CAPÍTULO 30

Han pasado ya unos días desde la muerte de Raúl, sigo con el corazón destrozado, estoy ahora mismo sentada en una silla llorando junto a Lía mientras escuchamos como un cura habla de él, han venido sus padres también, apenas he tenido tiempo o ganas de hablar con ellos, ahora mismo solo puedo pensar en el maldito momento en el que tuve que conocer a Dylan, me levanto y me pongo frente a todos para decir unas palabras. 

-Desde que lo conocí siempre me a sacado una sonrisa, siempre me a mirado con buenos ojos y siempre me ha hecho ser la chica más feliz del mundo, ahora apenas puedo pasar un momento en el que no piense en él, ha sido lo mejor y lo más rápido que ha venido a mi vida y de ahora en adelante jamás podré olvidarte, has sido y serás el amor de mi vida-Digo llorando, después vuelvo a mi silla a ver como está siendo enterrado el amor de mi vida 

Por la tarde, en mi casa con Dani empezamos a hablar de él, tengo un problema que no le e contado a nadie aún pero el día que nos quedamos solos en el hotel lo hicimos sin protección y creo que estoy embarazada, se lo cuento a Dani y me pregunta hace cuanto fue eso. 

-Hace un par de semanas creo-Le respondo 

-Vamos a la farmacia, compramos un predictor y te haces el test 

Le hago caso y vamos a la farmacia, cuando volvemos a casa me hago el test y cinco minutos después tengo la respuesta, así es, estoy embarazada.  

-¿Lo piensas tener?-Pregunta Dani-El bebé nacerá sin padre-Dice dolido 

-Claro que lo tendré, será el vivo recuerdo de Raúl, deseo que sea niño para poder llamarlo como a su padre 

-Felicidades…-Me dice son una sonrisa a lo que yo le respondo con un abrazo 

Raúl, aunque ya no puedas escuchar esto te deseo lo mejor allá dónde estés, eres sencillamente lo mejor que me ha pasado en toda mi vida, te voy a echar muchísimo de menos, te prometo que para mí serás el único y espero que desde allí arriba puedas ver bien como va creciendo nuestro bebé, te prometo mi vida que siempre estaré pensando en ti… 

FIN