¡querido Crush! [terminada]✓

Especial parte 2 - Narrador Omnisciente

Algun día del mes de agosto. 

Había llegado el día sábado, Rosalie y Lucas tenían que hacer una tarea juntos, y ambos estaban nerviosos. Rosalie, aunque lo negara mil veces estaba feliz de poder hablar, aunque sea de tareas con Lucas. El joven Lucas por otro lado, quería preguntarle muchas cosas a Rosalie, aunque él era un poco tímido porque ¡Vamos! Esa chica le gustaba y no porque era ella que le mandaba las cartas, no. Ella le gustaba de mucho antes, y él jamás imaginó que era ella la chica anónima. Rosalie siempre pensó que él nunca se fijó en ella, pero cuan equivocada estaba. 

Ambos habían quedado por chat, de verse en la tarde en un café internet, en un lugar apartado a las 2 de la tarde. 

El día de ambos empezó totalmente diferente, mientras que a las 7 am Rosalie salía a correr, Lucas daba media vuelta en su cama para seguir durmiendo. A las 9 de la mañana Rosalie tenía que acompañar a sus padres a una reunión con “personas importantes” en otras palabras, gente ricachona que se reúne una vez cada tres meses para hablar estupideces; Dinero aquí, Dinero allá, bla, bla, bla… eso hasta las 12 medio día. Lucas por otra parte se levantó a las diez y media, desayuno cereal, arreglo un poco el departamento y se volvió a acostar para levantarse a la una y media he ir a su reencuentro con Rosalie. 

Dos horas después, Lucas estaba llegando con su laptop y un par de cuadernos al café internet. Cuando entro al lugar se sorprendió ver que no había muchas personas, un lugar con un toque Hippie, pero a la misma vez Retro. Eso a Lucas le gustó. 

No habiéndose dado cuenta, por estar observando todo el lugar, una señora regordeta, con cabello enmarañado, ropa holgada y una radiante sonrisa le preguntó—Buen día, joven. Bienvenido al Café Internet Betta's ¿Gusta sentarse? 

Lucas se sentía un poco cohibido por la atención dulce de esa señora y como vio que Rosalie no había llegado no le quedaba de otra que esperar a que llegara. 

—Claro, me gustaría sentarme. 

La señora de sonrisa amable le musitó un “sígueme”,  y lo guío a una de las mesas del fondo. 

—¿Desea algo de comer o tomar joven? —Pregunto la señora sacando una libretita para apuntar el pedido. 

Lucas maravillado con todo el lugar susurro un “Si” y carraspeo, la señora soltó una risita y le dijo— No te preocupes, veo que te gustó mucho el lugar de mi esposo. 

—Si, su esposo tiene buen gusto, -dijo Lucas- es un hermoso lugar 

La señora le dio una sonrisa nostálgica —Bueno ¿Vas a pedir algo? 

—Si, claro. Quiero un café negro, gracias. 

—Hmmmmju. Un café, si, si. Listo. -murmuraba la señora- te lo traen enseguida. 

Dijo para luego retirarse y dejar solo a Lucas. Así que Lucas sacó su celular para ver redes sociales mientras llegaba Rosalie. 

La chica por otra parte estaba preparandose para ir a su encuentro con Lucas. 

Rosa 

Llamo la madre de Rosalie desde el umbral de la puerta observando cómo se arreglaba su hija, dándose cuenta de su extraño actuar 

—Rosalie Iveth Clifford, te estoy hablando. 

Rosalie detuvo su quehacer para poner atención a su madre. Ella sabe que su madre no la llama por su nombre completo por nada, ya que siempre le dicen “Rosa”, así que su madre debería decirle algo importante. 

—Rosalie… -Frunciendo los labios preguntó- ¿Estas enamorada de alguien? 

Rosalie quedó en blanco y preguntándose ¿Lo estoy? No se había planteado esa pregunta jamás, entonces recordó a Lucas; su manera de sonreír, sus ojos, sus gestos cuando está nervioso, la manera de morderse el labio inferior cuando está concentrado en algo, el cabello desordenado y el aire despreocupado que tanto le gustaba. Si en conclusión estaba jodidamente enamorada de él, pero no lo iba a admitir jamás y menos a su madre, porque eso desataría la tercera guerra mundial. 

—¿Qué…? ¿Qué clase de pregunta es esa? —Respondió fingiendo enojo— ¿Qué tiene de malo enamorarse? Y en todo caso NO, no lo estoy. ¿Por qué? 

La madre de Rosalie no le creyó en lo más mínimo, pero trato de que no se hiciera notar— ¿Por qué? Está claro que algo raro traes, vas a hacer una simple tarea. Y has demorado como una hora y media arreglándote. ¿Qué más voy a pensar?, Más te vale señorita porque no voy a aceptar que estés con cualquier escuincle de la calle. 


—Me voy amá, no te preocupes tus billones no se los va a robar nadie y en todo caso la que va a estar con el escuincle soy yo, de cualquier modo, no es así. Te veo luego. 


Saliendo rápidamente y dejando con la palabra en la boca a su madre Rosalie salió sin tomar su auto, ese día quería ser una persona normal. Media hora después llegó al lugar acordado con Lucas, en cuanto entro divisó a Lucas en el fondo y su cuerpo se tensó solo de pensar estar a solas con él. Lucas levantó la mirada y olvido de como respirar un momento en cuanto la vio llegar a la mesa en la que se encontraba. 

—Hola Lucas. 

Le saludo Rosalie que para él, fue música para sus oídos.
 

(...) (...)

Voy a subir un capítulo todos los días, esta parte de historia la voy a dividir en varias partes.

Gracias por leer.

Feliz año nuevo, querido lector❤️✨

XOXO 
Acá
-Betzaida❤️ 

 



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En el texto hay: romance, amor, amor adolescente

Editado: 27.03.2021

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