• Capítulo 1 •

¿Quién eres?

- Alena

Despierto con el sonido de un timbre y es cuando noto que me quedé dormida en clases de historia, son tan aburridas pero, para mi buena suerte hoy es viernes y esa era mi última clase del día. También me faltó mencionar que es viernes y también es mi cumpleaños, si, mi cumpleaños número 18.

Se supone que es algo especial, no es que no me guste mi cumpleaños pero no tengo con quién festejarlo debido a mi falta de amigos. Supongo que lo pasaré solo con mi mejor amiga y la única que tengo como cada año desde que tengo memoria.

Ema, ella es una buena amiga, casi una hermana. Ha estado conmigo desde pequeñas ya que somos vecinas y hacer más amigos no se me da.

Ha estado preparando un regalo sorpresa para mi el cual se supone que es sorpresa pero debido a que solo somos nosotras es difícil no notar cuando se pone misteriosa y por motivos extraños no quiere que entre a su habitación. Solo bastó que me dejara sola un rato y ya sabía todo. Como también sabía que volvió del colegio sola para preparar algunas cosas.

Al llegar a casa encuentro todo oscuro y en silencio típico cuando de pronto la sala se ilumina y se oyen dos voces

- ¡Feliz cumpleaños Alena! - Dicen ambas al unísono.

Ema se acerca a felicitarme y luego lo hace ella, mi madre.

- Feliz cumpleaños mi pequeña - dice emocionada dándome un enorme abrazo el cuál recibo con mucho cariño. Ella es mi única familia después de todo; no tengo hermanos y de mi padre nunca me contaron nada aunque quise, luego solo dejé que el tiempo pase sin prestar demasiada atención, supongo que si no quiso quedarse conmigo no merece la pena.

Después de saludarme me dan cada una un regalo y nos sentamos a tomar chocolate caliente en la sala.

- ¿Te gustó mi regalo? pregunta mi amiga a la espera de una buena respuesta.

- Por supuesto que si Em, tu siempre sabes que regalar - me había regalado una cadenita preciosa de plata y claro lo que no podían faltar una bolsa llena de gomitas ácidas, las amo.

Lo que resta de la tarde lo pasamos hablando en la sala, mi mamá pregunta que tal nos fue en la escuela y nos cuenta sobre su día, ella es publicista en una empresa de la ciudad por lo que muchas veces está ocupada con su trabajo o en eventos empresariales. Su teléfono suena y se aleja para contestar, no tarda demasiado y vuelve con nosotras

- Hija lo siento, tengo que asistir a un evento de la empresa en dos horas, así que no podré quedarme mucho más tiempo contigo pero es algo importante y no podré faltar, ya me permitieron faltar al trabajo hoy. De todos modos pueden quedarse aquí esta noche ambas o pueden salir hoy después de todo es viernes aunque no sea lo tuyo tal vez te diviertas.

- Está bien mamá, Em y yo nos quedaremos a ver películas, seguro estaremos bien.

Se queda más tranquila y se va a su habitación a prepararse mientras Em y yo nos quedamos en la sala.

- Alena es tu cumpleaños por favor dime que vamos a salir a bailar. Necesito un poco de diversión después de mi espantosa ruptura y solo he estado encerrada estas últimas dos semanas. A demás tu mamá te da permiso, si no vas es solo de amargada - dice ella mientras me mira emocionada porque diga que si supongo.

- Deja de mirarme así me haces sentir una mala amiga que no quiere que seas feliz. Aunque si es lo que realmente quieres saldremos, a mi pesar - le doy una mirada cansada y ella se tira a abrazarme eufórica.

- Supongo que buscaré algún chico guapo para divertirme un rato, tal vez así pueda olvidar lo sucedido este último tiempo, o tal vez solo me emborrache.- Dice con total normalidad mientras yo la observo. No puedo juzgarla, a pasado por mucho con su ahora ex novio. Tenían una relación poco sana con muchas peleas hasta que ella se enteró que él la engañaba desde hace semanas. Em terminó destrozada y aún más al enterarse que la otra chica iba a nuestra misma escuela.

Ella es asombrosa así como también hermosa, de pelo castaño, su rostro de facciones delicadas pero con un toque sensual con sus ojos verdes tan profundos. Supongo que lo superficial no lo es todo pero aún así ella no merecía eso.

Charlamos por un largo rato de cosas triviales y se nos pasa la hora, tanto que mamá sale de su habitación ya lista para irse al evento. Lleva puesto un vestido largo color bordó que se ajusta en su cintura y la hace ver más joven de lo que es. Con un simple maquillaje pero que de todos modos le queda espectacular.

- Estás hermosa Valerie - dice Em. Ellas se tienen mucha confianza después de todo Ema y yo siempre estamos juntas.

- Gracias Em- le dice mamá. Ella pasa a despedirme antes de irse.

-Diviértete Alena - Dice mamá saliendo de casa con una sonrisa.

Luego de que se va preparamos algo para comer con Ema y una vez terminada la pequeña cena Ema va a su casa a prepararse para salir, aunque seguro vendrá trayendo ropa para que la ayude a elegir que ponerse. Me dirijo a la primera planta de la casa donde se encuentra mi habitación, me doy una ducha y elijo que ponerme. Opto por un vestido azul marino que me regaló mi mamá hace unos meses, Es ajustado arriba con mangas largas translucidas, ceñido en la cintura y luego suelto. Se ve muy lindo. Me hago un maquillaje sencillo, aunque no salga mucho me gusta maquillarme en casa y practicar. me coloco unos zapatos negros y estoy lista para bajar cuando tocan la puerta de mi casa.

Bajo de mi habitación, tal vez es Ema quién ya terminó de arreglarse pero al abrir la puerta mi mirada choca con unos ojos negros profundos como una noche oscura de invierno. Es un chico, su piel es pálida y el es demasiado atractivo en muchos sentidos. Es muy alto, lleva puesta ropa oscura pero no como si quisiera pasar desapercibido. Me quedo atontada por unos segundos y creo que estoy sonriendo, que patética.

- Alena - dice a modo de saludo.

- ¿Quién eres? - pregunto saliendo de mi atontado ser cayendo en cuenta que un extraño está en mi casa y que sabe mi nombre, mierda, ¿me conoce? - ¿Cómo sabes mi nombre? - vuelvo a preguntar ya que éste no contesta.