Querido Owen:
Han pasado varios meses y no te he vuelto a ver desde nuestra discusión. No contestaste mis llamadas, tampoco los mensajes y simplemente no me dejaste explicarte lo que en realidad sucedió.
No he dejado de vivir por no tenerte a mi lado, claro está, pero si me he preguntado una y mil veces que será de tu vida. Miro tu instagram y veo con ilusión los lugares a los que has ido a participar con tus bailes.
Yo estoy en las mismas, viajando de un lado a otro, disfrutando de la vida, pero siempre recordándote.
Hemos estado en las mismas ciudades, pero en días diferentes.
Hace meses que ya me gradué y con gran desilusión puedo decir que ese día no fuiste a vernos ni a mí ("Que es comprensible") ni a tu hermano.
Apenas duramos algunos meses, pero duré un año entero enamorada de ti (así que supongo que eso también vale) y fuiste mi primer amor porque nunca me fijé en nadie...Llegaste tú (bueno, yo) y todo se puso de cabeza, no me correspondiste porque no me conocías, pero allí estaba yo, enamorada de alguien que un año después supo de mi existencia.
Te extraño ¿sabes?
Es doloroso que después de algunas cosas juntos, simplemente todo se derrumbara y míranos, ya es noviembre, ha pasado cinco meses y no hemos vuelto a hablar.
Es frustrante.
¿Y sabes qué es lo más frustrante? Que he comparado a miles de personas contigo y la verdad... ninguna es como tú.
Pararé de escribir por hoy, porque simplemente las lágrimas no me dejan en paz.
Buenas noches en donde quiera que estés, Owen.
Aún con cariño: Amanda.
(No enviado)
Editado: 01.03.2023