Narrador omnisciente
Dicen que existen amores que nacen desde la infancia y otro son amores a primera vista y puede que sea cierto, pero en este caso fue odio a primera vista, desde que Steven conoció a Skayler le molesto la atención qu le daba a su padre y como lo miraba.
Steven buscaba a su padre, pues estaban a punto de salir y este no estaba en la entrada de la casa como se suponía.
—Disculpa es que una linda chica me entretuvo afuera —dijo su padre y ya Steven tenía una idea de quién era.
—No me digas que otra vez la odiosa de Skayler te dijo que fueras su novio — su padre asiente este niega enojado, sus clases empezaron hace algunas semanas y la vecina nueva resulto ser su compañera la cual dice que está enamorada de su padre y dice que se va a casar con su padre para ser la madrastra malvada.
—Vámonos, ya no quiero ver esa fea —dice el pequeño rodando los ojos y su padre le da una mirada severa.
—Bien, pero no la llames, así es de mala educación y nosotros te hemos educado bien, en especial tu madre — el pequeño asintió y ambos salieron, pero hay estaba ella con una bandeja en sus manos y una linda sonrisa dibujada en su rostro.
—Mi hermana y yo hicimos galletas, ya que la abuela dice que por el estómago se llega al corazón de los hombres y yo quiero tu corazón —dijo la castaña de coletas mientras miraba al bombero, encantada Paolo tomo las galletas y las engullo haciendo sonidos de placer.
Steven resoplo cansado, pues la vía en todos lados y para el verla en la escuela era mas que suficiente.
—Tu abuela es muy sabia, te prometo que si cuando tengas 22 aún te quieres casar conmigo y estoy soltero serás mi esposa…
—No papá, no puedes casarte con ella… es que… mejor vámonos —Paolo sonrió por la interrupción de su hijo, y se percató de cal era la razón de su aversión a niña. Se despidieron y subieron al auto.
—Porque no eres sincero con papá y le cuentas la verdad —expreso en tono bajo una vez se alejaron y detuvo el auto frente al parque.
—Esa mocosa fea me gusto el primer día, se hizo mi amiga y compartimos la merienda, pero desde que te vio a ti ya no me pela solo que para molestarme —confeso sin mirarlo, Paolo lo giro para verlo y seco las lágrimas que salían de sus hermosos ojos.
—Ella solo está deslumbrada con el porte de tu padre, pero cuando ella crezca yo estaré muy viejo y tú estará igual a mí, así que podrás decirle lo que sientas, entonces ella se enamorará de ti, si no es una tonta o también alguna otra niña aún es pronto para saberlo así que sonríe cuando grande serás tan guapo o aún más que yo y menos bobo de eso estoy seguro —musito y una sonrisa apareció en su rostro.
—Eso me gusta, ahora vamos a jugar —salió corriendo del auto como siempre lo hacía.
El tiempo pasaba y la tensión no dejaba de crecer, Skayler y Steven compartían clases y se trataban lo más cordial posible a pesar de ser vecinos.
…
—Bien sabes que Skayler está en mi clase, hoy fue un gran primer día, aunque hice algo malo —le cuenta a su madre luego de llegar de su primer día en segundo grado.
—Pero Steven, porque te peleaste, yo te he dicho que eso está mal, además rompiste el labio de un niño mayor — Camill lo miro enojada y él baja el rostro avergonzado.
—Señora, el joven Paolo Palacio está afuera y quiere saber si puede entrar a él, lo llamaron del colegio cuando usted no contestó y pues desea conversar con usted —Camill, asiente y recibe al padre de su hijo.
—Mami por favor no me castiguen o regañen, prometo no volverlo hacer si él tampoco hace lo que hizo —no muy bien termina de hablar cuando su padre choca los puños con él.
—Pero bueno y cuál es la euforia de pelear, este jovencito lo que merece es un castigo—dice su madre.
—Te explico, tu hijo golpeo a un chico de cuarto grado porque este empujo a una niña de segundo y le agarro el cabello sacándole su lazo, la pequeña se raspó la mano y tu hijo tuvo… digamos que un impulso y como hemos estado practicando en el gimnasio le dio un fuerte derechazo —vuelve a chocar los puños y escuchan una voz detrás alabarlo igual.
—En serio campeón te felicito, siempre debemos de proteger las chicas, sobre todo si estas son lindas—dice el padrastro de Steven.
—Es bueno verte Paolo, vamos por un trago y quédate a comer —lo invita Ernesto, este mi mira a la madre de su hijo y luego asiente.
—Te tomaré la palabra, gracias, estoy hambriento y ya estoy libre, aunque más tarde tengo una…
Steven Palacios
Yo sé que mi mamá Camill es mi madre de corazón, pero que estuve en la panza de mamá Natalia, que ya no está con nosotros, pero me cuida donde sea que este.
Mi nueva profesora de segundo grado es muy bonita, siempre está sonriendo y me acaricia la cabeza con cariño, ella podría ser mi otra mamá como dice la tía Karla.
Pero papi no quiere ninguna novia, así que armaré un plan para conseguirle una novia y sé quién me puede ayudar.
—Mami necesito tu ayuda —digo cuando llego a la cocina este fin de semana me toca estar con ella, en un rato, nos iremos al almuerzo familiar que toca donde la tía Isa, pero ella está preparando uno de sus ricos postres para compartir con la familia.
—Claro que si mi príncipe dime que deseas —responde regalándome una gran sonrisa, ella es muy linda, me gustaría que fuera novia de mi papá, pero ya me explicaron que si tienes esposo no puedes tener novio.
—¿Qué te parece mi maestra? —le pregunto, pues su opinión es muy importante para mí y también para mi papá, ya que cuando le pido algo o ir de paseo siempre dice ¨ Debemos hablarlo con tu madre ¨
—Ella es muy profesional, simpática y por lo que he visto en estas semanas muy buena con los niños, ¿por qué? —dice con una sonrisa y luego pregunta.