UN DIA ¿NORMAL?

UN DIA ¿NORMAL? 

-Buenos días señorita - escucho en la puerta del dormitorio y me enrollo en mis cobijas para no escuchar que las tres mucamas están en mi pieza y sobre todo que en pocos segundos se hallara mi institutriz, estoy intentando dormir cuando el sonido estridente de mi alarma hace aparición junto con el portazo que indica el ingreso de mi institutriz dentro de mi habitación. 

-Levántate Josephine – grita 

-Por todos los santos nana - la llamo como me acostumbre desde que llegue a casa y me la presento mi abuelo unas horas después del funeral de mi papá - no estoy sorda ya te escuché entrar a mi cuarto – en lo que me siento en mi cama – mi nana nuevamente grita abre las cortinas y quita la almohada que cubre mi rostro  

-levántate o llegaras tarde de nuevo – enfatizó al quitarme las cobijas también  

-eso será bueno, que expulsen a la nieta del fundador y dueño del colegio – hablo con sarna  

-Levántate Josephine – grita – eres el colmo llevan solo seis días de clases y has llegado tarde  

-tengo un talento natural- hablo al momento que entro en la regadera con ella pisándome los talones, desde dentro escucho como entran a limpiar mi dormitorio cuando salgo encuentro sobre mi cama mi uniforme, una falda color negro que me llegara a la rodilla una blusa celeste con el mismo color, el abrigo que me llega al ruedo de la falda, un par de botines de tacón corrido negro a juego con la falda, termino de colocármelo, mi cabello es largo llega a mi cintura y hoy llevo suelto, me veo en el espejo dándome un repaso con el uniforme. 

Escucho la campana, tomo mis cosas, las llaves de mi bonito auto así como un par de lentes que debo utilizar en el sol porque mis ojos se irritan, llego al comedor y mi abuelo está sentado a la mesa leyendo el periódico y es mi nana quien me llama la atención porque solamente me quedan diez minutos para comer, lo primero que veo es mi plato de fruta que no se me antoja nada, lo otro es un vaso de cereal, el plato de mi abuelo tiene un rico trozo de tocino, huevos, no me mandaran desayuno sino almuerzo, mi abuelo no interviene en la discusión que tengo con nana hasta que baja el periódico y pronuncia. 

-Hoy te vas conmigo – estoy por decir algo cuando me ve, en sus ojos un destello amarillo siempre me ha dado duda el motivo, pero también sé que es una advertencia, no puedo decir nada, me como el desayuno sin demora, termino todo el desayuno. 

-apresúrate que yo no puedo llegar tarde, tengo asuntos importantes que atender – subo rápido a asearme a la habitación, bajo directo al parqueo despidiéndome a gritos de nana, para que sepa que hoy salí a tiempo para el colegio hoy. 

Al salo salir de la casa recibo en el trayecto al Colegio Lupin un par de recomendaciones y sobre que me quiere en su oficina a una hora específica, asiento con la cabeza, bajo del auto cuando ya se está estacionado, en el parqueo busco con la vista a mis amigas y llego a mi casillero  sin encontrarlas, guardo todo y saco lo que necesito, en el pasillo aparecen Devon un compañero es muy guapo todas quieren con él solo que el esta apartado por la popular de la escuela ella e cree la más guapa de la escuela, Yasmin, no es de mi agrado ni yo la de ella, camino por el pasillo, solamente saludando a uno que otro pero justo me arrepiento por no haberme quedado charlando con cualquiera cuando veo a Simón que viene a mi e encuentro, detrás del viene mi amor platónico, pero no me hace caso, me trata como su hermana pequeña me lleva dos años, Diego me saluda y me regala una caricia en mi cabeza despeinándome y yo babeo de la emoción, llegan mis amigas Lucí y Sindi todas estamos en el segundo año en la academia Lupin llevo unos cursos sola por la tarde martes y jueves el resto de los días, solamente los estudio por la mañana, hasta las tres y los otros días tipo siete salgo.,  

Recibo cursos como tiro con arco, esgrima, artes marciales, algo de botánica y un curso de historia y mitología los de mis amigas son iguales no sé porque estamos separadas solo que aquí por las tardes están los grupos de alfas, betas, omegas y uno de teta, es donde yo estoy mis amigas son betas, es una clasificación que te dan al entrar al colegio las clases son aburridísimas hasta el final, se escuchan murmullos por los pasillos de la llegada de alguien importante todas las mujeres se arreglan incluida la novia de Devon, parece que siempre se prefiere a otro, porque todos en el almuerzo comentan lo mismo. 

Nos sentamos a la mesa ellas con sus bandejas yo con la comida que me mandaron de la casa, nos disponemos a comer, en el comedor los murmullos y los cuchicheos me distraen de mi comida no fue mi mejor idea porque en menos de lo que puedo reaccionar 

-Oye – me quejo porque Zóe ha tomado con su tenedor mi trozo de carne – es lo único que me han enviado en la comida de hoy – le digo a modo de súplica – sabes que odio la verdura per Andrea me hace comerla  

-lo sé - y se lo mete a la boca y le da un mordisco que quita la mitad de mi porción de carne para mi almuerzo – y sabe delicioso – agrega  

-deténganse nos grita -Lucí - solo que no lo hacemos 

-es lo mismo todos los almuerzos - refunfuña Sindi – debería de ser más fácil para ti Zóe quitarle su comida – la motiva mi amiga y yo solo le gruño - porque es sencillo para Zoe – dice a todas – quitarnos la comida, pero a Josh no se te hace sencillo 

Antes de que se lo termine me lanzo hacia ella haciendo que caigamos las dos al suelo en el forcejeo la carne cae al suelo, Sasha y Lys rompen en carcajadas en lo que las dos vemos el trozo de carne en el suelo. 

-No te quejes – habla viendo la comida esparcida por toda la mesa – tirase toda la comida, yo también pasare hambre toda la tarde  

-tú tomaste mi comida – me pongo de pie y tomo mi mochila – ayúdame a limpiar