Princesa Blanca

¡HOMBRES LOBOS?

 

Salgo de la oficina dejando lo encerrado dentro de ella, lo que menos quiero es que se entrometa en la mi fiesta es por la bienvenida a Fabian, me acerco a la pista y bailo, a ninguna de mis amigas les gusta ninguno de los del colegio por mi parte me gusta Diego con el que baile hace rato, me sobresalto mucho como Diago quería arrancarle la cabeza.

Me acerco a mis amigas y bailamos juntas todas vamos por algo de beber, el festejado esta muy entretenido con una compañera que se comen a besos los dos, solo sonrió por el porque me había contado que ninguna mujer le había interesado y que seguramente no le interesaría ninguna ahora resulta que se la come a besos mi amigo es una contradicción.

Alguien me llama a la puerta porque me buscan al llegar no conozco al tipo que esta frente a mi , pregunta por otra persona, le digo que se encuentra en lugar equivocado, después de eso regreso a bailar con mis amigas, mi bebida no se ha despegado de mi,  comenzamos a bailar, bebo el contenido de mi vaso pero sabe diferente, no le presto atención simplemente bebo otro poco pero cunado doy el segundo trago siento algo en mi estomago, me doblo del dolor, subo a mi habitación y gracias al cielo me da oportunidad de llegar al baño porque todo lo que he comido en esta noche es expulsado, como no regreso pronto mis amigas suben y me encuentran vomitando, hacen preguntas que no puedo contestar, cuando termino, les respondo.

Comí de todo lo que hay en la fiesta, y bebi todo lo que hay en existencia en la barra, me quedo don Lys en lo que ellas salen, no puedo terminar de devolver el estomago, me duele de tanto expulsar liquido de mi panza.

Lys me ayuda a que beba algo de agua pero no para en mi estomago, siento calor, mucho calor y mis entrañas arden así que el agua que llega es bienvenido pero no son retenidas. Siento que mi cuerpo se congela, escucho voces, pero no soy capaz de procesarlas porque me siento débil mi cabeza duele, arde, quema he dejado de vomitar y veo a Wolf a mi par, lo alejo, pero no puedo, no tengo fuerzas, soy colocada en mi cama, siento como mi cuerpo arde por dentro, es fuego que recorre mi cuerpo quiero quitarme la manta que me cubre pero no puedo, no tengo control de mi cuerpo.

Siento que mueven mi cuerpo, también que me quitan la ropa, bebo algo amargo, sabe tan mal que no quiero beberlo, pero soy forzada a beberlo, no sé cuánto bebo, pero luego de eso no hay nada solo negro solo oscuro.

Busco en la oscuridad algo que ver, algo que me ayude a saber dónde me encuentro, es energía desperdiciada, siento pesadez después de un tiempo largo, veo unos ojos rojos, trato de llegar a ellos, pero no puedo, intento otra vez, pero nada, los dejo de ver, luego de un rato de desesperación Damián está a mi lado y me puedo recostar en él, todo es oscuro así que lo hago a tientas, lo único que resalta en la negrura son sus ojos rojos.

En la oscuridad siento como Damián se aleja de mi y me sobresalto, grito, lo llamo, pero no lo encuentro, lucho por salir de la oscuridad después de mucho esfuerzo me encuentro sobre mi cama viendo de un lado buscando a Damián

-¿Dónde está, donde esta Damián?

-¿Quién es Damián Josh? – pregunta Andrea y sin miramientos le respondo luego reacciono que nunca debí de hablar del lobo que veo en las noches, pero no me interesa quiero saber que está bien, quiero saber que no le ha sucedido nada, porque siento su dolor, mi pecho duele pero no es mío, ese dolor proviene de otro lado, una mano toca la mía haciendo que el dolor desaparezca, veo los ojos de Diago y por alguna extraña razón siento calma, siento que todo está bien con Damián.

-Josh es mejor que te calmes, tu abuelo llegara pronto y tiene que habla contigo – avisa Andrea, preocupación llega a mí y solo suspiro, salgo de la cama con dirección al baño para poder estar preparada cuando llegue mi abuelo, el primer paso me ayuda porque mis rodillas, no caigo al suelo, soy detenida por Wolf quien parece muy preocupado, agradezco su ayuda con una sonrisa, regreso a la cama esperando a que Andrea me ayude.

Con su ayuda voy a la ducha, realizo toda la actividad, pero no me siento fuerte para bajar las gradas, así que soy regresada a la cama para recuperarme del todo, en algún momento me quedo dormida, despierto veo el reloj y son las tres de la tarde tengo hambre intento ponerme de pie, no llego ni siquiera a quitarme la cobija porque soy detenida por mi abuelo quien me ve con preocupación.

-no te muevas – lo abrazo fuerte, gracias a eso me siento segura – todo esta bien, no dejare que nada te pase

-Perdón, no me di cuenta en que momento me enferme – le digo y lloro sin control

-Tranquila mi niña que todo esta bien – se aleja de mi y me ve – debemos hablar – niego con la cabeza, es lo que menos quiero hacer – debes saber algunas cosas que no te he dicho porque creí que nunca iban a ser necesarias – lo veo de manera extraña – Josh tienes que esta tranquila – le hago un gesto a mi abuelo que dice, “enserio me pides eso cuando sabes que lo detesto” – te lo pido porque no me debes interrumpir – habla esperando una respuesta, asiento con la cabeza – hace muchos años – yo lo veo mal porque no me gustan las  cosas contadas como historia – lo hare no tan lejano entonces – lo agradezco y mi abuelo ríe

-En el mundo hay mas que solo humanos – dice como si fuera novedad – mira debes entender que en el mundo hay humanos, hombres lobos, vampiros, cazadores, brujas, hadas y otros animales cambia forma en los que entran los hombres lobos – intento abrir la boca pero mi abuelo hace una señal para que me detenga, de mala gana lo hago – todos esos que te he mencionado tienen la apariencia humana, todos son seres comunes ante los ojos del mundo, nuestro mundo no es conocido, solo unos pocos lo conocen y por ellos somos perseguidos ellos son los cazadores – me froto la cabeza porque esto parece un libro o una película.




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