La NASA aún no ha podido explicar el origen de los meteoritos rosados que impactaron a Tierra el mes pasado, en distintas regiones del mundo. Muchos sitios, en especial zonas pobladas, sufrieron daños materiales. Pero por el momento no se reportaron heridos por impacto del meteoro. A raíz de esto, muchas personas aseguraron que es la señal del fin de los tiempos. Los extremistas, incluso, señalan pasajes de la Biblia para demostrar la teoría del Apocalipsis, comparándolo con el meteorito. La Comunidad Científica, la ONU y el Vaticano han pedido que todos mantengan la calma, que el mundo está a salvo de todo peligro y que no generen una psicosis colectiva que ocasione problemas a nivel mundial.
Mariana desactivó el video, donde transmitían las noticias de lo ocurrido el mes anterior. Al principio todos hablaban de lo mismo y hasta escuchó teorías sobre conspiración e invasión alienígena. Pero con el pasar de las semanas, ya casi nadie mencionaba sobre el tema.
De nuevo el administrador del blog de temas paranormales le pidió otro artículo, pero esta vez del caso de los meteoritos rosados. Le facilitó información sobre las investigaciones científicas, las locas teorías que lanzaban en la web y testimonios falsos de personas que decían haber tocado el meteorito y descubrir sus propiedades curativas. En el mercado negro incluso traficaban con meteoritos rosados falsos, alegando que curaban hasta el cáncer. Mariana rió con esto último. Como siempre, algún estafador aprovecharía el momento para sacarle el dinero a la gente a costa de su ignorancia e ingenuidad.
Hizo una selección de temas y comenzó a redactar. Por supuesto tuvo mucho cuidado de no escribir nada acerca de su última experiencia. Si realmente era espiada por la NASA, los agentes del Área 51 y demás espías al estilo Expediente X, debía tener cuidado con lo que hacía.
En eso estaba cuando recordó a Sorlac y Jaun, sus salvadores. Sentía que debía hacer algo por ellos en agradecimiento por haberlos ayudado a ella y a Hiro. Acordaron encontrarse en el edificio “B” para la próxima, pero no sabía cuándo precisamente sería el encuentro. Descubrieron que el tiempo pasaba de modos diferentes en ambos mundos. A veces eran segundos, otras unas horas. Para Sorlac y Jaun solían pasar un día entero, mientras que la sensación era de una hora aproximada.
Cuando Mariana había regresado, se fijó en el reloj de su celular y vio que pasó exactamente una hora desde su supuesta siesta. Aún así, acordaron que esperarían tres días para retornar a la “Puerta dimensional”.
Y justo pasaron tres días. Mariana debía redactar el artículo, pero con suerte, solo habrían pasado unos segundos y podría terminarlo sin problemas. Además necesitaba inspiración para crear algo atrapante y ocurrente. Y, de paso, despistar tanto a su cliente como a los fans del blog. Entre menos personas supieran sobre el transmisor, mejor.
Dio un largo bostezo y se echó a la cama. O al menos eso verían los agentes que la espiaban desde la web cam. Lo que no sabían era que ella activó el transmisor y regresó al encuentro de sus nuevos amigos.
La joven se dirigió al edificio “B” y ahí vio a Sorlac y Jaun, pero no a Hiro.
Por suerte apareció Hiro. No llevaba su uniforme de escuela, sino ropas comunes. Y colgaba de su espalda su palo de Kendo, por si acaso tuviese que volver a pelear.
Entregaron a Mariana y a Hiro unos brazaletes, los cuales se los colocaron en las muñecas. Segundos después, los mismos cambiaron de aspecto y se convirtieron en guanteletes que los cubrían desde las manos hasta las axilas.
Mariana y Hiro asintieron con la cabeza.
Empezaron a recorrer por los alrededores, en busca de algún enemigo o aliado. De vez en cuando charlaban, pero luego se quedaban en silencio.
Al final, después de horas de recorrer un gran trecho, no hallaron a nadie. Hiro dio un bostezo y dijo:
Hiro y Jaun se despidieron y se marcharon. Sorlac y Mariana siguieron caminando un buen trecho, en silencio. Mariana quería iniciar la conversación, pero no sabía de qué hablar. Con Hiro y Jaun se sentía relajada, pero con Sorlac era distinto. Había algo en él que le atraía. Y no era solo porque le pareciera guapo o por ser salvada por él. Era algo más, pero no sabía qué.
#8689 en Otros
#1463 en Acción
#1281 en Ciencia ficción
alienigenas y humanos, dimensiones paralelas, dimensiones y universos paralelos
Editado: 31.03.2023