La noche paso como si hubiese transcurrido una eternidad. No logré conciliar el sueño debido a la conversación del día anterior, pensar que con algunos de los que me crie o conocía desde que tenía memoria me traicionasen me volvía loco. Incluso el confort que me proporcionaba Tobías, junto a muchas horas de pasión no lograba hacerme olvidar del todo nuestro problema.
Me encontraba tomando un baño cuando la puerta de la lucha se deslizó a mi lado.
—¿Necesitas ayuda con eso?—habló mi chico en un sensual tono.
—Nada me encantaría más.
Le jalé pegando su cuerpo al mío con los chorros de agua mojándonos a ambos. Sostuve su cara entre mis manos sin poder evitar darle un beso, el deseo de saborear sus labios comenzaba a volverme loco. Cuando mi excitación comenzó a latir, Tobías se separó lo suficiente para poder hablar y entre jadeos dijo:
—Créeme que me apetecería mucho olvidarme de todo y pasar el resto del día encerrado en una habitación a tu lado, pero ya quedamos con Nolan y sabes que al consejo no se le hace esperar.
Necesité respirar profundamente reiteradas veces para no mandarlo todo a la mierda y saltar sobre Tobías.
Sin ningún tipo de pudor lo coloqué de espaldas a la pared de la ducha y apoyando mi brazo sobre esta susurre de manera coqueta.
—Cuando salgamos de esta, vas a pasar mucho tiempo sobre mi cama sin poder recordar si quiera la luz del sol—volví a besarle sin darle siquiera tiempo a responder.
Luego del breve baño y retomando la seriedad del día anterior comenté:
—Creo que deberíamos llevar a alguien de confianza a la reunión, por lo menos deberíamos contar con los más leales para discutir sobre este asunto.
Tobías tras pensarlo unos minutos asintió con un leve movimiento de cabeza.
—Llamaré a mi rastreador Marcos, ya le conoces, era el que se encontraba en la última reunión conmigo, fue el que me entregó la información actual.
Pensar en ese vampiro hizo que una ola de celos me invadiera al recordar su cercanía con mi chico cuando yo ni siquiera era capaz de tocarlo en ese tiempo. No obstante, entendía que él no significaba una amenaza y mientras más personas de confianza a nuestro lado mejor.
—De acuerdo, yo también haré unas llamadas. Dile que nos reuniremos en una hora en la morgue del edificio de policía.
Dicho esto, Tobías se dirigió a la sala para llamar a Marcos e impartirle las coordenadas, en cuanto a mí, me encaminé a la habitación.
Realicé primero una breve llamada al líder de los cambiaformas para pedirle el número de Derek su segundo al mando. Mentí diciendo que era para saber sobre el chico del hospital, del líder no estaba seguro, pero algo me decía que podía confiar completamente en Derek. Cuando logré contactarlo, sin darle muchos detalles, quedamos en que se reuniría con todos los demás en el lugar y la hora señalada.
Intenté llamar reiteradas veces a Zack, pero no contestaba e teléfono por lo que deje un mensaje de voz diciéndole que se reuniese conmigo lo más pronto posible. Zack dirigía algunos de los grupos de investigación, por lo que me debía varias explicaciones, además, necesitaba enterarse de las nuevas noticias.
Ya era hora de ir camino al lugar de reunión, allí nos encontraríamos con Michael y Nolan que se citaron más temprano y el resto iría llegando, máximo en una hora.
Tobías y yo decidimos ir en mi camioneta juntos para ahorrar tiempo. En el camino fuimos repasando todo lo que sabíamos hasta ahora cuando mi móvil comenzó a sonar. Era Zack, como estaba conduciendo activé e manos libres.
—Ryan, acabo de escuchar tu mensaje ¿Qué sucede?
—¿Dónde estabas que no respondías el móvil?— exigí saber.
—Lo siento hermano, me encontraba con la viuda de una de las víctimas, no lo está pasando bien desde…bueno ya sabes.
Esto me desconsolaba, yo había perdido a mis camaradas, pero muchos perdieron a sus familiares.
