular del majestuoso e inigualable país Nippon, chico de intensos orbes azules que en ese preciso momento se podía visualizar movilizándose de una manera tranquila a través de los pasillos del inmenso edificio. 

Aunque tratándose de un sentimiento que desapareció rápidamente cuando ambos representantes apreciaron como aquélla linda Idol decidía darse la media vuelta, mujer ojimorada que a continuación también procedió a salir de la oficina a paso rápido ante las miradas expectantes por parte de los dos actuales mánagers, siendo una acción que al parecer ocasionó qué una pequeña sonrisa adornara absolutamente la mirada de aquél elegante hombre de profundos ojos ónix. 

Una vez fuera de la elegante habitación, la joven de largo cabello morado había comenzado a buscar con su mirada y entre los diversos pasillos al joven Rockstar, siendo una acción que parecía estarsele dificultando demasiado debido al inmenso número de empleados que se ubicaban en las enormes instalaciones de la empresa. 

Empleados que en ese preciso instante se encontraban realizando sus respectivas labores mientras iban de un lado a otro a través de la impresionante estructura, buenos trabajadores que además se apreciaban observando con cierta curiosidad a la inigualable mujer de bellísimos orbes con forma de estrellas. 

Ai: ( El no miente, yo realmente no sé cómo mostrar un sentimiento verdadero, pero aún así, tengo...que convencerlo ). 

Pensó mentalmente al momento de seguir buscando arduamente al famoso cantante de música Rock de intenso cabello rubio, el cuál actualmente se podía visualizar plasmado en diversos carteles ubicados en las paredes de los numerosos pasillos, de esta manera demostrandose que aquél mismo chico de diecisiete años de edad era la estrella más grande de la empresa. 

Ai: ( En donde se metió ). 

Volvió a pensar de una forma mental mientras continuaba recorriendo los pasillos pertenecientes a la gigantesca empresa nombrada Konoha Productions, hermosa Idol que a su vez estaba comenzando a sentir una ligera desesperación en su corazón debido al hecho de no poder encontrar al pelirubio. 

Emoción que no hacía más que aumentar los deseos de la famosa cantante juvenil por encontrar al individuo de vestimenta ligera llamado Naruto Uzumaki, joven que a pesar de su desinterés tenía que convencer a como diera lugar de realizar aquélla increíble colaboración musical. 

Ya que sólo aquél mismo joven contaba con la popularidad suficiente para poder impulsarla de una forma impresionante ante el exigente e intenso público Japonés. 

Misma desesperación que al poco tiempo se desvaneció de una manera abrupta cuándo la fémina de cabello morado logró visualizar finalmente al chico ojiazul, mismo joven de marcas en las mejillas que al parecer se podía apreciar actualmente conversando de una forma tranquila con lo que parecían ser un par de personas, personas vestidas con elegantes trajes de gala que a los pocos minutos habían decidido dejar totalmente solo al chico más importante de la empresa de talentos. 

Así que de una manera inmediata y ante un enorme mar de buenos empleados, la linda fémina llamada Ai Hoshino había decidido acercarse de una forma valiente hacia el cantante juvenil más popular de la majestuosa nación del sol naciente, hombre de alborotado cabello rubio que al parecer no pudo evitar mostrar una ligera mueca de disgusto en su mirada al notar como la Idol se dirigía en dirección a él. 

Joven mujer de lindos orbes morados que a los pocos segundos transcurridos había logrado posicionarse completamente justo enfrente del chico de ojos azules, él cuál simplemente decidió cruzarse totalmente de brazos ante la expresión seria que en ese preciso instante estaba recibiendo por parte de la pelimorada. 

De esta simple manera comenzando una profunda lucha de miradas entre los dos cantantes juveniles más populares de la tecnológica y bellísima ciudad de Tokyo, siendo una corta batalla de miradas que a su vez culminó completamente cuándo el flamante individuo de alborotado cabello rubio como el sol decidió tomar la palabra. 

Naruto: Sé te ofrece algo más?. 

Preguntó con un ligero desinterés al estar observando fijamente a los ojos a la mujer que se ubicaba de pié justo enfrente de él, bella fémina de vestimenta casual que únicamente continuaba dedicándole una expresión repleta de absoluta seriedad, tratándose de una clara expresión que a su vez no parecía estarle incomodando ni afectando en lo más mínimo a su persona. 

Ai: Si te demuestro que soy capaz de conectar de una forma real con todos mi seguidores, tu...tu aceptaras hacer esa importante colaboración conmigo?. 

