Piel morena

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nthony y yo estábamos rodeados y combatíamos cuantos pudiéramos hasta que temí lo peor, dos espadas una atraviesa el hombro derecho de anthony y su costado izquierdo el corte no parecía profundo en ninguna de las heridas hasta que estos se detienen y forman un circulo uno de los soldados se acerca a anthony y pone un cuchillo en su cuello -no te muevas! o mejor dicho nadie se mueva- dijo mirando a mi padre y nuestros soldados mas cercanos -un paso mas y los descuartizo!- gritaba el hombre, estaba asustada no quería que le hicieran daño a anthony ni a mi padre o a ninguna persona en eso se oyen pasos seguidos por risas maniáticas reconocía esa risa donde fuera, era sarah con una espada ensangrentada en sus manos -sarah! que es el que te propones!? por que nos has traicionado?! por que a tu país?!- le preguntaba a sarah mas ella parecía haber perdido la conciencia sus ojos ya no mostraban espíritu o alma que contendiera ese cuerpo, -tu ya sabes el porque! por años intente ganar el corazón de mi rey! llevaba poca ropa al limite de ser manoseada por los guardias, soporte sus gritos y enfados cada vez que algo pasaba, lo ayudaba a escaparse del castillo, entraba a su habitación esperando algo a cambio que me quisiera, que se enamorara de mi, que al menos supiera quien era yo, ser reconocida como mujer y no como una simple sirvienta mas del castillo!- decía, de su rostro salió una pequeña lagrima pero se la seco de inmediato me apunto con su espada y su rostro se veía lleno de furia -pero tu tan solo llegaste y el cayó rendido a tus pies, tu ni lo querías, querías escapar del castillo odiabas estar aprisionada, pero, que paso? Te comenzaste a enamorar, comenzaste a preocuparte por el, que no se enojara contigo reír u jugar, pasaste en su cama junto con el dormidos, te escapaste junto con el te compro ese estúpido collar que llevas colgando. Yo lo vi todo! cada detalle las veces que visitaron el pueblo las veces que se ponían acaramelados. Por eso escape para tener mi venganza y hace rato me hicieron un buen trato pero ese sera mi ultimo recurso antes no importa si me matan te mataré a ti!- directamente a mi vino y detuve su espada sus ataques eran rápidos no sabía esgrima pero en algo estaba segura, ella no sabía que yo no me rendiré tan fácil.

Cada ataque suyo que yo recibía lo esquivaba y lo detenía ella se estaba cansando de esto, lo notaba en su cuerpo hasta que se detuvo -esta bien parece que aun dando todo mi potencial no te derrotare- decía con sudor en el rostro entonces hizo una señal con su mano y volteé habían herido a mi padre ! una espada atravesó su pierna -argh!- gritó mi padre de dolor estaban a punto de herirlo de nuevo, sarah hace otra señal pero esta vez a anthony, aquel soldado lo tiro lo pateó y pisó hasta que de su boca broto la sangre -detente!- se suplique -haré lo que sea pero deja esta guerra y a toda la gente de este pueblo a el rey y el general también!- se oyó de nuevo el como se atravesaba aquella pierna pero ahora en su brazo, la sangre comenzó a brotar y no se detenía me tire al suelo y sentía como mi lagrimas brotaban de mi rostro entonces ella rió victoriosa -entonces... dejaras este reino de mierda eh iras con el rey klaner a clinthar seras todo lo que el quiera que seas sin poner resistencia alguna y nunca volverás hasta que el esté muerto, dejaras todo sentimiento por el rey anthony, entendido?- me preguntó mas mi orgullo no me lo permitía y tampoco quería aceptar el trato y sarah lo notó y pisotearon las heridas de mi padre y a anthony lo comenzaron a ahorcar en sus miradas se notaba dolor -esta bien! acepto el trato! Pero... déjame despedirme de ellos es lo único que te pido- le pedí a sarah con mi rostro lloroso, ella parecía pensarlo -esta bien pero hazlo rapido- chasqueó los dedos y todos los soldados se alejaron de ellos, fui por mi padre -...no.. lo... hagas... elena- decía con ojos llorosos y una voz entrecortada lo abracé y el me abrazo a mi -por el bien de todos... y... el tuyo- le dije, soldados, estudiantes de mi padre lo cargaron y se lo llevaron una mano alzada suya estaba a mi dirección y sus lagrimas caían ala tierra. tome a anthony en mis brazos y el estaba llorando aún mas que mi padre -que es lo que pasa? un rey no puede llorar así- le dije ocultando mi dolor en una sonrisa, con dificultad me toma en la mejilla -no, no te vayas... tu eres... mi sol...- dijo con voz entrecortada y con su mano sostenía el collar que el me había regalado lo desabroche y lo puse en su otra mano - estúpida tenemos que irnos!- dijo sarah, pero antes de eso, besé a anthony en los labios, mi primer besó quité su mano de mi rostro -tal y como yo soy tu sol, tu eres mi luna de una noche tranquila y serena que tanto espere, solo espero volverte a ver algún día porque eh decidido que te he amado y te amaré que desde hoy me eh enamorado de tu alma y personalidad, dulce con todos, firme en momentos importantes, delicado, apasionado y aventurero- le dije y el estaba aún mas triste que se me partía el corazón en mil y un pedazos, poco a poco sentí el como los colores se iban. Los soldados al igual que mi padre se lo llevaron y en mis muñecas pusieron cadenas y a paso lento me llevaron a ese palaquin oculto en las sombras sarah se arrodillo frente a las escaleras del palaquin -buen trabajo chiquilla, puedes retirarte- se oía una voz y un hombre en bata, canoso y castaño y un poco gordo tomaba vino de una copa -ahora desaste de esa armadura sucia y entra querida en cuanto lleguemos a clinthar comenzará el juego...- 



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En el texto hay: guerra, humor y romance

Editado: 30.07.2019

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