Mamá pasó hablando todo el viaje de lo bien de la oportunidad del trabajo, yo tenía muchas ganas de decir toda la verdad pero pensar la pelea que se desataría.
Prefiero guardarlo hasta que sea el momento indicado.
La ciudad de Denver Colorado no se veía nada mal desde arriba todo se veía hermoso, pensé que darle una nueva oportunidad no era mala idea, tal vez esta vez no se me haría tan difícil conseguir unos amigos, hasta mi abuela tiene más amigos que yo.
El trabajo nos envió al centro de la ciudad, ósea no íbamos a estar en un pueblo pequeño y no se me iba a dificultar conseguir amigos.
Cuando llegué a casa lo primero que hice fue desempacar, ya que detesto el desorden, también debía de acostumbrarme al lugar.
Día siguiente
Se acercaba la entrada a clases, yo me ponía aún más nerviosa en cuanto iba a llegar el día, lo único que podía hacer era ser yo misma siempre, nunca me había resultado pero esta vez tenía esperanzas conocí a Jenny en mi escuela pasada, ella me habló primero si no lo hubiera hecho les aseguro que no tendría mejor amiga ahorita mismo.
El día siguiente era mi matrícula, ya tenía los documentos necesarios pero también debía hacer una prueba de admisión, tenía que hacer una demostración en alemán y español, también hacer el examen escrito.
Me puse una ropa bastante básica, maquillaje ligero y natural, mis zapatillas, desayuné cereal, llame a mamá para irnos ya.
Papá nos llevó, había una fila excesivamente grande, en lo que hacíamos la fila le mencione a mi madre lo del dinero, se notaba que mamá no sabía mentir, me dijo que no le dijera a mi padre
-No le diré a papá de esto, tú le dirás, no es justo que le hagas esto.
-no sabes porque realmente lo hice realmente...voy a intentar decirle después de salir de acá. Ahora tu concéntrate en tu demostración ¿sí?
-Bueno-comencé a releer mi resumen
Llegó mi turno, respiré de fondo e hice una pequeña actuación en alemán, espere unos 5 minutos y nos dirigimos a otra aula donde se encontraban los profesores de español esperé mi turno e hice mi presentación.
Pronto era el break de 15 minutos, me fui a realizar el examen escrito y nos agruparon, seguí a mi grupo y llegaba la hora de examen, tarde unos 35 minutos y esperé a que sonara la campana, entregue mi examen y salí del aula.
Parece que mamá no estaba afuera, me asusté un poco y luego recordé que era una chica de dieciséis en una ciudad que no conocía para nada, lo de la ciudad no era bueno pero tenía dieciséis no era tan malo...Revisé mi celular a ver si me había avisado para donde se iba...
En eso me tropecé con un chico, se me cayó todos los papeles, incluido mi celular, nos tocamos nuestras manos sin querer y nos vimos a los ojos con una gran conexión, ya saben era el típico empujón de película, en las películas siempre que pasa eso, las dos personas se aman por siempre, no sabía cómo reaccionar a "mi futuro amor concreto", si así le podría llamar, era ridículo,
-Lo siento en serio-dijo apenado
-Tranquilo, yo también no estaba poniendo atención
-Adiós...-dice al seguir mi mirada mientras caminaba
Tengo que admitir que ese chico estaba bellísimo, un chico muy alto, de tez blanca, su cabello castaño, ojos cafés con una mirada tan tierna y yo tan solo no entendía porque lo deje ir de esa manera tan estúpida.
Metí todo a mi mochila, no quería que me pasara algo parecido al incidente anterior, comencé a caminar hacia casa, y afortunadamente recordaba el camino perfecto.
Llegué, no se encontraba nadie en casa así que me dirigí directo a mi habitación, me quite las zapatillas y literalmente me hice tirada en la cama, voltee a ver hacia arriba y puse mis ojos en el cielo raso, comencé a recordar al chico de aquel instituto.
Comenzó a retomar un sonido que no reconocía, rápidamente me levante y provenía de mi mochila, era un celular con funda roja, pronto me di cuenta ¡¡¡ESTE NO ES MI CELULAR!!! Contesté de inmediato...
-¿Hola?
-Hola confundimos los celulares...
-Sí, me acabo de dar cuenta
-Chica me dejaste pensando en ti con esos bellos ojos y tu cabello tan alocado
-oh me halagas-digo ruborizada
-Ni siquiera sé tú nombre, saber que estabas en la Academia Valle del Colorado, te voy a ver por ahí todo el curso
-Me llamo Chiara y ¿tú?, si apruebo el examen probablemente ¡nos volveremos a ver!
-Yo me llamo Tyler, espero que pasas el examen para volverte a ver...
-También lo deseo, también te quiero ver
-¿Vamos a esperar hasta los resultados para intercambiar los celulares?
-No creo que sea buena idea esperar una semana-digo en un todo gracioso
-¿Te parece mañana?
-¿A qué hora?
-¿Puedes a las 2:00?
-En el kiosco del parque que está por la Academia
-Perfecto
-No puedo esperar...