—Reúnete conmigo en la morgue lo más pronto que puedas, tenemos nuevas pistas.
—De acuerdo, llegaré en media hora.
Al finalizar la llamada volví a centrar mi atención en la carretera hasta que me percaté del gesto fruncido de Tobías.
—¿Qué ocurre?—quise saber.
—No me agrada tu hermano—contestó sin rodeo alguno, su afirmación no me agarró por sorpresa.
—Sé que no se llevan bien pero te pido paciencia. Se rige mucho por las antiguas tradiciones en cuanto a las relaciones y alianzas entre razas—para quitarle un poco de seriedad al asunto agregué— Si fuese por el Van Helsing existiera e iría por ahí cazando a Drácula.
—Sabes que no le gustará que estemos juntos, ¿Qué piensas hacer?
—Es mi vida y nadie puede decirme como vivirla, ni siquiera mi familia.
Eso pareció calmar un poco a Tobías, pero por su gesto deduje que aún había algo que lo incomodaba aunque preferí no ahondar en ello.
El resto del camino lo transcurrimos en silencio hasta llegar al edificio de policía. Fuimos hasta la morgue donde para mi sorpresa ya se encontraban todos los citados a excepción de Zack que debería de estar al llegar.
Para mi suerte Michael puso a tanto de todo a Nolan, por alguna razón se negaba a acercarse al cambiaformas, por lo que a él se lo explicó Marcos que era conocedor del motivo de nuestra reunión.
—Han hecho bien en no avisar al resto del consejo—se adelantó Nolan— Si son ciertas vuestras deducciones no podemos estar seguros de si hay algún infiltrado.
Pero han sido muestra del poder por décadas—inquirió Michael.
—El poder corrompe—argumentó Derek desde una esquina apartada.
—El joven cambiaformas tiene razón—prosiguió Nolan— A pesar del gran dominio que presentan los ancianos, al igual que ustedes, responden a las órdenes del alfa, o sea, Ryan.
En ese momento todos me miraron a mí.
—Lo que no entiendo es ¿Por qué han demorado tanto en volver a atacar? ¿A qué esperan?
Este nuevo enigma planteado por Marcos dejó pensando a más de uno, pero yo ya sospechaba algo.
—Esperan la oportunidad del golpe final, algo los retrasa. Debemos estar más unidos que nunca.
Todos asintieron y Tobías acercándose a mi lado dijo.
—Cuenta con el apoyo de los vampiros—este gesto junto con la mirada divertida de todos, en especial la de Nolan, lograron sonrojarme.
—Cuenta también conmigo y mis hombres—continuó Derek— Nuestra lealtad siempre estará junto al verdadero alfa y su pareja.
Esto casi logra reventar mi corazón de la emoción, todos sabían sobre mi relación y aun así la apoyaban, no podía ser más feliz. Mi sonrojo estaba en su máximo nivel hasta que una voz furiosa a mis espaldas casi gritó:
—¿Qué quieren decir con el alfa y su pareja?
Primera vez en mi vida que veía a Zack tan furioso, su enojo injustificado me desconcertaba.
—Jamás esperé eso de ti Ryan, en serio un vampiro.
—Zack, escúchame, estamos aquí por nuevas noticias con respecto a los asaltos y…
—No trabajaré con tu rata voladora.
Marcos fue hacia delante en defensa de su líder, pero Tobías lo detuvo.
ESTO DEBO RESOLBERLO YO.
—Zack, hermano, debemos estar más unidos que nunca en este momento. No hay razón para tanto odio injustificado cuando existe un enemigo mayor.
Eso pareció aumentar la cólera de Zack.
—Hermano, hermano— repitió en un tono muy despectivo— Claro, siempre he de ser solamente un hermano que este ahí para ti ¿no?
Luego de lo dicho Zack dio media vuelta y se marchó dejándome más confundido que antes por su comportamiento. Ya esto se sentía mucho más directo que un simple odio y discriminación hacia los vampiros. Necesitaba respuestas y daba por hecho que las tendría.
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Editado: 19.04.2020