Contestó con una suma seriedad reflejada en su tono de voz al momento de estarle manteniendo la mirada al joven de inigualables orbes azules cómo el mar, siendo unas palabras que sólamente provocaron qué aquél mismo chico se sumergiera en un total silencio mientras seguía cruzado completamente de brazos, silencio que al parecer le ocasionó un ligero nerviosismo a la cantante juvenil más popular de la mediana empresa de talentos llamada Ichigo Productions. 

Naruto: Y cómo piensas hacer eso. 

Comentó con un diminuto toque de indiferencia antes de decidir dejar de cruzarse de brazos y proceder a acomodarse un mechón de su cabello, individuo portador de unos lentes negros que después simplemente decidió lanzar un ligero suspiro de aburrimiento ante la Idol que seguía de pie justo enfrente de él. 

Ai: En unos cuántos días, ofreceré un gran concierto en un mediano escenario, si tú aceptas asistir, en ese lugar, yo podría reafirmarte que soy capaz de conectar de una forma sincera con todo mi público, lograre cambiar totalmente tu opinión. 

Habló con una notable determinación al momento de empezar a acomodarse de una mejor forma la gorra de color azul que se encontraba posada sobre su cabello, misma determinación que a su vez había logrado sorprender de una manera sumamente ligera al flamante chico más popular del increíble país llamado Japón. 

Naruto: Y si es todo lo contrario. 

Dijo con una pequeña duda adornando su mirada al estar apreciando de una forma fija los ojos morados y con forma de estrellas de la linda Idol de dieciséis años, fémina que a continuación había decidido desviar su expresión de aquéllos intensos orbes azules que en ese preciso momento continuaban visualizandola directamente. 

Ai: Si es todo lo contrario...yo no volveré a pedirte una colaboración musical jamás. 

Decía con una suma seriedad mientras continuaba con su mirada completamente desviada de la expresión de aquél chico de intenso cabello rubio como el brillante sol, siendo unas palabras que al parecer dejaron totalmente pensativo al joven que en ese instante se podía visualizar enfocando sus ojos azules sobre la fémina. 

Mujer llamada Ai Hoshino que sólamente se encontraba esperando con nerviosismo la respuesta qué le otorgaría el joven perteneciente a Konoha Productions. 

Mismo joven que para la gran sorpresa de la linda mujer de bella cabellera morada, simplemente había decidido darse la media vuelta y empezar a caminar de una forma tranquila a través del largo pasillo, tratándose de una acción que a su vez no hizo más que llenar de una enorme decepción a la popular Idol de Japón, la cuál únicamente procedió a bajar su entristecida mirada en dirección al suelo del escenario repleto de total empleados. 

Se sentía decepcionada de sí misma por no haber podido convencer al cantante juvenil más popular del país Nippon, además de que posiblemente había perdido la oportunidad de lograr que su carrera musical despegara completamente. 

Naruto: Oye Ai...ya nos veremos. 

Exclamó con un tono amigable después de haber detenido su tranquilo trayecto y haber dirigido su expresión en dirección a la fémina de maravillosos ojos morados, joven mujer que rápidamente levantó su hermosa mirada a causa de las palabras otorgadas por parte del individuo de curiosas marcas zorrunas en las mejillas, cantante de música Rock que en ese preciso momento se encontraba regalandole lo que parecía ser una radiante e inigualable sonrisa llena de vida. 

Gesto que al parecer logró desaparecer absolutamente la enorme decepción que se reflejaba en el bello rostro de aquélla mujer perteneciente a Ichigo Productions, misma fémina de ojos en forma de estrellas qué a los pocos segundos pudo apreciar como aquél chico decidía seguir lentamente con su tranquilo camino, de esta simple manera el joven pelirubio dejando poco a poco detrás a una Idol que únicamente lo apreciaba marcharse con una ligera sonrisa adornando su mirada. 

Sonrisa que en ese instante se distinguía maravillando a todos los empleados que se ubicaban en esa zona de la empresa, siendo un acontecimiento que al poco tiempo la pelimorada logró detectar de una manera sumamente inmediata, de esta forma la linda fémina pudiendo apreciar como las curiosas personas se encontraban observándola fijamente. 

Tratándose de un hecho que al parecer no le importo mucho a la Idol debido a que posiblemente había logrado su cometido, cometido que a su vez dependería totalmente de la unión que ella mostrara con su enorme número de seguidores, requisito que debería de cumplir a la perfección si quería obtener la increíble colaboración con el joven de cabello rubio. 

Mismo requisito que además había sido impuesto por aquél popular Rockstar a causa de las enormes dudas que poseía, joven de orbes azules cómo el mágico mar que únicamente decidió abandonar el edificio y regresar a su departamento, ya que lo que más deseaba el pelirubio en ese preciso instante era poder acostarse de nueva cuenta sobre su cómoda cama.