×Capitulo veinticinco

Pov's Caleb:

Hoy es el gran día. Por fin hoy tendré mi cita con Maia, y sinceramente estoy muy nervioso no quiero volver a cagarla con ella. La rubia loca me gusta de verdad, pero no tengo ideas de que hacer para tener nuestra cita perfecta. Le preguntare a mi madre a ver si ella puede ayudarme.

Voy hacia la cocina y la encuentro enfrascada en unos papeles que supongo serán del trabajo. —Hola mamita hermosa —Digo con tono dulce

—Caleb no tengo dinero. —Dice sin mirarme, ok no me esperaba eso.

—Como me conoces, pero esta vez no necesito dinero es otra cosa

—¿Qué has hecho esta vez? —dice mirándome de forma seria.

—Mama por dios deja de decir estupideces y escúchame

—ok ok habla de una vez así continúo trabajando.

—Necesito que me ayudes a idear una cita perfecta para esta noche.

—¿Quién tendrá una cita esta noche?

—Una chica y yo —me encojo de hombros tratando de no darle gran importancia. Se que cuando le diga que es Maia comenzara a chillar de felicidad.

—¿Que ocurre aquí? ¿Desde cuándo necesitas mi ayuda? Siempre haces el mismo plan.

—Es que esta vez quiero ir en serio, de verdad me importa y no quiero cagar.

—Nunca imagine verte así mi niño —dice sin creerlo — ¿y quién es la afortunada que robó el corazón de mi bebé? —Dice mi madre apretando mis mejillas.

—Mamá ya no soy un bebe —digo rodando los ojos.

—siempre serás mi bebe Caleb y ahora déjate de misterios y dime quien es la chica afortunada.

—Si te lo digo ¿prometes no gritas? —Ella asiente efusivamente —Es Maia.

—¿Maia? ¿La chica encantadora que cuido de las niñas cuando vos te fuiste anda a saber dónde? —yo asiento —Si lo sabía —dijo alargando la i y festejando yo solo ruedo los ojos.

—no me ruedes los ojos a mi jovencito. —dice fulminándome con la mirada —te ayudare, esa niña me cae muy bien.

—Gracias eres la mejor del mundo. —digo abrazándola y dándole besos en su mejilla.

—ya suéltame, no me dejas respirar Caleb —dice apartándome —Manos a la obra bebé de mamá.

Y así nos pasamos toda la tarde planeando y arreglando todo para que sea sumamente perfecto. Espero que a Maia le guste, nunca me preocupe tanto en que a una chica le agrade la cita, siempre fue invitarlas a "ver" una película a mi casa y terminar teniendo un buen polvo en la parte trasera de mi auto, pero nunca una cita real quiero que a ella le guste y la pasé bien conmigo, no quiero que termine en un simple polvo.

Pov's Maia:

—Maia baja las chicas están aquí. —escucho gritar a mi madre desde la planta baja.

Agarro mi celular, mi buzo y me dispongo a ir hacia la sala donde se encuentran las chicas. —Hola bellezas —Digo entrando a la sala.

—Hola rubia —dicen las tres

—Es hora de irnos de compras, para la gran cita —Dice Fayna dando pequeños saltos y aplausos.

—¿Cita? ¿Con quién se puede saber mi pequeña? —Dice mi mamá, ay no mierda no quería que lo sepa.

—Su pequeña tendrá una cita con Caleb—Dice en tono burlón Leila mientras sube y baja las cejas.

—¿Cuándo pensabas decírmelo? —Dice en forma pícara mi madre.

—Déjenme las cuatro, solo es una simple cita vámonos ya. Antes que me arrepienta —Todas se rieron y asintieron.

Nos subimos todas a mi auto y fuimos rumbo al centro comercial al ritmo de Jonas Blue - Rise ft. Jack & Jack.
toda nuestra tarde se la baso en estar de tienda en tienda buscando el vestido perfecto

—¿Qué te Parece este? —Dice Fayna, yo niego con la cabeza, ni loca me pondría un vestido rosa neón.

Seguimos buscando hasta que encontré el outfit perfecto para esta noche, estaba muy feliz ya que era algo básico, cómodo y muy bonito, espero que a Caleb le guste. Al finalizar con todas las compras, volvimos todas a mi casa porque ellas me ayudarían a prepararme. Entramos a mi habitación y yo me dirijo hacia el baño, me doy una relajante ducha y salgo.

—Chicas termine ¿ahora qué sigue?

—Maquillaje y peinado —Dice Tray moviendo sus cejas de arriba a abajo.

—Por favor no hagan algo exagerado saben que odio sentir la cara pesada de tanto maquillaje

—Tranquila deja todo en nuestras manos.

—Está bien —digo poco convencida.

Tracy comienza a maquillarme, se decidió por una sombra de ojos clara, delineador, rímel y un labial rosa pálido.
Del peinado se ocupó Leila, este consistió en mi cabello suelto con algunas ondas.

—Listo, estás hermosa es hora de que te cambies y listo a esperar a que llegue tu romeo tatuado. —Dice Tray

—Wow esa soy yo —Miro el espejo sin creerlo.

—Si esa eres tú tonta —Dice Fayna. —Bueno nosotras nos iremos, buena suerte y cuéntanos como fue todo. —Dice Fay, les doy un abrazo a cada una y se van.