“En memoria de Helen McCrory”
-Buenas noches Camille -saludo el rostro de su padre por la chimenea
-Padre, madre
-Será rápido Camille -dijo su madre- estamos ocupados
-Claro, quedé en Hufflepuff, nadie sospecha nada y estoy bien -mencionó
-Me parece bien, nos vemos hija -la señora Beauvoir desapareció
-Le mois prochain pareil, va dormir
Apenas desapareció el fuego se apagó para luego volver a encender como normalmente, subió a su habitación pero hizo caso omiso a la orden de su padre. Sentada en el suelo y con la carta en el regazo empezó a redactar lo que sería la respuesta a la lechuza de Amelie.
Por la mañana Camille estaba con buen humor la conversación con sus padres había sido práctica ella estaba segura que confiaban plenamente en sus capacidades y si hubiera algún tipo de inconveniente sabría cómo resolverlo. Pero toda sonrisa fue eliminada al ver al espantapájaro de Hermione Granger, era idea suya o la morena traía el cabello peor que siempre.
-¿Que los muggles no conocen la higiene personal, sangre sucia?
-Pansy -reprochó Blaise que venía detrás
-Solo decía
Ambos muchachos se sentaron en sus respectivos lugares y esperaron a que comenzara la clase.
-Está claro que lo único sucio no es tu sangre -masculló la francesa solo para Granger
Cuando esta ya estuvo instalada en su asiento Hermione se acercó más a sus amigos para conversar
-¿Escucharon lo que me dijo?
-Sabes como es Parkinson -habló Harry- tú solo ignorala
-No Parkinson, si no Camille
-¿Qué fue lo que te dijo? -preguntó Ronald
-Se refiero a mi sangre
-¿Y…? -Ron no terminaba de comprender
-De forma despectiva, Ron
-Sinceramente Hermione no creo que una hufflepuff te insulte de esa forma -Harry opinó y giró para ver a la persona de la que hablaban
Los otros dos lo imitaron y por unos cuantos segundos observaron como Camille hojeaba su libro. El peso de sus miradas alertaron a la rubia que rápidamente apartó su atención del libro para ponerla en ellos, una sonrisa de su parte hizo que Ron se la devolviera.
-¿Qué crees que haces? -y con un libro Hermione golpeó a Ron en el brazo
-Solo soy cortéz, Mione
Un carraspeo del profesor y toda la clase se sumió en un silencio para atender la lección día.
Si antes Hermione estaba al pendiente de Camille para saber en qué momento levantaría la mano para responder las preguntas ahora estudiaba cada uno de sus gestos para tratar de comprender lo que había pasado.
Al término de la clase la leona observó como su nueva compañera salía del aula compañía de algunos estudiantes, notó como sus ojos no reflejaban lo mismo que su radiante sonrisa o tal vez solo era una paranoica.
-Hermione no creo que debas tomarle mucha importancia al asunto
-Harry sé lo que oí y para ser sincera no me cuadra mucho su historia
-McGonagall nos dijo todo lo que sabía
-Igual tengo un mal presentimiento -dijo y un escalofrío recorrió su cuerpo- ¿Ustedes no lo sienten?
-No -se les unió Ron- es simplemente una chica que perdió el año en su antigua escuela por problemas familiares y quiere terminar el año escolar aquí
-Y por eso es muy extraño, ¿por qué no hacerlo en Francia?
Los tres se quedaron últimos en la clase
-Todos la adoran, parece ser una linda persona y si estás así porque ahora tienes un poco de competencia en clase…
-No puedo creer que seas tan superficial Harry, la competencia no me incomoda -agarró sus pertenencias y se retiró de la clase no sin antes agregar un comentario más- es su sorpresiva presencia en esta escuela
-Normalmente estoy de acuerdo con ella -dijo Ron a Harry- bueno muy pocas veces pero ahora sí se pasó
-Ya se calmará y espero que pronto
Los dos chicos salieron por fin del aula y ella pudo moverse de su escondite, Pansy Parkinson había permanecido oculta al fondo sin ser vista por ninguno de los tres. Y aunque le pareciera horrible pensaba igual que Granger, la nueva guardaba secretos y ella se encargaría de descubrilos.
-Hola
Para el almuerzo el grupo conformado por Sophia, Hannah, Justin, Susan y Ernie no pudo resistirse en acompañar a su, hasta ahora desconocida, nueva compañera. A pesar de compartir clases y casa ellos prefirieron dejarla ser por su cuenta en el colegio. Ahora que ya la habían visto socializar decidieron que era el momento perfecto para brindarles su amistad incondicional.
-Hola -respondió amablemente Camille
-Sonará muy loco pero hasta ahora no nos hemos presentado formalmente -dijo emociona Sophia al ver que la chica no los rechazaba
-Ellos dos son Ernie Macmillan y Justin Finch-Fletchley
-Un gusto -respondieron los mencionados
-Y ellas son Susan Bones y Hannah Abbott
Ambas chicas le sonrieron y la saludaron con un movimiento de mano
-Yo soy Sophia Wembley
-Encantada de conocerlos a todos
Una vez presentados los hufflepuff empezaron a entablar rápidamente conversación, le hablaron de sus familia, de sus otros amigos, incluso de todo lo que habían vivido en los años anteriores en el colegio.
Camille se vio un poco abrumada con tantas anécdotas y risas para ella la hora del almuerzo había sido un descanso de toda la tención y por alguna razón sabía que de ahora en adelante ya no tendría esa tranquilidad.
Dos pares de ojos no habían dejado pasar desapercibida aquella escena tanto leona como serpiente habían juntado sus fuerzas para que Beauvoir se sintiera vigilada y un más incómoda de lo que ya estaba.
-¿Tú no piensas comer nada? ¿Es que estás a dieta?
Pansy salió de su concentración para responderle a su amigo.
-Solo estaba pensando, algo que claramente tú no haces -probó un poco de su platillo y siguió hablando- y para tu información mi querido Blaise yo no necesito dietas ya soy perfecta
Editado: 24.06.2021