Alesso Bianchi
De inmediato saco mi celular, mis ojos están empapados, mi madre esta a mi lado llorando, observamos como los bomberos intentan apagar la llamarada, estoy asustado, pero trato de proteger a mi madre, protegerla de la desgracia, porque no quiero que vea nada de lo que ocurre.
—Llama-llama a tu hermana —me dice mi madre con su labio inferior temblando, yo la ignoro, se que esta con alguien que prefiero no ver— ¡Llámala Alesso! Ahora
Saco mi celular, yo se lo que vi, ese inconfundible tatuaje, era él, era él y lo sostengo. Aún así marco los dígitos y pongo el teléfono en mi ojera.
—Bue-bueno —contesta ella entre carcajadas— espera Eros, es mi hermano —vuelve a soltar otra carcajada y después de unos cuantos segundos ella retoma la llamada un poco mas calmada— ¿Qué pasa?
—Tienes...que venir —le digo tranquilizando mi voz— ahora mismo.
—¿Paso algo? ¿Todo bien Alesso? —me pregunta.
—No pasa nada, ahora ven Zia, apresúrate en llegar —le digo serio, pero alguien debía de arruinarlo.
—¡El fuego no parece calmarse, necesitamos más agua! —grita uno de los bomberos
Respiro, trato de no agitar mi respiración pero parece ser imposible y mi madre esta comenzando a sollozar con más fuerza, no podre ocultarlo por más tiempo, estoy asustado, furioso, que se yo.
—¡¿Qué ocurrió?! —me pregunta nerviosa Zia, ella aún sigue en la llamada— ¿Qué esta pasando Alesso?
Suspiro mientras veo a los bomberos pasar.
—Iba llegando a la casa, mamá había ido a el salón de belleza. Todo fue muy rápido, la casa estaba en llamas —Zia suelta un grito desgarrador y escucho como Eros le dice o más bien le pide que se tranquilice, que todo estará bien— papá estaba adentro, la casa aún sigue en llamas. Mi padre esta muerto Zia y yo vi a Eros frente nuestra casa —estoy asegurando algo muy grave, pero les juro que era su tatuaje— Eros mato a papá, Zia.
Ella colgó de inmediato y fue lo ultimo que supe.