Dos semanas, fue el tiempo que tardo en alejarse de nuevo
Ella había aceptado los sentimientos de su amigo
Su amigo era feliz, se notaba y ella, ella era feliz por su amigo
El la extrañaba, extrañaba sus tontas discusiones por el tipo de helado que comerían después, extrañaba sus ocurrencias y sonrisas
Ella extrañaba sus abrazos, extrañaba como la procuraba, extrañaba sus mimos y sus besos de buenas noches
Ambos se extrañaban, demasiado. Pero ninguno se atrevía a decirlo