CAPÍTULO 14: Venganza con "V" de vergüenza

Tres días después, como habían acordado, el plan de venganza se puso en marcha.

A la hora de la cena Camille le envió una invitación a Simmons para encontrarse a la media noche en la Torre de Astronomía. Al parecer todo iba de acuerdo al plan, Alex le había dado una sonrisa al recibir el pergamino.

-Pensé que sería yo el que tendría que buscarte

-Sí, bueno supongo que...

El chico se acercó a ella y empezó a repartir besos por su cuello, sus manos acariciaban su cintura. Si no hubieran empezado con el pie izquierdo y él no fuera un sangre sucia ella podría estar disfrutando la situación pero nada de eso era así, por lo que no veía la hora de separarse de él.

Camille separó lentamente el rostro del chico con su mano en cuello, le dedicó una mirada lasciva. El brillo de deseo en los ojos del gryffindor era tan real que ella consideró dedicarse a la actuación.

-Espere por esto mucho tiempo

La chica se hizo a un lado y una sombra se hizo presente tras ella, pero no era una sombra cualquiera, era un chico, un slytherin. Draco Malfoy.

-Y yo esperé mucho por esto

Sin necesidad de su varita, Malfoy derribó a Alex.

-Desmaius -Camille sí usó su varita- necesitaré un baño ácido

-Siempre quise hacer eso -estaba lleno de adrenalina

-Muy bien, espero que después no te estés quejando del dolor

-Casi ni lo sentí, los anillos impactaron más

-Y decían que tener varios era un desperdicio. Hay que empezar.

En la oscuridad esperaban los diversos artilugios que habían conseguido en Hogsmeade. Entre ellos una cámara y el maquillaje de la rubia, no quería gastarlo de esa manera pero en esta vida se debían hacer sacrificios.

-Bueno Simmons llegó la hora que todo el mundo mágico te vea como viniste al mundo -inclinó su cabeza al verlo- aunque no hay mucho de lo que puedas estar orgulloso. Malfoy ponle esto.

La sesión fotográfica dio inicio, Malfoy en la cámara y Beauvoir dándole vida al modelo. Lo vestía, lo desvestía, lo maquillaba, lo desmaquillaba; colocaba el cuerpo en poses extrañas y adornaba el ambiente con la variada utilería que habían conseguido en las tiendas de Hogsmeade. Los veían raro cuando hicieron su pedido pero prefirieron no dar explicaciones.

Ahora Simmons estaba hecho todo un maniquí al gusto de Camille.

-Se acabó el rollo -avisó Draco

-Bueno, terminamos entonces

-Sinceramente no esperaba que fueras así

-Lamento decepcionarlo señor Malfoy

-Todo lo contrario

Se quedaron viéndose a los ojos por un momento una media sonrisa en cada rostro pero el quejido Alex los espabiló.

-Sin evidencias -Camille agitó su varita y todos artilugios quedaron guardados en un baúl para luego sumergirse en la oscuridad de la torre- no hay incriminados

-Obliviate -susurró el slytherin apuntando al desmayado- sin recuerdos tampoco hay incriminados

-Levicorpus -dijeron ambos y Simmons se movió por el aire

Lo condujeron con sumo cuidado y silencio para que nadie los atrapara con las manos en la masa. Se alejaron considerablemente de las escaleras y lo dejaron tendido en el suelo con su ropa mal puesta y cubierto con el saco que llevaba puesto, con el frío que hacía seguro cogía un resfriado.

-Estás seguro que recibirán y publicaran las fotos ¿cierto?

-Completamente -colocó la cámara junto a una nota en la caja para luego dársela a la lechuza que aguardaba- Corazón de Bruja nunca rechaza un chisme de Hogwarts

-¿Quién lo escribe?

-¿Por qué se supone que yo deba saberlo?

-Je pensais que tu savais

El ave se alzó en vuelo alejándose poco a poco de los estudiantes dejándolos solos en la oscuridad. Decidieron regresar a sus habitaciones y dar por finalizada la venganza del día, en dos días aparecían las fotos del gryffindor en la revista más vista por los jóvenes magos.

Antes de separar sus pasos por completo se detuvieron para despedirse ya que probablemente sus caminos no volverían a juntarlos. Camille tenía prohibido entablar amistades por seguridad y sabía que Draco Malfoy era más peligroso que los hufflepuff. Draco por su parte no quería depositar su confianza en nuevas personas y estaba seguro, por alguna razón que todavía no podía comprender, que con ella sería muy fácil.

-Fue un placer conocerte -dijo él ofreciendo su mano

-Igualmente -respondió ella- aunque debo admitir que me hubiera gustado hacerlo en una situación diferente

No mentía, tal vez y solo tal vez si sus ojos se hubiesen cruzado con los de ella más antes, un par de años para ser exactos, no tendría por qué estar estrechando su mano en señal de despedida. Aunque la marca del chico también pudo haber sido un problema.

-No creo que fuera tan divertido como esto, claramente lo que acaba de pasar no la razón por la que lo hicimos

-Entiendo tu punto

-Avísame si alguna vez Potter se mete contigo, tengo ganas de dejarlo en ridículo también

Camille sonrió

-Dudo que Potter se meta en este tipo de problemas. Lo veo muy moralista.

-Sí, puede ser

Tomaron aire al notar que sus manos aún estaban unidas, las apartaron con un poco de vergüenza y sintieron las voces de algunos espectros a lo lejos.

-Buenas noches… Draco

-Buenas noches, Camille

Esa noche cada uno durmió con una idea similar pero a la vez diferente, la mente de Beauvoir divagaba por el Bosque Prohibido mientras que la de Malfoy se centraba en sus preciosas escaleras.

Esperaron pacientes sus resultados el día de la entrega del correo. Junto con los ejemplares del Profeta los estudiantes reciben sus revistas y en primera plana una foto de Alex Simmons les implanta la curiosidad para adentrarse en las páginas y encontrarse con muchas más y algunas notas nada favorecedoras del chico de Gryffindor.

-¡No puedo creerlo! -exclamó una chica junto a Camille