SKYE🌻
Salí de bar casi sin aire, comencé a tener recuerdos borrosos de esa fiesta. Primero cuando lo vi entrar, luego en el jardín de atrás, y finalmente en ese juego estúpido donde lo besé…
—Estas muy rara —dice Marcus a mi lado.
—No es eso, solo que el alcohol me ha sentado mal.
—Entonces, ¿te llevo a la residencia?
—Sí, por favor.
Él va por su auto mientras espero afuera del bar. Maldito alcohol que me hace hacer cosas estúpidas, pero solo sería una conciencia ¿verdad? Solo ruego no encontrarme con el en la universidad o en otros lugares.
Escucho a Marcus llamarme y subo al auto. Busco mi móvil y le escribo a Madison, aunque pensándolo bien, si le digo tal vez ella si se acuerde de él, y querrá que lo vea, así que mejor no digo nada. Espero que todavía no este en la residencia, porque soy muy mala para mentir y más a ella.
En el trascurso a la residencia, Marcus me hablo de él, los planes que tenia y muchas cosas personales, comencé a recordar cuando Madison me dijo que yo le interesaba a Marcus, ¿en verdad le estaba gustando a mi crush? Él es muy guapo, no sé por qué se fijo en mi de la nada, así que iba a salir para hacerle el favor a Madison.
Cuando llegamos a la residencia, el se estaciono y apago el auto, tenía una sensación rara de todo esto, pero desde que me acorde del guitarrista, todo se fue por a la borda.
—¿Skye? —me llama Marcus
—Eh, si dime.
En toda esta cita me la he pasado distraída en todo momento, espero que esto no haya afectado las cosas más adelante.
—Ya es un poco tarde, te llamare mañana ¿sí?
—Si, está bien.
Pero antes de abrir la puerta del auto, el se acerca hasta mi dejando un beso en mi mejilla, esto me hace sonroja un poco y bajo del auto. Mientras subo las escaleras, voy sacando las llaves de mi bolsillo y veo a Madison sentada en la puerta de nuestro piso.
—¿Madison? —pregunte y ella se levanto y fue hasta mí.
—Skye, no sabes lo mucho que he esperado. Perdí mis llaves y te iba a llamar, pero no quería arruinar tu cita.
—No te preocupes, me fue… bien.
—Mmm, espera —me detiene antes de entrar —Yo conozco esa pausa en tu voz.
Mierda, mierda, mierda. No quiero hablar de este guitarrista y menos a ella.
—Estas exagerando Madison, no es nada. —dije tragando grueso.
Abrí la puerta y fui directo a mi habitación, escuche los pasos apresurados de Madison hasta mí, se lanzó a mi cama y me miro.
—Algo paso, ¿cierto?
—No es nada —dije y oculté mi mirada.
Las ganas de decirle todo, de que el mismo chico que bese en esa fiesta estaba ahí en ese escenario, tan… tan…
—Skye…
—Vi al chico con el que me bese, en ese mismo lugar donde yo estaba —lo dije rápidamente para que ella no me entendiera.
Al ver la cada de Madison que cambio drásticamente, fui corriendo al baño y me encerré. Sabia que iba a empezar su interrogatorio, pero es que no quería hablar mas de tema, a fin y al cabo no iba a volver a ver este chico.
—Skye, abre la maldita puerta —golpea detrás de mí, y cierro el baño con seguro —¡Como fuiste capaz de no decirme!
—Es que recién lo acabo de recordar.
—¿Cómo que recién te acabas de recordar? —pregunta dejando de golpear la puerta.
—Sí recién. Lo vi ahí y recuerdos borrosos aparecieron.
Abrí la puerta lentamente y la vi sentada en mi cama con las piernas cruzadas, mientras buscaba algo en su móvil.
Respire aliviada, tal vez se distrajo y no le tomo importancia de lo que dije, pero voltea su móvil y me lo enseña, es un video de ella, y al fondo se ve cuando yo salía por esa puerta al jardín y detrás de mi veía este chico.
—¿Es él? —pregunta
—Sí, es el.
—Lleva una chaqueta y es alto —dice mientras trata de recordarlo también.
Me siento a su costado y me echo hacia atrás hasta quedar recostada. No sé como iba a ser las cosas de hoy en adelante, no quería volver a cruzarme son el, tal vez este enojado luego de lo que hice, tal vez tiene novia, o tal vez no me reconoce también.
Madison se recuesta igual que yo y me dice:
—¿Sabes al menos su nombre? —pregunta dejando su móvil de lado.
Mirando el techo le respondí.
—No, ¿tu crees que me reconozca?
—No lo sé. ¿Estaba ebrio?
—Al parecer no —dije
—¿Hay algo más que te preocupa?
—Bueno, esto no es algo que me preocupa, si no que me da mucha vergüenza
—¿Qué es?
—Es que después de ese beso, quise vomitar luego de todo el alcohol que había bebido
Madison se comienza a reír fuertemente y me contagia su risa. Nos reímos juntas, porque en verdad, esto era algo que a ninguna de las dos nos había pasado.
—Que buena idea de espantar a los chicos, Skye. —dice mientras su risa todavía era fuerte.
—Es que, de verdad, me sentí mal luego de eso.
—¿Por haberlo besado o porque después vomitaste?
La mire seriamente y sabia que Madison no pararía de burlarse de esto.
—Esta bien, dejare de fastidiarte —dice y de levanta de la cama.
Ella sale de mi habitación y el silencio vuelve a reinar aquí. Voy hacia el baño a cepillarme los dientes y comienzo a recordar las cosas claramente mejor. El sabor de sus labios con el alcohol no sabia nada mal, la manera en la que su mano toco mi mejilla hizo que todos mis miedos desaparecieran y que mi corazón latiera rápidamente, creo que eso hizo que el alcohol se me subiera rápidamente.
Negue con la cabeza para olvidar todo eso, pero es imposible, todavía sentía el alcohol en mí.