Nada

Almorzaron todos juntos, no pudieron explicarle a los niños la situación en ese momento, Lucia debía volver a la sección de fotos, esperarían hasta la noche para conversar con ellos más adecuadamente para explicarle porque él había estado lejos antes.

─Antes de irte quiero preguntarte algo ─ le comentó él acompañaba a la entrada del hotel donde un auto ya la esperaba.

─Solo Eros y Ares, ellos son los únicos hombres que han estado en vida estos últimos años ─ contestó sabiendo cual era la pregunta que iba a hacer ─ a diferencia de ti que estuviste con Milena todo esté tiempo ─ comentó molesta.

─Me dijeron que era mi pareja, no sabía que me mentían ─ se defendió.

─Se que es así, pero no deja de ser molesto para mi ─ dijo ella, dándole un beso en la mejilla para después irse.

─Señor tengo información del abogado ─ le dijo Alonzo.

─Habla ─ le pidió caminando de regreso con los niños.

─Los papeles que la señora firmó no son válidos, todo fue una artimaña para que ella pensara que ya no estaban juntos ─ le contó.

─Entonces, ¿no estamos divorciados? ─ preguntó, era lo único que le interesaba.

─Si lo están, después de un año él abogado se encargó en separarlos con la excusa de que la señora lo abandonó, fingieron que la buscaron y demás, cómo no hubo respuesta por parte de ella, el divorsio salió vigente, ambos son libres ─ le dijo.

─De ninguna manera, contrata a más abogados, que anulen ese divorsio y que también arruinen la carrera de ese maldito, todo lo que hizo fue sin mi consentimiento ─ demandó él.

─Me pondré a eso enseguida señor ─ dijo Alonzo con seguridad para después retirarse y dejarlo solos con los niños y Anthea que ya fue informada de que él era él padre de los niños, pero aun así debía quedarse con los tres por lo que se pudiera necesitar.

─¿Será pareja de mamá? ─ le preguntó Ares cuando él se sentó con ellos.

─¿Les molestaría que saliera con su mamá? ─ le preguntó, ambos niños se miraron entre sí.

─Depende ─ dijeron ambos.

─¿De que? ─ pregunto confundido y divertido, de verdad sus hijos eran iguales a él.

─No te puedes quedar con mamá para ti solo, nosotros llegamos primero ─ dijeron ambos.

─No se supone que él señor llegó primero ─ dijo Anthea confundida, según lo que le habían explicado él era él esposo de Lucia y él padre de los niños.

─Nosotros llegamos primero ─ repitieron los niños.

─Es cierto ─ acepto Maximus ─ y no pienso quedarme solo con su madre, ustedes también me agradan, ¿yo les agrado? ─ los niños se miraron entre ellos, cómo si se hablaran telepáticamente.

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─También nos agrada ─ dijeron al mismo tiempo, Maximus sonrió ya que esa era una buena señal para él.

Por otro lado Lucía se la pasó un tanto distraída en él trabajó, tanto tiempo pensando que él había dejado de amarla, pero todo había sido causa de los engaños y mentiras de su familia, esas personas eran terribles y sabían que ellos la odiaban, pero no pensaron a tal extremo, pero también eso le hacía pensar que si habian sido capaz de eso, qué más no podían hacer.

Aún tenía demasiadas cosas que preguntarle a Maximus sobre lo que había pasado con él en los últimos años, cómo fue que de repente la recordó cuando antes no lo había hecho.

¿Fue por él golpe que tuvo en él avion?

Dejo de pensar en eso, debía concentrarse en él trabajo y después tendría tiempo para que ellos hablaran y estar con los niños, además ese era otro tema, cómo les explicaría a los niños que Maximus era su padre en realidad, qué les diría cuando ellos preguntaran dónde había estado antes, porque no los había visitado antes y quién sabe qué pregunta más se les ocurra.

─¿De verdad regresaste con tu ex? ─ le preguntó Cerriot, es quién había acompañado al hotel al mediodía.

─Es complicado ─ contestó ella guardando su equipo, ya habían terminado por ese día, continuarian al día siguiente con él siguiente set.

─Bueno, mientras más complicado es, no es peor para los niños ─ comentó él, no le agradaban los niños en realidad, solo los tomaba cómo excusa para acercarse a ella.

─ De cierto modo sí, pero son inteligentes y comprenderán, ya me tengo que ir, nos vemos mañana ─  dijo ella en despedida para ir a donde estaba él auto que le estaba esperando para volver al hotel.

Ahí fue recibida por muchos besos y abrazos por parte de sus hijos y ¿esposo?, aun no tenía claro si seguían casados todavía, después de muchos besos y abrazos ella fue a tomar un baño, cuando terminó cerraron todos juntos. Todo le parecía irreal aun, estaban todos juntos, felices cómo si siempre hubieran estado de esa manera.

─ ¿Qué te preocupa? ─  le preguntó Max abrazándola por la espalda y besando su cuello, acababa de acostar a los gemelos.

─ Despertar de esté hermoso sueño ─  dijo al mismo tiempo que giraba rodeando su cuello con sus brazos.

─ No despertarás ─  le aseguró él ─  porque no es un sueño es real estamos juntos otra vez, nadie nos va a separar ─ 

─ Eso mismo pensábamos la primera vez y nos separaron Max ─  le recordó ella.

─ Nos tomaron con la guardia baja, pero ya me estoy encargando de que no pase de nuevo confía en mí ─  le pidió. 

─ Siempre he confiado en ti Max ─  le dijo ella con seguridad. El sonrió encantado con sus palabras.

─ ¿ Los niños duermen toda la noche? ─   preguntó con interés.

─Si, ¿por que? ─ preguntó ella con interés, él sonrió de manera perfecta, justo cómo a ella le gustaba.

─Porque han pasado casi cinco años desde la última vez que le hice él amor a mi esposa y no quiero perder ni un solo segunda más ─ dijo él

─Yo no pienso impedirtelo…..

*****

Después de una extenuante y apasionada noche dándoles a sus cuerpo él deseo y pasión que se les había arrebatado los últimos años, quedaron completamente cansados casi al amanecer abrazados uno junto al otro. Por suerte o por costumbre, Lucia siempre despertaba primero que sus hijos, lo que en ese momento fue bueno, porque si ellos se levantaban primero irían a buscarla y la encontraría junto a Maximus completamente desnudo, no sabía qué le diría si preguntaban.