Capitulo 11: Borracha

Adriana

¡¡Sabado!!. Antes me gustaban los sabados porque ese era el unico día en que mi madre se quedaba conmigo en casa. Pero ahora eso no va a pasar. Por lo tanto odio el sabado.

Ahora no voy a estar más con mi madre y la extraño, la extraño como mierda. Los ultimos días no la extrañe mucho que digamos porque estaba más concetrada en Alejandro, besandolo y además tratando de investigar que es lo que oculta.

Pero ahora he tomado una desición y es alejarme de él. Total, el mismo me confeso que solo queria sexo conmigo y yo no quiero eso.

Yo busco a alguien que me quiera de verdad y a veces pienso que eso es imposible, que nadie siente un amor verdadero por otra persona.

¡Amor verdadero!. Se supone que este amor no se finge, se siente con el corazón, con el alma, con el cuerpo, se siente con todo el ser. Pero Alejandro no siente eso por mì, él solo busca en mí una diversión.

Durante 16 años he visto como mi madre sufria demasiado por culpa de Gerardo. Recuerdo que cuando era chiquita ella lloraba mucho todas las noches, yo la miraba desde la puerta y la abria solo un poco para que ella no me viera.

Siempre lloraba viendo dos fotos, en una estaban sus padres y en la otra estaba Gerardo. Creo que el fue el único hombre al que amo verdaderamente. Pero Gerardo no la amo de la misma manera. Él solo la vio como un me gusta tal vez, y eso no es amor verdadero.

Ayer le dije a Gerardo que tiene que ir el Lunes a hablar con la maestra y el acepto. Dijo que iria sin ningún problema. Tambien me pregunto porque lo habian mandado a llamar y yo me limite a contestarle que vaya y aya lo averiguaria.

Miro la ventana de mi habitación que me lleva hasta la calle y me doy cuenta de que ya esta apunto de esconderse el sol por completo. Lo que significa que ya va anochecer.

Gonzalo dijo que vendría a verme a eso de las 7 de la noche para ir a la fiesta de su primo. Su primo a organizado una fiesta porque quiere festejar su nuevo noviazgo. Según Gonzalo, así es su primo. Un día hace una gran fiesta para festejar y al siguiente termina su relación. Me comento tambien que sus relaciones solo duran como maximo un mes. Y al siguiente se consigue otra novia.

Mas bien pareciera que este chico no sabe tener una relación estable o quizas todas sus novias solo lo atraen y no las conoce bien y por eso terminan. Pero en fin, es su problema despues de todo.

Dejo de darle vuelta a mi cabeza y me decido por darme una ducha para luego alistarme.

Salgo del baño y me encuentro con Roberta esperandome sentada en mi cama.

-Adriana tienes que vestirte rapido, ese chico que te ha invitado a salir ya te esta esperando-Anuncia y siento que mi cabeza se enrolla.

No se que ponerme realmente y aún no estoy para nada lista.

-¡Mierda!-exclamo-No sé que ponerme.

-Yo si sé-Dice sonriendo-Tu papá le ha comprado vestidos y ahorita me los acaba de dar. Tal vez puedes ponerte unos de esos.

Se dirige a mi armario y saca como 3 vestidos completamente diferentes a mi estilo. El primer vestido es rojo pegado hasta la cintura y suelto tapando casi todos mis muslos. El segundo es azul electrico, pegado todo el cuerpo, las mangas son de encajes pegadas y lleva encaje en la parte del estomago. Y el tercer deja poco a la imaginación. Es corto, de color negro, muy pegado al cuerpo, este no lleva encaje, pero tiene una "U" en la parte de la espalda, lo cual dejaria toda mi espalda descubierta y las mangas son un poco mas adelante de el antebrazo y mantiene unas cuantas rayas doradas en el filo de la falda y en la "U" de la espalda.

-Yo te recomiendo que te pongas el negro-Comenta y yo niego reiteradas veces.

-No, esta muy descubierto-Me escuso y ella sonrie maliciosa.

-Esa es la idea, para que ese chico se enamore más de tí.

-Lo que menos quiere es que se enamore de mí-Recalco.

-Ya bueno. Andale, pontelo-Me extiende el vestido y algo dentro de mí me dice que debo de ponermelo.

Le doy vuelta a la cabeza reiteradas veces hasta que me decido y lo tomo. Roberta sonrie complacida.

-Perfecto, voy a decirle que te espere un momento-Comenta y sin más, sale de mi habitación.

Me dedico a secar mi cabello con la secadora lo más rapido que puedo. Luego me coloco el vestido y dejo mi cabello suelto, sencillamente no me da tiempo para peinarme o algo por estilo. Y como yo no me maquillo, solo me coloco unos zapatos negros altos y salgo de mi habitación.

Cuando voy bajando las escaleras, noto la manera en que me mira Gonzalo, esta completamente atontado ante mi belleza y cuerpo, yo solo me limito a sonreir.

-La espera valio la pena-Comenta sonriente como siempre.

-Bien, ya vamos antes de que arrepienta-Bromeo y reimos antes de subirnos a su auto.

El podra estudiar en un colegio público, pero eso es porque sus padres así lo decidieron. Ellos querian que su hijo aprenda lo que es la humildad. Por eso desde pequeño lo pusieron en colegios públicos. Pero en sí, sus padres tienen plata como cancha.

No hablamos nada en el camino rumbo a la fiesta. Por lo poco que sé, la fiesta será en la casa de su primo y ahí nos dirigimos.

Cuando llegamos el me abre la puerta como todo un cabellero y se lo agradezco con una sonrisa.

Caminamos hacia adentro, la casa es lujosa, y más grande que la de Gerardo. Pasamos por la sala, hasta escontrar una puerta que lleva al jardín, y veo a un montón de personas.

Muchos chicos y chicas, por lo que noto que la fiesta es grande. Y agradezco que Roberta haya insistido en que me ponga este vestido, sino me sentiria como pez en la tierra, ya que todas las chicas estan con vestidos cortos y pegados al cuerpo.

Gonzalo me coge de la mano y me lleva junto a un grupo de chicos. Son 4 personas, dos chicas y un chico, uno de los chicos es moreno y simpatico, el otro es pelirrojo y de ojos miel, una de las chicas tiene cabello castaño y ojos azules, mientras la otra tiene ojos marrones y es rubia.