Peter

Capitulo 3: Risa espeluznante

Y lo siguiente fue maravilloso, desde la cima del risco más alto, Tinker Bell emprendió un espectacular vuelo, fue y toco el polvo que había en las nubes, también pinto crepúsculos en aquel cielo vacio, y Peter Pan se sintió orgulloso de haberla empujado, de haberla ayudado a conseguir tal odisea, sin embargo lo que no comprendimos fue su brazo roto, lo que no entendimos fueron los ojos asustados de mis padres y peor aún, lo que no logre concebir fue aquella cita donde las paredes blancas reinaban sobre el silencio ensordecedor, donde el tic toc del reloj taladraba mi cerebro, Hailey estaba a mi lado, riendo, llorando, gritando, enloqueciendo...

-Peter hijo-mi madre con ojos angustiados me miraba suplicante- ¿Por qué empujaste a la niña por las escaleras? ¿A caso escupiste la medicina nuevamente?

Los pequeños susurros a lo largo del camino tarareaban una densa melodía, tan perfecta, tan siniestra, que reía de la impotencia.

-¡Peter!- enfureció-¿Por qué lo hiciste?

¿Tinker bell o Hailey?

-Pero Tinker Bell... Ella-señale a la pequeña hada quien intentaba atrapar restos de polvo de duende que se encontraban esparcidos por la estancia, lo cual le resultaba gracioso.

-¿Cual Tinker Bell?-Mi padre frunció el ceño mientras miraba a Hailey- ¡Tiraste a la niña por las escaleras Peter, se ha fracturado el brazo, ¡¿Por qué tiraste la medicina?! ¡ y no logro comprender que es tan gracioso!-dijo mirándola.

¿Escaleras? No tu no lo hiciste Peter, ¿O tal vez si?, aquella risilla densa, aquel susurro gélido... Tenias que ayudarla, Tinker bell... Hailey... Ella merecía seguir volando Peter...

Hay un problema-Hombre calvo, con bata blanca y anteojos dijo con una mirada confusa- Definitivamente aquí hay un problema, tendría que hablar con el psicólogo del niño, no creo que sea bueno tenerlos juntos y pues no es normal que la niña este riendo descontroladamente y al mismo tiempo este llorando en una situación como esta... El historial médico de ella-

-Hailey es una niña completamente sana doctor-lo interrumpió mi madre-Nos fue entregada en un estado totalmente normal y saludable-trago saliva- y Peter... el... bueno-

-Es un caso perdido-siseo molesto mi padre interrumpiendo a mi madre.

De un momento a otro Tinker bell reía, gritaba incoherencias, su cara era un poema tan trágico que de un minuto a otro la pequeña hada desapareció de mi vista, siendo aquella chica vulnerable... aquella niña que la vida se encargaría de destruir pieza por pieza...

Tic toc

Fue solo cuestión de segundos para que el caos hiciera su aparición bajo aquel enorme telón... El piso se lleno de insectos, tantos que Peter Pan quería salvar al hada pero ella nadaba cada vez mas hacia lo profundo... y yo no se nadar. 

Un agujero negro de murmullos inconexos magullaban cada rincón de mi mente y no fui consiente en ese momento de que mi cabeza golpeaba contra el buró de madera... golpe tras golpe, así se fue la lenta melodía, se desvaneció hasta llegar a una oscuridad cegadora.

Desde aquel incidente, alejaron a Hailey de mí, no había visto a Tinker bell, en realidad no sabía quién era Tinker bell... ¿O tal vez si? No lo se... aquellos frascos con píldoras me llevaban a un mundo tan seco, tan carente de vida, la magia tal y como es, desapareció, la pequeña hada se perdió dentro de ella misma, y la alegría se esfumo por completo, dejándome en un blanco y negro que dé a ratos me asustaban.

Porque el hecho de olvidar quiénes somos y quienes fuimos me atormentaba, me hacia vagar en reversa me hacia volar y frenar de golpe, provocando estragos... provocando miedo y eso solo era el comienzo de algo... terriblemente malo.



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En el texto hay: secretos, amor, fantasia

Editado: 17.12.2018

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