Pov's Caleb:
Ha pasado un año ya desde que llegamos a Argentina a rehacer nuestra vida lejos de las mierdas de Dylan.
Unos días después de la llegada de mi padre y el de Maia nos enteramos lo ocurrido en la casa Cook, en la cual murió Dylan junto a todos sus hombres, no sabíamos quien lo había hecho, pero le agradecía profundamente. Ese maldito no merecía seguir trayendo mierda a esta vida.
Respecto a nuestros padres, mi padre y mi madre, volvieron a estar juntos luego de que mi padre se esforzara en la relación, mi madre decidió perdonarlo y volver a estar juntos, Lía y Cielo lo quieren demasiado hasta ya le dicen papá, aunque saben muy bien que no lo es, son felices.
Los padres de Maia, siguen igual de enamorados que el primer día, decidieron volverse a casar y Mai está esperando un hermanito que en cualquier momento llega a nuestras vidas, creo que nadie se esperaba cuando Clarisa nos dio la noticia pensamos que era una broma, estamos muy felices por todo lo que está ocurriendo.
En cuanto a Maia y a mí, terminamos el instituto hace unos meses, decidimos dejar de lado nuestro pasado ilegal, e ir a la universidad. En cuanto a nosotros, soy el hombre más feliz del mundo No sé qué haría sin mí rubia loca. Pensar que cuando nos conocimos ella me odiaba y yo solo la quería para un simple polvo y ahora me tiene a sus pies, ella dice "Caleb salta" y yo soltó nada me importa más que ella y su felicidad.
Estoy muy nervioso hoy tengo algo que proponerle y sinceramente No sé qué respuesta me dará, pero si es negativa creo que moriré. Nunca estuve tan nervioso en mí vida, ni cuando corría en mí auto a la máxima velocidad. Pero bueno ya está todo listo solo queda esperar y su respuesta, que sea lo que Dios quiera.
Pov's Maia:
Hoy es mí aniversario con Caleb, hoy cumplimos un año y medio de relación, y soy la chica más feliz del planeta.
Caleb desapareció hoy temprano, cuando desperté ya no estaba a mí lado, solo se encontraba una nota en la cual explicaba todo lo que tendría que hacer hoy y dónde nos encontraríamos, junto a una rosa y un lindo conjunto que consistía de un lindo vestido negro sin mangas, ajustado en la cintura y amplio en la falda.
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Ya eran las siete de la tarde y en la nota decía que a las ocho y media vendría por mí, tenía una hora y media para prepararme, asique me dispuse a ir a darme una rápida ducha. Al salir me coloque el vestido que me dio Caleb junto a unos zapatos de color rojos, unos lindos accesorios, y mí linda pulsera con mi nombre grabado que me regaló Caleb en nuestro aniversario de seis meses.
Cuando terminé de cambiarme decidí seguir por mí cabello y el maquillaje el cual decidí, hice unas pequeñas ondas en él y un maquillaje leve con un labial Rojo oscuro.
Me mire en el espejo estaba perfecta, rocíe un poco de perfume y fui escaleras abajo porque ya eran ocho y veinticinco de la noche solo faltaban cinco minutos para que Caleb venga a buscarme.
Cuando se hizo la hora el timbre sonó, fui rápidamente y cuando la abrí me llevé una sorpresa, tras esta no estaba Caleb sino una linda Carroza la cual era empujada por dos hermosos caballos blancos.
—Buenas noches señorita, yo seré el encargado de llevarla hasta su destino, espero que disfrute de la hermosa vista de la ciudad —Dice un hombre mayor el cual no conozco y se ocupa de manejar a los caballos —Disculpe me olvidaba, esto es para usted —Dice para luego entregarme un enorme ramo de rosas rojas.
—Buenas noches y gracias —el asiente y emprendemos viaje hacia mi destino el cual no tenia ni idea de cuál era.
Luego de unos veinte minutos de viaje con una hermosa vista de la ciudad llegamos al pequeño bosque que se encontraba al costado del río donde tanto nos gustaba venir a Caleb y a mí a pasar el tiempo.
—Señorita hemos llegado a su destino —el hombre me ayuda a bajar —Siga el camino de velas y pétalos que en el final la espera una sorpresa.
Le hice caso y empecé a caminar por el camino que me dijo, el cual hacía que me adentré en el bosque, mientras iba caminando podía observar que en los árboles se encontraban fotos pegadas nuestras de todo este tiempo juntos, mientras las veía sonreía y reía, había algunas con caras chistosas nuestras, abrazados o besándonos, cada vez que veo un recuerdo en qué momento y situación fue.