—Buenos días hija — mi padre se apresura en besarme la mejilla cuando ya estoy en la cocina.
—Hola pa — respondo su saludo con una sonrisa en mis labios.
— ¿Hermanita, cómo has dormido esta noche? — el destello que cruza su mirada cuando hace la pregunta, me demuestra que no se encuentra para nada feliz.
Levantó una de mis cejas sin comprender a que se debe la pregunta.
—Ya sabe que has pasado la noche con Rhys — susurra Marta en mi oído.
—Muy bien, gracias por preocuparte — le guiño un ojo, sé que se va a molestar más aún.
—Si... me lo imagino — gruñe y pone sus ojos en blanco.
Mi padre nos observa sin comprender que es lo que está pasando.
— ¿Ocurre algo entre ustedes dos? — pregunta al fin, giro mi cabeza para verlo, de reojo puedo ver como Coel hace lo mismo.
—No, nada — respondemos a coro sin darnos cuenta.
— ¡Buenos días hermosa y preciosa familia! — la sonrisa que se expande en el rostro de mi tío, me da a entender que está de muy buen humor.
— ¿A qué se debe tanta felicidad? — Axlin levanta una de sus cejas y sonríe con burla.
— ¿Acaso tiene que haber pasado algo para que me levanté de buen humor? — se deja caer en uno de los asientos.
— ¡Claro! — gritamos todos a coro.
—Vamos tío, cuéntanos — pestañeo varias veces igual que una niña pequeña.
—No diré absolutamente nada — ríe mientras niega con la cabeza.
Todos dejamos que un suspiro se escape de nuestros labios de forma cabreada.
—Si no ibas a decir nada y solo nos dejarías con la duda, mejor te hubieras quedado callado — bufa mi padre mientras rueda sus ojos.
Ignoramos completamente a mi tío y seguimos comiendo lentamente. Luke llega junto a Dana tomados de la mano.
—Hola... — saludan ambos, nosotros se lo devolvemos —. Erin, señor — Luke nos observa a mí y a mi padre — les tengo una excelente noticia.
— ¿Así, cuál? — puedo asegurar que mi mirada demuestra curiosidad plena.
—Necesito que ambos me acompañen — sonríe, se le ve animado — no se los puedo mostrar aquí — me levanto rápidamente de mi asiento al igual que lo hace mi padre.
Axlin se levanta del de ella y avisa que tiene que ir a hacer unas cosas. Luke se aleja de nosotros y rápidamente lo comenzamos a seguir, Dana se ha quedado con los chicos comiendo.
—Buenos días princesa Erin — Ian me regala una gran sonrisa, como todas las mañanas que nos encontramos.
—Buenos días pequeño — me agacho para besarle la frente.
— ¿No desayunar con nosotros? — la mirada que me da, deja al descubierto lo preocupado que se encuentra.
—He comido un poco hace rato y ahora tengo cosas que hacer — hago una mueca de desagrado, él solo ríe — pero para el almuerzo seguro estoy aquí.
Me despido de Ian para seguir caminando detrás de mi padre y de Luke.
Luke sale de casa, tomo un abrigo más grande que yo y salgo corriendo detrás de ellos. No quiero estar afuera, todos sabrán que ando con la regla. Los dos van caminando hacia la cabaña grande. Quiero preguntar a donde vamos, pero prefiero en guardar silencio.
Ya dentro, caminamos hacia la oficina. De camino pasó a saludar a muchos de los miembros de mi manada. Dentro de la oficina se encuentra Axlin sonriendo con emoción.
— ¿Qué está pasando aquí? — la voz de mi padre se nota cabreada, él enserio está molesto.
—Como ha dicho Luke, les tenemos una excelente noticia — Axlin sonríe con emoción, al igual que lo hace el nombrado.
—Hemos encontrado la forma de que ustedes — nos mira a ambos — puedan ver a la su madre y esposa.
Me quedo helada en mi puesto, no se qué decir o hacer, las palabras de Luke se repiten en mi mente como un disco rayado... ¿Enserio voy a poder ver a mi madre?
—Con mi magia... — levanto la mirada hasta hallar la de Axlin — podemos verla en este preciso momento.
—Pero... ¿Me están hablando enserio? ¿Cómo es eso posible? — logro hablar de forma torpe, aún me encuentro sorprendida.
—Haremos lo mismo que ha hecho la bruja que le ha permitido a tu padre verte — lo señala — no es tan difícil como me lo había imaginado.