Misterioso enigma distante,
precioso y al rojo vivo cual metal ardiente,
no puedo llegar a tocarte
ya que desconocido me eres.
Aunque eso no me impida el maravillarme,
fascinado y feliz me siento al verte,
desconocido pero fascinante
cual película emocionante,
no logro dejar de detallarte
puesto que muy hermoso tu eres.
Tu sonrisa celestial y hermosa,
tu cabello rojizo al reflejarse con el fuego mayor,
tu dulce voz tan callada...
Tan solo con ser tan lejano y talentoso,
logras con tan solo una mirada
hacerme caer enfermo de encanto.
¡Grito, grito, y grito!
¡Canto, canto, y canto!
¡Hablo, hablo, y hablo!
De alguna forma mi ciega voz
llegará hacia ti sin explicación,
contando sabiamente los pasos Para llegar al esperado destino.
Aunque los días pasen rápidamente, uno tras otro tan fugazmente, no me atrevo a olvidarte ni de ti ni de lo precioso que eres, y sin permitirme temer, llegar a conocerte.
¡Para mi, tu eres el más precioso enigma que deseo atreverme a conocer!