Y le dije: te quiero, pero a ella la quiero más
él irónico comentó, ¿de verdad?
entonces le pregunté.
¿cómo no hacerlo?
¿cómo no quererla, si siempre está conmigo?
¿cómo no quererla, si sé que nunca me fallará?
¿cómo no quererla, si me impulsa a hacer las cosas,
aún sabiendo que tendrá que luchar con mi mente, con mis miedos,
y contra ella misma para que yo las haga?
¿cómo no quererla,
si es quién me dice, tú puedes, creo en ti,
estoy contigo en esto, nada nos detendrá?
No tengo una razón, para no cuidarla,
para no amarla,
y aunque aveces hasta busco cualquier excusa para odiarla,
no puedo,
no puedo porque dependo de ella,
porque sin ella no soy nada,
porque es quién me anima cada mañana.
Ella es quién seca mi llanto cuando nadie lo hace,
quien me escucha aunque le diga cosas sin sentido,
quien si llego a una meta celebra conmigo,
y si acaso fallara en el camino,
me dice, vamos de nuevo,
porque aún no nos hemos rendido.
Dime tú entonces,
porque yo aún no he encontrado,
una sola razón, para no mirar al espejo,
y decirme
'Te Amo'