Psycho Killer

Las cosas marchan bien o eso creía

─ Fue un momento lindo, pero ya me voy ─ dijo ella, recogiendo su ropa

─ Se supone que yo debo irme y dejarte sola

─ Campeón eso puedes hacer con esas chicas huecas de abajo ─ sonrió ─ yo soy diferente, me gusta ser la primera en todo. Siempre doy un paso hacia delante. Cuando digo lo quiero lo obtengo, no eres el único Alex.

Sin más se fue dejándome ahí prendido por segunda vez.

Ahora tendré que hacerme cargo de mi amigo.

Estaba recreación las escenas de hace un momento tan solo que la puerta de la habitación fue abierta, entonces entro un chico que ni siquiera vi muy bien su rostro.

─ Viejo si quieres tener una buena atención a tu amigo puedes ir abajo y buscar un agujero fácil.

─ Lárgate o no respondo

─ Tranquilo viejo solo decía ─. Elevo los hombros para luego fijarse en mi erección ─ vete antes que te arranque la cabeza.

El maldito se fue a puras carcajadas.

─ No se quedará así pequeña.

Salí de la habitación, descendí a la primera planta. Sin embargo, me topé con la señorita Rockstar.

─ Te vas a arrepentir por dejarme así ─, señale a mi erección.

Se zafó de mi agarre, me miro con una sonrisa siniestra, se giró sobre sus talones y se fue.

─ No me desafíes maldita zorra.

Me dirigí a la barra para tomar un vaso de ron, con mi gusto me fui directo a mi cabaña caminando. Llegue rápidamente tome la botella de whisky como si fuera que estaba con sed tome de la boquilla. El alcohol no me afectaba en mi sistema, estaba lucido, tenía mis cinco sentidos estables, pero quería satisfacerme más. Tome hasta la última gota de whisky.

─ Es hora de la cacería ─ susurré  

Al estilo de Sweet Dreams. Para esta noche casual usaré tenis de color negro, un pantalón negro una mezcla de elegancia, la campera negra con remera por debajo se ve muy bien. Esta combinación es simple, cómoda pero llamativa.

Me dirigí directamente hacia la cochera a sacar una de mis motos favoritas. Encendí la Harley al instante el motor empezó a sonar.

─ Me gusta ese sonido nena

La adrenalina recorrió en todo en mi sistema. Cada calle que recorrí no había mi diversión. Con mis esperanzas bajas me fui a un bar. Abrí la puerta que todas las miradas cayeron en mí.

─ Se les perdió algo idiotas.

Tome asiento a lado de la barra, con un movimiento de cabeza llame al barman.

─ Un whisky doble.

Tendió un vaso y lleno mi pedido tan solo tomé un poquito por qué sentí un empujón.

─ Lo siento.

Quería darle un golpe, entonces me quede quieto por las noticias.

Últimos minutos encontraron el cuerpo de una adolescente. El cuerpo ya hacía en el baño boca abajo con el rostro desfigurado. El hecho perpetrado fue en una fiesta de los Barclys. El hermano de la adolescente la encontró. Los policías están analizando las cámaras de seguridad.

En ese mismo momento presentaron el video donde el agresor le estaba sosteniéndola de los cabellos

─ Que me lleva el demonio, me ganaron en matarla ─ pensé.

─ Los testigos informaron que antes de su asesinato estuvo con el adolescente Alejandro Salinas. En estos momentos la policía está buscándolo.

En el momento más rápido publicaron mi foto.

Las personas a mi alrededor me miraron con terror y otros estaban con el teléfono en mano.

─ No se complican la vida, ahora iré a resolver este problema.

─ ¡La policía vienen en camino! ─ grito el barman

─ Okay. Los espero. Me puedes servir otro whisky doble ─. Asintió con miedo.

Unos minutos después

Los policías ingresaron con el rostro de “Vine por ti pendejo”

─ Buenas noches, oficiales pues aquí me tienen, si piensan que soy el primer sospechoso pues solo les contaré por qué estuve con ella ─ tomé un sorbo de whisky ─ no se imagina como la tenía a mi merced gritaba de placer quería más y yo se la di. Era el trasero más hermoso y redondo al final dijimos “Fue el mejor sexo de nuestras vidas” … Luego ella se fue dejándome solo. Si miraron todo el video de las grabaciones comprobaran que no estoy mintiendo.

En eso los policías estaban atónitos con mi relato, uno de ellos recibió una llamada. Con un susurro dijo algo al otro policía que ambos asintieron.

─ Nos acaba de informar y corroborar lo que usted dijo es verdad. Vámonos Keene.

Se giraron sobre su eje y se fueron. Con una sonrisa miré al barman.

─ No soy un asesino, ahora dame más whisky ─. Con la mirada agachada empezó a servir ─ Para todos hoy invito, pidan lo que quieran.

Mi tranquilidad duró poco porque recibí un mensaje misterioso.

Este es el comienzo, aunque estés tranquilo yo seguiré divirtiéndome con ellas. Gracias por enseñarme eres el mejor maestro del mundo.

Pensé que las cosas marchaban bien. Imbécil juró que te voy a encontrar es hora de mover mis fichas. Deje un fajo de billetes.

─ Con esto cubre los gastos.

El barman asintió, saque otro fajo de dinero.

─ Esto es para ti.

Sin esperar su respuesta, salí del bar. Nuevamente mi teléfono sonó.

─ ¿Dónde estás?

─ Por ahí

─ Alejandro tienes que venir en este momento

─ No ─ conteste de mala gana.

─ No me sacas de quicio, el inspector que tiene el caso de tu abuelo está aquí tiene una información importante.

─ ¿Qué información?

─ ¿Ahora si te interesa? ─. Se empezó a reír a carcajadas ─ tienes cinco minutos.

Finalizo la llamada

─ Estúpida Alice.



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Editado: 05.05.2021

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