Olvidas que cuando rompes un corazón rojo y latente,
Este deja de amar, deja de sentir, deja de llorar cada noche,
Y los pulmones permanecen sin oxígeno alguno.
Te di la oportunidad de arreglarlo,
Coloqué las herramientas en largos discursos extraños,
mas yo olvidaba que para mí, tus oídos nunca funcionaban.