Capitulo 18

Lucas caminaba detrás de una mujer rubia no sabia quien era pero reconoció su silueta y corrió para poder alcanzarla pero ella de pronto comenzó a alejarse cada vez mas y mas hasta que se encontró corriendo solo y la busco hasta que la vio nuevamente, y cuando al fin la tuvo cerca la giro, solo que no era quien esperaba. Ella era pelirroja le sonrió y bajó la vista el siguió su mirada y vio que ella se acariciaba el vientre. Entonces despertó.
-Dios que sueño tan raro.
Se levantó y se fue a dar una ducha cuando regresó y terminó de vestirse reviso su celular y encontró un mensaje de Catherine 
"Te veo esta noche, 😘😘😘"
Sonrió y le contestó, luego salió rumbo a la oficina donde al llegar en su despacho se encontró con la persona que creyó nunca vería allí.
-Buenos días sr Scott ¿Que lo trae a mi oficina? - se sentó e intentó disimular los nervios que ese hombre provocaba aun después de cinco años de no verlo.
-Creo que conoces la respuesta Cooper.
-Si, pero le diré lo mismo que a ella, hasta no comprobarlo no tomaré ninguna responsabilidad.
-Ahora confirmo lo que siempre pense de ti. Eres un patan.
-Para empezar yo trate a su hija mejor de lo que ella merecía mientras estábamos juntos. Pero fue ella quien me engañó y se fue ¿No le parece que tengo derecho a poner todo este asunto bajo tela de juicio? ¿No tengo derecho a dudar? 
El lo miro desafiante, si una cosa había aprendido mientras trataba con jueces inquebrantables era que la seguridad que muestras es de gran ayuda para respaldar tu argumento. Mientras Warren Scott que era un hombre que se caracterizaba por ser una persona amigable y de buen carácter, Lucas nunca fue de su agrado y fue el primero que se alegró cuando su hija y él rompieron, solo que lamento el hecho de que ella se fuera a vivir tan lejos. Ahí estaban ambos parados frente a frente viéndose como si de una batalla de miradas se tratara esperando a que alguno de los dos parpadeara o se rindiera. En vez de eso Warren se sentó y tomó aire.
-Lo tienes muchacho, todo el derecho del mundo, pero aquí quien me preocupa más es Tyler.
-Señor, a mi tambien, tube la oportunidad de conocerlo es un buen niño y se lo mucho que ama y extraña a su padre... a Trevor. 
-¿Qué piensas hacer entonces?
-Si usted espera que me case con su hija yo...
-No nada de eso, se que entre ustedes todo está más que terminado pero el chico... eso es otra cosa.
-Si el resulta ser mi hijo, estoy dispuesto a ser un buen padre para Tyler.
El Sr Scott se puso de pie y le tendió la mano, Lucas entendió el gesto e imitó la acción de su interlocutor y estrecho su mano.
-Buenos dias Cooper - Se puso de pie y camino a la puerta pero antes se giró - Espero que con Catherine las cosas vayan mejor.
El hombre salió y Lucas se quedó pasmado, no entendía nada ¿Cómo era que ese hombre conocía lo que había entre él y Cathe?
En su departamento Catherine despertó exaltada había tenido un sueño muy extraño y no entendía donde estaba hasta que oyó la alarma del reloj, cuando lo apago tomó aire y se levantó de la cama, preparo el desayuno y se cambio para salir a correr.
Mientra llevaba como un kilómetro hecho sin parar su cuerpo dijo basta pero ella continuó hasta que sintió como los músculos de sus piernas comenzaron a dolerle y tuvo que parar, sentía que agujas se clavaban en sus pulmones mientras intentaba respirar caminó unos pasos y se dejó caer de espaldas en el césped del parque mientras descansaba oyó su teléfono sonar y vio la pantalla era Lucas, intentó tomar un poco de aire y serenar su respiración no quería sonar agitada.
-Hola - hizo una mueca como si le doliera respirar.
-¿Te pasa algo?
-No ¿Por que?
-Suenas agitada.
-Si, es que estoy en el gimnasio.
-Oh, bueno. Escucha linda queria hacerte una pregunta y...
-Rojo.
-¿Que?
-El vestido que usare esta noche será rojo.
-Oh, bueno.
-¿No era eso lo que querias saber?
-No exactamente.
-¿Entonces?
-¿De donde conoces a Warren Scott?
-Es mi editor ¿Por qué?
-Creo que tu conoces la respuesta.
Ella se sentó en el césped, su respiración ya estaba normalizada, suspiro y contesto.
-Me enteré hace unos días, al mismo tiempo que la conocí y a Tyler. Luego de eso solo quise ser sincera con el hombre que me da trabajo.
-Entiendo.
-¿De verdad? Mira si para ti esto es una complicación o si te molesto lo siento, se que no debí...
-No, amor escúchame - ¿Que acababa de decir? - hiciste bien, después de todo iba a presentarte a Tyler el domingo.
- ¿A si?
-Si, le prometí llevarlo a un partido y planeaba invitarte para que lo conozcas... para que se se conozcan.
-La idea suena bien - ella sonríe - después de todo creo que si resulta que es tu hijo va a tener que acostumbrarse a esta situación inusual.
-Ni me lo menciones, todo el asunto me esta dando dolor de cabeza.
-Bueno creo que se como calmar eso.
-¿De qué modo?
-Pasa por mi a la hora de tu almuerzo y te digo.
-Eres cruel, dame un adelanto.
-No por teléfono. Ven por mi estaré en la revista esperándote.
-Esta bien, te veré más tarde entonces. Te quiero
-Te quiero.
El colgó el teléfono y sonrió, luego pensó en cómo la había llamado.
-Dios quede como un idiota.
Pero lo cierto era que estaba enamorándose de ella como nunca lo había estado de ninguna otra chica y lo asustaba mucho, a pesar de lo poco que la conocía estaba seguro que ella era especial y eso era lo que lo impulsaba a llevar la relación lentamente, contando también la situación de su ex como un factor en su decisión.
Cathe se puso de pie y regreso a casa, se dio una ducha después de arreglarse tomo sus cosas y se fue para encontrarse con su amiga Olivia, no sabía porque le había mentido pero lo que sí sabía era que le había dado un poco de pánico cuando él la llamó amor, se escucho bien, pero ella lo sintió extraño, aun no tenían una relación formal y ella aun no estaba preparada para usar apodos u otro tipo de sobrenombres.
Al llegar al lugar donde habían quedado su amiga estaba allí esperando tomando un helado, al verla acercarse levantó su mano y la saludo esperando que la viera.
-Hola nena ¿Como estas?
-Muy bien - se sentó frente a ella - cuéntame ¿Has visto algo ya?
-Si, varias opciones pero tu sabes, mis gustos no son los mismos que los tuyos.
-Por eso es que necesito tu ayuda.
-Me encanta que me pidan asesoría cuando de moda se trata, pero ¿Vas a contarme con quien sales?
-Claro que si. Es el primo de Connor.
-Ja - sonríe - lo sabía.
-Si, si. Todas dijeron lo mismo. Y si, me gusta muchísimo, besa increíble y hace increíblemente otras cosas.
-Que lanzada, no quería tanta información.
-¿Segura?
-Claro, no soy Marcy, solo quería saber quién era el afortunado.
-Ya cambiando de tema ¿Cómo va todo con Steve?
-Bien, de hecho... - levanta la mano y le muestra un anillo - me pidio matrimonio.